Piden 3 años de cárcel para los padres que dejaron morir al famoso perro ‘Cooper’
El fiscal solicita un año para el padre, y las acusaciones 3 años y 8 meses para los dos cónyuges, que mantuvieron agonizante a ‘Cooper’ en la cocina rodeado de moscas y gusanos / El juicio se celebra el jueves en Penal 2
Es uno de los juicios con mayor petición de condena por maltrato animal en Valladolid, aunque está a la altura de la agonía que sufrió ‘ Cooper ’, la mascota de la casa, tan solo un cachorro de seis meses, que fue apagándose desnutrido y lleno de moscas y gusanos en la cocina de la casa . Todo a la vista del matrimonio que este jueves se sentará en el banquillo del Juzgado de lo Penal 2 . Y peor aún, ante los ojos atónitos de la hija menor de la pareja de seis años.
Si todo lo anterior ocurrido en un domicilio de la calle Jesús de Santovenia es repulsivo, hay que añadir que al can, un macho mestizo, le taponaron la mandíbula con un amasijo de trapos bien compactado (ver imagen) para no poder comer ni beber y así, en una agonía lenta y macabra, los moradores de la casa, seguían su rutina en la cocina de la vivienda como si hubiera un muñeco olvidado en el suelo.
La paradoja del caso es que ‘Cooper’ llegó a la familia, en un acto de cariño, ya que fue adoptado en marzo de 2018. Pero los adoptantes adoptante dieron un paso inexplicable al extremo opuesto al mantener el cadáver encerrado y tapado bajo mantas durante varios meses. En la boca del animal se encontró un trapo con el que pudo producirse el ahogamiento del perro.
Tras conocerse el caso, que investigó el Juzgado de Instrucción 2, se produjeron protestas en Valladolid convocadas por 20 colectivos para pedir el endurecimiento de las penas contra el maltrato animal . Ahora, los progenitores se exponen a penas de cárcel. La Fiscalía sólo inculpa al varón como presunto autor de un delito continuado de maltrato animal y le pide un año de prisión y tres de inhabilitación para ejercer profesión, oficio o comercio relacionado con los animales.
Dos acusaciones
Las acusaciones populares que ejercen de forma independiente las asociaciones animalistas Libera y Defaniva , solicitan penas que suman tres años y ocho meses para cada uno de los integrantes de la pareja por un delito continuado de maltrato animal y otro de maltrato con resultado de muerte , teniendo en cuenta la agravante de abuso de superioridad, ya que el cánido tan solo tenía seis meses.
Además, piden que la inhabilitación para trabajar con animales se extienda a lo largo de cuatro años y medio por el primero de los delitos y hasta seis años por el segundo.
La acusación popular considera que, por un lado, se produjo un delito continuado de maltrato del perro, que fue adoptado por la familia a través de Defensa Animal Valladolid (Defaniva) , algo que considera que se puso de manifiesto en la declaración policial de la menor que vivía en el domicilio, y separa como un hecho diferenciado la muerte del animal como resultado de un maltrato ocurrido un día.
Además, mientras que el Ministerio Fiscal dirige su acusación sólo contra el varón de 41 años al que inicialmente investigó la Guardia Civil por un presunto delito de maltrato, las acusaciones populares consideran responsable también a su pareja, ya que conocía los hechos, evitó denunciar el maltrato al que era sometido el can y además colaboró y encubrió su muerte.
Los hechos tuvieron lugar el 20 de agosto de 2018, cuando la Guardia Civil recibió una llamada de la presidenta de la Asociación Protectora de los Animales Defaniva, quien comunicó que dos miembros de la asociación acudieron a un domicilio de Santovenia de Pisuerga para comprobar el estado en que se encontraba un perro que dieron en adopción a los miembros de la familia que reside en ese domicilio.
Cocina sellada
Sin embargo, según les informó una persona de la localidad, hacía tiempo que no lo veían, y les aseguró que el perro llevaba muerto varios meses. Una patrulla del Puesto de la Guardia Civil de Cabezón de Pisuerga, así como el Equipo del Seprona de Valladolid, acudieron entonces al domicilio.
En la cocina, cuya puerta estaba sellada con cinta de carrocero, localizaron un espécimen de cánido de raza mestiza y sexo macho, en avanzado estado de descomposición. La mascota se encontraba tapada con un edredón, una manta y un plástico, con gran número de larvas e insectos en su superficie así como en la casi totalidad del suelo de la cocina.
Además, en la boca del animal observaron un trapo. El titular del perro, según contrato de adopción y cesión, no acreditó las circunstancias que rodeaban el fallecimiento de ‘Cooper’. Debido a las condiciones higiénico sanitarias existentes. con el cánido en avanzado estado de descomposición y emisor de un gran hedor, se trasladó temporalmente a la menor al domicilio de una vecina hasta la retirada de los restos así como tras la limpieza y desinfección de la zona.
Fnalizados los trabajos, la menor regresó a su domicilio a las 21 horas de ese mismo día, aunque los agentes informaron de los hechos al Ceas de Valladolid, así como a Fiscalía de Menores. Los restos del animal fueron retirados por una veterinaria con ejercicio profesional en Santovenia, pero no pudo realizar necropsia. Debido a la presencia de un trapo en la boca, el tiempo que llevaba el animal muerto y a la convivencia con los restos del mismo en la vivienda sin avisar a nadie y sin realizar ninguna acción, se imputó en calidad de investigado del varón, como presunto autor de un delito de maltrato de animal doméstico.
Libera pidió maltrato a la niña que vivió con el cadaver
La Asociación Libera llegó a pedir que se investigara también un posible maltrato a la niña que convivió durante tres meses en la vivienda con el cadáver del perro, algo que inicialmente denegó el Juzgado de Instrucción 2 y ratificó la Audiencia de Valladolid, informa Europa Press. Libera presentó un informe pericial psicológico elaborado por expertos de la (Coppa) en violencia infantil, al que también pretendía adherirse la Asociación para la Defensa de los Derechos de la Infancia y la Adolescencia (Addia).