Que pase el siguiente
YA VAN tres. Primero fue el ex presidente Rajoy quien, contra todo pronóstico tras aprobar los presupuestos con el apoyo del PNV, cayó frente a la voracidad política del actual presidente Sánchez que hacía su primera víctima en el Partido Popular en forma de moción de censura. Pocos podían pensar en ese momento que saliera adelante esa moción que acabó con el liderazgo de Rajoy inaugurando una travesía del desierto de los populares cuyo fin no se termina de atisbar.
El siguiente rival popular de Sánchez aguantó poco el pulso. No se sabe si por méritos del actual presidente en funciones o por algún extraño efecto que Génova provoca en sus líderes, Pablo Casado pasó en poco tiempo de ser un brillante y prometedor político con nuevas formas y valores a una especie de rehén de sus más estrechos «colaboradores» que redujeron al mínimo su imagen presidenciable. Desde que Aznar en Ávila se fijó en él como la mejor promesa del partido a su traumático final Génova le transformó por completo.
Y no hay dos sin tres. El «efecto Génova» parece estar operando ya en el actual líder popular que ha pasado, como por arte de magia, de ser un ejemplo de capacidad de gestión, eficacia, honradez , estabilidad y liderazgo a convertirse en un líder débil, indeciso y sin criterio. Y eso en apenas unos meses. Ya puede percibirse en los ojos de sus acólitos genoveses esa mirada, tan típica en política, mezcla de tristeza, disimulo, nostalgia y compasión hacia quien ya ven más cerca de la lona que de La Moncloa.
Que pase el siguiente o, más bien,, la «siguienta» que ya calienta en la banda mientras el voraz Sánchez alimenta su leyenda de político indestructible capaz de superar cualquier obstáculo. Desde luego, si después de todo lo que ha hecho en la anterior Legislatura y lo que, sin ninguna duda, está dispuesto a hacer en esta, es investido presidente habrá que ir pensando en nombrarle presidente vitalicio y nos ahorramos más humillaciones víctimas y elecciones.
Y a todo esto ¿qué piensan los socialistas de Castilla y León de esta situación? Igual alguien debería preguntarles si están de acuerdo con la nueva configuración territorial del Estado que se nos viene encima basada en una España de dos velocidades que favorece a las mal llamadas Comunidades históricas. ¿Hay alguna Comunidad más histórica que Castilla o que León? ¿Aceptará el PSOE de Castilla y León que se ofrezcan privilegios económicos, políticos y territoriales a otras Comunidades Autónomas en perjuicio de los ciudadanos de Castilla y León? Habrá que mojarse antes de que pase el siguiente.