Iberdrola amplía su negocio eólico en Portugal con una inversión de 200 M€

Iberdrola ha incrementado su nível de negocio en Portugal, un área de especial importancia para la compañía, com nuevos contratos para el desarrollo eólico por valor de 200 millones de euros. El anuncio fue hecho ayer durante la visita que el primer ministro luso, Antonio Costa , hizo al complejo de Támega, en donde la eléctrica española está desarrollando a la vez la construcción de tres presas, una de ellas reversible y pensada para el almacenamiento de energía.

Costa estuvo acompañado en su visita por el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán , quien expresó su satisfacción por la marcha de la construcción de las presas de Daivoes, Govaes y Alto Támega , al tiempo que se profundizan las relaciones com Portugal.

Al proyecto del Tâmega se sumarán de este modo nuevos desarrollos renovables de Iberdrola en Portugal: la compañía se ha adjudicado recientemente capacidad solar para más que duplicar su potencia renovable operativa en el país y promueve ya nuevos proyectos de capacidad eólica en la región del Támega, que implican una inversión de 200 millones de euros. Así, podrá suministrar energía limpia a sus más de 800.000 clientes portugueses.

De este modo se pone de manifiesto el compromiso de Iberdrola con Portugal y su voluntad de permanencia en el país. «Puede estar seguro de que continuaremos impulsando la transición energética en este país, y con ello la creación de riqueza y bienestar para todos los portugueses», afirmó Galán dirigiéndo a Antonio Costa.

Liderazgo portugués

El primer ministro luso incardinó el proyecto de Támega en el objetivo de liderazgo que se ha marcado Portugal para ser el primer país del mundo que en 2050 llegue a la neutralidad carbónica , emisiones cero. Para ello está inmerso en un ambicioso programa de cierre de centrales basadas en la quema de combustibles fósiles como el carbón y la apertura de eólicas, solares e hidroeléctricas.

«Hoy es una mañana feliz para mí», dijo en un acto junto a la subestación del complejo, la que será la más grande de Portugal. «Tenemos la ambición de ser el primer país en alcanzar la neutralidad carbónica en 2050», remarcó Costa.

Tras expresar su preocupación por los efectos del cambio climático en la erosión y el incremento de incendios forestales en el país, Costa indicó que Portugal en 2030 tendrá el 80% de su energía renovable, cuando ahora es el 5%. Con este fin, «esta obra es fundamental no solo por la energía que genera sino por la seguridad del sistema», dijo, refiriéndose a que una de las presas, Gouvaes, actuará como una gran batería acumuladora de energía, 20Gw, que se alimentará del excedente de energía eólica y el bombeo de agua de la presa de Daivoes.

Portugal, que esta legislatura, va a cerrar dos centrales de carbón y va a seguir apostando por las renovables. «No podemos volver a dudar en la apuesta por la energía renovable. No hay que dudar de que es un factor de crecimiento de nuestra economía. España tampoco tiene que dudar del aumento de las interconexiones para mejorar la el mix energético (eólico, solar e hidroeléctrico)», aseguró el jefe del gobierno portugués. También la energía renovable «es un motor para la cohesión social de los territorios», finalizó Costa.

Plan energético

Ignacio Galán saludó el nuevo proyecto y expresó en Portugal su esperanza de que el nuevo plan energético español establezca un marco estable para el desarrollo de las energías renovables. Valoró positivamente el plan porque por primera vez establece unos objetivos a largo plazo, una política en la que Iberdrola lleva trabajando dos décadas.

«Esta visita la he disfrutado de una manera muy especial. Ver cómo se transforma la naturaleza en algo útil es una visión de los que iniciamos esta carrera», explicó el presidente de Iberdrola, quien dejó claro que cree  que en Espana ha habido un cambio muy importante en los últimos meses. «Durante dos décadas, el sector eléctrico no ha tenido un plan energético a largo plazo. Ahora tenemos un plan energético, un plan de transformación de un modelo a otro modelo com una visión a largo plazo y lo tenemos», resaltó. Galán comparó el plan español para la transición energética con el luso, que consideró «modélico».

Para Galán, en España hay una línea muy clara. « El Plan de Energía tiene los beneplácitos de la Comisión Europea, es un plan ambicioso y es un plan racional que pretende alcanzar unos objetivos tomando medidas. Es un buen ejemplo el portugués pero en España tenemos un plan sólido, bien hecho», detalla. Y es que, según sus palabras, sólo se pueden hacer las inversiones tan cuantiosas que prevé la Unión Europa si se tiene un sistema estable, predecible y que respete de alguna manera el marco jurídico. «En estos momentos hay elementos para tenerlo. Tenemos un plan nacional y un deseo de que las cosas se hagan bien», concluye.

El complejo del Tâmega, con una inversión superior a los 1.500 millones de euros , comprende la construcción de tres embalses (Gouvães, Daivões y Alto Tâmega) en el río Tâmega, afluente del Duero. Las obras, que comenzaron en el año 2014, han sido completadas ya en dos tercios y se espera que concluyan en 2023, conforme al calendario previsto, si bien las plantas de Gouvães y Daivões entrarán en operación ya a finales de 2021.

Durante su visita al complejo –a la que también han asistido el ministro de Medio Ambiente y Transición Energética de Portugal, João Pedro Matos Fernandes , y los presidentes de las Cámaras Municipales de Ribeira de Pena, de Vila Pouca de Aguilar, de Chaves y de Cabeceiras de Basto– Ignacio Galán y Antonio Costa han podido comprobar de primera mano la evolución de los trabajos, que emplean a miles de profesionales en más de 100 empresas, 75 de ellas portuguesas.

Una vez concluida, esta gran infraestructura renovable tendrá capacidad de almacenamiento suficiente para dar servicio a dos millones de hogares portugueses durante un día entero y contribuirá a los objetivos de reducción de emisiones fijados por el Gobierno de Portugal.

Acciones sociales

Iberdrola lanzó hace más de un lustro un plan de acción socioeconómica para la zona de influencia que, dotado de más de 50 millones de euros, se ha destinado a impulsar iniciativas sociales, culturales y medioambientales. Estas ya están dando sus frutos en los siete municipios beneficiados por el proyecto : Vila Pouca de Aguiar, Riberia de Pena, Boticas, Chaves, Cabeceiras de Basto, Montalegre y Valpaços.

El desarrollo de este gran complejo ha sido posible gracias a la apuesta decidida de Iberdrola por un modelo energético sostenible, que comenzó hace ya dos décadas, y al entorno de estabilidad logrado por el Gobierno de Portugal en los últimos años.

En este sentido, Ignacio Galán ha transmitido a Antonio Costa que «emprender infraestructuras como ésta (una de las mayores de Europa) sólo es posible si se dispone de una planificación clara, un marco estable, una seguridad jurídica y un diálogo permanente para buscar soluciones a las inevitables incidencias que pueden surgir a lo largo de su construcción y operación».

Asimismo, Galán ha felicitado al primer ministro por el proceso de recuperación económica experimentado por el país: «Partiendo de estas condiciones incentivadoras, el éxito de su programa económico y su agenda social han hecho que durante su mandato se haya incrementado la inversión extranjera directa hasta niveles récord».

Iberdrola tiene un compromiso firme con Portugal y su voluntad de permanencia en el país. Así, al terminar su intervención ante el primer ministro, Ignacio Galán ha afirmado: «Puede estar seguro de que continuaremos impulsando la transición energética en este país, y con ello la creación de riqueza y bienestar para todos los portugueses».