Génova, Feijóo, la vida de los otros
Julio se agota. Y no es un chiste con el cantante que fue portero del Madrid en las últimas. Es tan real como que llega agosto. Ha sido un julio calentito. Y no es vaticinio de la AEMET, ese organismo que pronostica el tiempo que tuvimos ayer, al estilo de los economistas con la economía. Es una metáfora de la política. Hemos tenido de todo. Una crisis de gobierno en la Junta. Una ruptura de la coalición de gobierno en la Junta. Una diáspora de altos cargos de VOX. Una recomposición de las estructuras y vaya usted a saber si de las estrategias del parlamento, ahora con un gobierno en minoría, el soñado por Mañueco. Y al PSOE de Tudanca le ha pillado fuera. Ya es mal fario el del muchacho. Todo el fragor del mandato y te pillan de viaje, justo ahora que están a punto de comenzar las vacaciones de agosto. Es de suponer que ninguno de estos volverá a despotricar contra la situación en la que tiene Mañueco a la comunidad. Tomados ellos de ejemplo esto no es que sea Hollywood. Esto es Emiratos Árabes. Viven como marajás. Ya lo advertimos, no los esperen hasta vendimia, más allá de alguna aparición fugaz para disputar alguna francachela en la feria de un pueblo amigo. Ya lo dice el eslogan que se quiso cargar Santonja cuando era de VOX: Castilla y León es vida. Habría que añadir, ahora que ya no es de VOX ni nada que se le parezca: Castilla y León es vida. Pura vida. Y en las Cortes ni te cuento. Ven y cuéntalo, en Ferraz. La vida de los otros. Fin de ciclo. La recta final del año anunciará tambores de urnas. No sofocarse. Que las urnas llegarán a su tiempo y los nabos en adviento. No habrá adelanto por mucha encuesta matutina que le pongan en el morro a Mañueco. Completará mandato, con un adelanto técnico para no meternos en el frío y la oscuridad de febrero. Mañueco es el único animal que no tropieza dos veces con el mismo adelanto. Y los de Génova si quieren comicios, para matar el gusanillo, que hagan un congreso. Igual lo gana Feijóo.