Brigadas de paracaidistas frente a la despoblación
LOS procesos electorales provocan actuaciones en los partidos políticos que a veces parecen incompresibles para una parte de la ciudadanía, pero en los comicios es raro ver a una formación política experimentada dar una puntada sin hilo. En una conversación de café mañanero escuchaba a un parroquiano expresar su extrañeza ante paracaidistas en las listas electorales de algunos municipios. Todos los partidos tienen candidatos que viven en otros lugares y cubren huecos en candidaturas. Lo que no entendía el paisano era el afán de los grandes partidos por tener candidatura como fuera en todos los municipios y se refería a la brigada socialista llegada desde Almería, ya que seis militantes de esa provincia son cabezas de lista en pequeños pueblos de Soria. Uno de ellos, por ejemplo, fue secretario general del partido en Almería y senador por la provincia. Ahora es el candidato en Herrera, que tiene 11 vecinos. Está claro que el PSOE no cuenta con conseguir esa alcaldía ni hacerle esa faena al almeriense Diego Miguel Asensio Martínez. Pero si no hay candidato no puede haber ni un voto, y cada voto cuenta en la provincia, porque luego se dirimen los diputados de cada partido judicial con el número de votos totales de la zona y siguiendo la ley D’Hondt. En esta legislatura que concluye, el PSOE se quedó a 63 votos de la mayoría absoluta en la Diputación de Soria –que son los que le faltaron para ganar un diputado más en El Burgo de Osma– y eso permitió la formación de un tripartito que dejó a los socialistas sin el bastón de mando. Así que a veces lo de menos es una alcaldía, que sabe perdida, y lo importante es dar la opción a todos los ciudadanos de votar al partido, que su voto sí puede ser útil más allá del municipio, para conformar la Diputación. Por eso tiene lógica la brigada paracaidista de Almería, que pone el nombre y así no hay que desgastar a ningún militante de la provincia que puede ser más útil en listas con más posibilidades. Porque no hay que olvidar que, en Soria, la despoblación pone las cosas más difíciles para casi todo e igual que a las empresas les cuesta encontrar mano de obra, a los partidos les hace trabajar duro para completar listas y los esfuerzos que hacen, aunque parezcan extraños, tienen explicación. Incluso en el pequeño pueblo de Recuerda, gobernado hasta ahora por el PSOE, donde también cuesta entender el lío que se ha montado en el PP, que está peleando judicialmente para que se reconozca una segunda lista que presentó (la Junta Electoral validó la primera ante la ausencia de renuncias) y así incluir a todo un ex alcalde de El Burgo de Osma, Miguel Cobo. Aquí la explicación puede que no sea tan transparente o sencilla, pero da la impresión de que el objetivo tampoco es el ayuntamiento concreto, sino que las miras están en la Diputación, aunque esta vez no por cuestión de votos sino por la posibilidad de optar a diputado, que hay que recordar que se eligen luego entre los concejales.