La alerta de los trabajadores fallecidos en el parque eólico de Valladolid salva a varios compañeros
Al menos dos compañeros, que operaban en la base, se libraron de milagro ya que los fallecidos avisaron antes de caer desde 80 metros | Los sindicatos se personarán si constatan fallos o negligencias en la empresa
Trágico accidente mortal con dos fallecidos en un parque eólico en construcción cercano a La Mudarra . Dos trabajadores de 55 y 45 años fallecieron en la mañana de ayer en un accidente laboral registrado dentro de la torre de contención de un aerogenerador en las obras de un parque eólico situado en el término municipal de Valdenebro de los Valles (Valladolid). Ambos son de nacionalidad española y vecinos de Alcorcón (Madrid), según informaron fuentes sindicales, de la Subdelegación del Gobierno y del Centro de Emergencias 112.
El siniestro se registró a las 08.01 horas y lo único que se sabe con certeza es que el desgarrador siniestro se desencadenó por un fallo mecánico del elevador cuando los dos operarios estaban en altura. Los postes de estos molinos eólicos son de gran altura y, según indican las fuentes consultadas, los falleciodos cayeron de al menos 80 metros. Según pudieron recabar fuentes sindicales de los técnicos de Trabajo, el accidente no fue aún «más trágico», porque los operarios accidentados avisaron a los que estaban debajo y lograron apartarse.
«Los compañeros, al menos dos ellos, que estaban debajo han señalado que instantes antes del desplome gritaron que se ascensor se caía y se libraron de milagro de verse atrapados porque se apartaron en el último instante», indicaron fuentes sindicales.
Fueron estos supervivientes quienes avisaron al Centro de Emergencias 112 para solicitar asistencia sanitaria urgente para los dos operarios que habían resultado heridos tras venirse abajo un elevador mientras trabajaban en las obras de un parque eólico situado en el paraje Carratorres, a la altura del kilómetro 223 de la carretera N-601. Además, el alertante indicó que uno de los heridos se encontraba atrapado por los restos del elevador.
El 112 dio aviso de este accidente a la Guardia Civil, a los Bomberos de la Diputación y a Emergencias Sanitarias-Sacyl, que envió una UVI móvil, una ambulancia de soporte vital básico y personal sanitario de Atención Primaria del centro de salud de Rioseco.
Al instante se abrió una investigación por parte de la Inspección de Trabajo que, junto con la Policía Judicial de la Guardia Civil de Valladolid, trabajaron durante toda la mañana en recabar información de las circunstancias del suceso.
La secretaria de Salud Laboral y Política Social de UGT en Castilla y León, Azucena Pérez Álvarez, lamentó en la mañana de ayer el trágico accidente laboral, al tiempo que pidió un plazo para conocer detalles de la investigación y realizar una valoración con toda la documentación del caso.
«Todo es muy reciente. De momento nos ponemos a disposición de los familiares de los dos fallecidos y avanzamos que si se hubiese producido una negligencia, una falta en la prevención de riesgos o un fallo en las medidas de seguridad, nos personaremos como acusación», indicó Pérez.
«Sabemos que están en el terreno personal de la Inspección de Trabajo y de la Oficina Territorial de Trabajo, que también elabora su informe individual, y esperamos que nos trasladen pronto la información», concluyó la ugetista.
En la misma línea, la secretaria de Salud Laboral de CCOO, Sheila Mateos, indicó a última hora de la mañana de ayer que todo era «confusión», a lo que se unió el hecho de que el elevador, tras la caída, había quedado destrozado «lo que dificultaba averiguar el origen del fallo del mismo».
Mateos indicó que la empresa no es de Castilla y León, lo que también está retrasando averiguar más sobre este caso. «Vamos a esperar a que concluya la investigación para conocer qué ocurrió con exactitud. Dmomento apoyamos a las familias y batallaremos para que se depuren responsabilidades. Si el elevador no estaba en condiciones o si estaban trabajando sin las prevenciones adecuadas, nos personaremos en el caso.
Pero, insisto, aún nos falta muchísima información», precisó la delegada.
Cinco muertes en 2020
Los dos fallecidos ayer elevan a cinco los muertos en accidente laboral en solo mes y medio de 2020 en la región. Y Valladolid ostenta el triste honor de sumar tres de esos cinco decesos. El anterior finado se produjo el pasado 24 de enero cuando un albañil murió en la capital vallisoletana mientras trabajaba en las antiguas galerías Campo Grande de la calle Paulina Harriet, junto al paseo de Zorrilla.
El 112 llegó a recibir una llamada que solicitaba asistencia para el trabajador que aseguraba sentirse mal y con dificultades para respirar, aunque el personal de la ambulancia desplazada solo pudo certificar que el trabajador había sufrido un infarto que le causó la muerte.
Seis días más tarde, en hombre de 57 años falleció el 30 de enero en Ávila al caerle encima un árbol que estaba talando. Ocurrió junto al kilómetro 342 de la N-110, en el término municipal de Solana de Ávila.
Ocho días después, un varón de 40 años falleció tras quedar atrapado en una cinta transportadora de una planta de reciclaje en Tariego de Cerrato (Palencia). La sala del 112 recibió una llamada que solicitaba asistencia para un operario que permanecía inconsciente tras quedar atrapado por una cinta transportadora, aunque una vez desplazados, solo confirmaron finalmente su fallecimiento. El accidente de ayer en La Mudarra tiene de gravedad extra la muerte de dos trabajadores, aunque un suceso ocurrido en septiembre de 2019 en el Camino Viejo de Simancas se saldó con dos muertos en la fábrica de piensos Progatecsa intoxicados por los gases de un pozo séptico.