‘Alguaciles’ socialistas
HAY ambiente festivo en Soria. Cumplidos ya varios prefestejos, pendiente La Compra, que es este domingo, ya queda muy poco para el pregón del miércoles 29 y que la ciudad se vuelque en unas fiestas de San Juan que tienen en La Saca del jueves su día grande. La actividad laboral baja mucho durante las fiestas, aunque siempre hay excepciones. Entre ellas, las de los agentes de la autoridad, que deben velar por la seguridad de todos. Los policías municipales no tienen un ambiente muy bueno, porque se han cansado de las ‘tradiciones’, no de las festivas, sino de las que se les aplica en el ámbito laboral. Dicen que lo de ampliar su jornada ordinaria durante los festejos se hace como si todos debieran tener un generoso corazón sanjuanero, algo que efectivamente parece haber sido algo tradicional en el Ayuntamiento, pero que ahora quieren cambiar y que se haga de forma regulada, mediante un acuerdo que no han logrado después de una par de semanas de negociación, y que además el cambio sea no solo para las fiestas sino para todas las circunstancias en las que hay que solucionar el problema de una plantilla en las que hay 14 plazas sin cubrir y que muchas veces no es capaz de atender los 5 servicios fijados como mínimos, es decir, cinco polícías al menos. De ahí el descontento y más de cara a los sanjuanes en los que se sienten tratados más como «alguaciles», de los que se dispone al antojo de quien manda, que como los policías municipales que son, según explican algunos de los que se reunieron el jueves en asamblea. Una asamblea en la que se debatió una propuesta como poco curiosa. Alguien planteó que una posible solución a tanta decepción podía ser la de afiliarse en masa al Partido Socialista, que es quien ostenta el poder municipal en la capital soriana y quizá con el carnet del partido se les dejara de ver como alguaciles. No era una broma, porque la cosa se votó y hubo más de una docena de personas que estuvieron a favor. Habría que ver qué pasaba si de pronto todos los policías municipales se convierten en afiliados socialistas, más que nada porque se habrían convertido en una corriente muy importante en la formación política que podría decidir algunas cosas con sus votos. Eso en el caso de que hubieran pillado al partido por sorpresa, que es difícil, ya que según el reglamento del PSOE, las secretarías de Organización pueden plantear objeciones a la cualquier afiliación y tiene un plazo para ello. El caso es que esa vía quedó desechada y habrá que ver cómo quedan las fiestas en la Policía Local soriana.