La lotería de los sorianos

LOS sorianos tienen fama de llegar de los primeros a Valladolid cuando hay algún acto. Es gracias a la carretera que desde hace más de dos décadas se está tratando de convertir en una autovía, la del Duero. Como lo que vaya a deparar es impredecible, se sale con un amplio margen, por lo que muchas veces el exceso de previsión permite parar a tomar un café cuando solo queda media hora para Valladolid y hay un sitio preferido, así que como lugar de parada habitual por estas fechas hay que hacer el alto también para coger lotería. Me tocó hacerlo esta semana con un par de amigos, cuando estaba cerrando el establecimiento, así que ni café, solo pedir los décimos, no vaya a ser que toque aquí y nos quedemos sin ello, como le comentó uno al dueño. «Si toca aquí, el 80% va para Soria, que mira que gastáis en lotería», respondió el hostelero vallisoletano. Es cierto, y las estadísticas lo avalan, que el mayor gasto en lotería de Navidad por habitante se produce en Soria. Quizá sea porque si te toca el premio te lo tienen que dar sí o sí y no te lo quita nadie. Porque hay otras cosas que de vez en cuando se anuncian casi como premios para la provincia y que luego no los paga nadie o si se hace, tarde y mal. La mencionada autovía es un ejemplo, pero hay muchos otros, y no hay más que tirar de hemeroteca y ver los proyectos que son eternamente eso, proyectos. Pero la lotería es suerte y alguna vez ha tenido en cuenta a Soria. Lo otro debería ser justicia. Hay quien dice que a Soria, como a Cuenca y Teruel, les ha tocado la lotería con la autorización europea de ayudas especiales, del permiso para el establecimiento de una fiscalidad diferenciada. No es ninguna suerte haber llegado a una densidad de población por debajo de los 12,5 habitantes por kilómetro cuadrado y sí sería justicia poner los medios para intentar revertir una situación a la que se llegó porque precisamente faltaron los medios en el momento oportuno. En cualquier caso, esa lotería tocó en abril y aún no está claro cómo se va a cobrar el premio. Porque ya había tocado antes y no se cobró nada, puesto que Soria y Teruel, en este caso solas, sin Cuenca, ya figuraban en las Directrices sobre ayudas estatales publicadas en el Diario Oficial de la Unión Europa en 2013 como «zonas ‘c’», es decir, que podían recibir ayudas especiales para facilitar su desarrollo. Y no hubo ni ha habido nada especial para estas dos provincias y aquello pasó desapercibido. Así que, ante la indefinición sobre la forma de pago del nuevo premio europeo, en Soria hay mucho recelo. Quizá por eso se sigue comprando mucha lotería de Navidad.