TRIBUNALES
El Supremo confirma la estafa del Forum y fija penas de 45 años de cárcel para los 16 acusados
La sentencia del Alto Tribunal rebaja la pena al ex presidente a los 11 años y 10 meses por «dilación indebida»
Después de más de 15 años de espera , el Supremo acaba de confimar la estafa piramidal con el agravante de «engaño» del Forum Filatélico y fija penas de hasta 45 años de cárcel para los 16 condenados.
El auto de la Sala II del Tribunal Supremo, al que ha tenido acceso este periódico, ratifica en su totalidad que los hechos probados por la Audiencia Nacional constituyen un delito de estafa, «agravada en razón de su cuantía, ya que los clientes fueron captados mediante engaño». Los magistrados sentencian que está demostrado que los inversores desconocían que los sellos adquiridos «no valían ni una pequeña parte del dinero que entregaban», que no se revalorizaban, y que sólo mediante la captación de nuevos clientes la empresa seguía devolviendo el capital invertido más los altos intereses garantizados, superiores a los ofrecidos por los bancos.
El Alto Tribunal condena a 16 acusados con penas que oscilan entre los 6 meses de prisión y los 11 años y 10 meses de cárce l, la pena más elevada que le impone al expresidente de Fórum Filatélico, Francisco Briones , al considerar probado que cometió un delito continuado de estafa agravada en concurso con insolvencia punible y continuado de falseamiento de cuentas anuales, así como blanqueo de capitales. Por esto último les condenado, además, a pagar pagar una multa de 49,7 millones de euros.
La sentencia, de la que ha sido ponente el magistrado Miguel Colmenero, según recoge el escrito publicado por el Supremo, establece que la indemnización a las víctimas de la estafa de la que deben responder los acusados Briones y Juan Ramón González Fernández, quien fuera el asesor jurídico de la empresa, y subsidiriamente Fórum Filatélico, se determinará en ejecución de sentencia en atención al total de las cantidades efectivamente entregadas por los clientes a Fórum Filatélico, minorada en las cuantías percibidas por los perjudicados con motivo de la liquidación de la compañía, y sin contar los intereses pactados que no hubiesen sido abonados.
Cabe recordar que en Castilla y León la estafa del Fórum Filatélico atrapó a más de 42.000 damnificados , en sus mayoría de Valladolid, con más de 600 millones de euros invertidos en uno sellos que ahora, por fin, ven probado que eran una auténtica estafa.
Eso sí, el Alto Tribunal corrige la sentencia de la Audiencia Nacional en algunos aspectos técnicos. Sin ir más lejos, reduce la condena a Briones de 12 años y 4 meses a 11 años y 10 meses debido a que, «en relación con el delito de blanqueo de capitales, al concurrir una atenuante, dilaciones indebidas, la pena debió imponerse en su mitad inferior, cuyo máximo era de 3 años y 3 meses, que es lo que se establece, en vez de los 3 años y 9 meses que impuso la Audiencia», puntualiza el escrito de sentencia del Supremo.
Claro que la mayor corrección es aquella que tiene que ver con el ex asesor jurídico de Fórum Juan Ramón González , cuya condena se rebaja de 6 años y 3 meses a 3 años y 3 meses de prisión, más una multa de 15,9 millones, porque el tribunal entiende que, en relación al delito de estafa, su actuación encaja como cómplice y no como cooperador necesario.
Por otra parte, la sentencia absuelve a cuatro de los veinte condenados por la Audiencia Nacional, al considerar que no hay prueba suficiente contra ellos y que debe prevalecer su presunción de inocencia. Y respecto al testaferro Pedro Ramón Rodríguez , se le reduce en 6 meses la pena (de 3 años y 6 meses a 3 años) como cómplice de la estafa, porque las acusaciones pedían para él 3 años de prisión y ese límite no puede rebasarse en virtud del principio acusatorio.
Así era la estafa
La sentencia explica que Fórum Filatélico ofrecía al público la venta de lotes de sellos asegurándoles que, transcurrido el plazo fijado en el contrato se encargaría de la venta de los mismos en el mercado a un precio superior y que, de no encontrar comprador, la misma Fórum los adquiriría. Esto último era lo que ocurría prácticamente en todos los casos. Además, les aseguraba una rentabilidad durante ese plazo, superior a la que ofrecían las entidades bancarias.
El escrito de 325 páginas de la sentencia recoge que los clientes ignoraban que en realidad el dinero que la sociedad recibía de ellos se destinaba en parte a la compra de nueva filatelia a precios muy inferiores a los que luego se vendían o adjudicaban a los clientes, en parte a pagar a los clientes que deseaban recuperar su inversión o a quienes percibían el interés asegurado, en parte al funcionamiento de la empresa y en parte se desviaba hacia el patrimonio personal de los acusados.
E ignoraban también que la única forma de devolver el dinero a quienes lo solicitaban al finalizar los contratos o de pagar los intereses asegurados era disponer de las cantidades de dinero entregadas por los inversores, ya que Fórum no tenía otras fuentes de ingresos.
La sentencia indica que algunos acusados crearon y otros participaron en circuitos creados con sociedades interpuestas mediante las que, haciendo circular la mercancía de forma real o supuesta, conseguían, con sucesivas compraventas, incrementar artificialmente el precio de los sellos que finalmente adquiría Fórum.
También procedieron a extraer clandestinamente de Fórum sellos ya adquiridos por ésta , que hacían circular por él circuito de esas sociedades para que finalmente volvieran a Fórum, que así pagaba nuevamente por los mismos sellos. Tanto en uno como en otro caso, esos circuitos además de ser utilizados para encarecer artificialmente el precio de los sellos, se empleaban para desviar dinero a favor de algunos de los acusados.
El Supremo ratifica que los hechos probados son constitutivos de un delito de estafa . Explica que la compraventa de sellos o, de otros objetos, con pacto de recompra, puede hacerse de forma lícita, «pero en el caso, la voluntad de los inversores se captaba mediante engaño, y ese engaño era lo que determinaba los actos de disposición que aquellos realizaban en su propio perjuicio, al situar su dinero en una ignorada situación de alto riesgo de pérdida», remarca la sentencia.
Desvío de capitales
Respecto del delito de insolvencia punible, la sentencia da por probado también que el negocio producía pérdidas constantes, debido al compromiso de recompra con intereses y a que la única fuente de ingresos era el dinero de los inversores. Los grandes costes de producción, organización y distribución, debidos al mantenimiento de la red comercial y a la compra masiva de sellos, más la tesorería que requería la devolución del dinero a los inversores y el abono de los intereses convenidos, incrementaban de modo progresivo la situación de insolvencia. A ello ha de añadirse que algunos acusados desviaban dinero hacia sus patrimonios personales . Todo ello hacía que el activo no pudiera hacer frente a las deudas.
En todo lo que tiene que ver con el blanqueo de capitales , se condena a algunos acusados en cuanto que han intervenido en operaciones destinadas a ocultar el origen del dinero que los autores de la estafa desviaban a su favor, así como la identidad del propietario de esas cantidades, en muchos casos utilizando sociedades que solo indirectamente eran controladas por los autores del delito de estafa.