CASTILLA Y LEÓN
Castilla y León se alía para vigilar la cadena con inteligencia artificial
Se implica con 9,7 millones de fondos europeos en un proyecto junto a Castilla-La Mancha y Extremadura para crear la Plataforma Agroalimentaria en Red (PAN), que costará 27 millones
Determinar los costes de producción de todos los eslabones de la cadena de valor de la industria agroalimentaria es un objetivo que persiguen desde hace décadas agricultores y ganaderos, los eslabones más débiles de esa cadena. Tener claros esos costes es muy complejo en una economía de libre mercado, pero es esencial para que se cumpla la Ley de la Cadena Alimentaria y nadie pueda comprar alimentos por debajo del coste de producción.
Otro de los objetivos es garantizar el cumplimiento de la trazabilidad desde que se produce el alimento hasta que llega al consumidor. Castilla y León da un paso más para conocer el funcionamiento de todos los agentes de la agroalimentación y se une a otras dos comunidades autónomas, Castilla-La Mancha y Extremadura, con el objetivo de desarrollar la Plataforma Agroalimentaria en Red (PAN), que costará 27 millones de euros de fondos europeos del programa Redes Territoriales de Especialización Tecnológica (RETECH), y utilizará como herramienta la Inteligencia Artificial (IA).
Fue el pasado 17 de octubre cuando el Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León aprobó la aportación de la Comunidad Autónoma al proyecto, un total de 9,7 millones de euros. Se involucra así en el desarrollo de una potente plataforma digital que «permitirá la recopilación de millones de datos de la cadena agroalimentaria, su explotación a través de tecnologías disruptivas (internet de las cosas, inteligencia artificial, big data o realidad aumentada) y mejorar, de este modo, la toma de decisiones de todo el sector, desde el productor al consumidor», explicó la Administración autonómica.
En concreto, la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, a través del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León (Itacyl), contrata el desarrollo, con un plazo de ejecución máximo de 15 meses, de la referida Plataforma Agroalimentaria en Red, con la que se busca agilizar el proceso de transformación tecnológica de los eslabones que van desde la producción hasta la comercialización.
El proyecto, junto a Castilla-La Mancha y Extremadura con su presupuesto de 27 millones de euros, consiste en la creación de un espacio de datos compartido que, apoyado en tecnologías como la inteligencia artificial, «permita optimizar los diferentes procesos de la cadena de valor, genere competencias digitales estratégicas en todos ellos e incluso favorezca la aparición de nuevos servicios».
Específicamente, la inversión, financiada con fondos europeos del programa Redes Territoriales de Especialización Tecnológica (RETECH) del plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR), hace hincapié en la optimización de procesos y en facilitar la toma de decisiones para todos los agentes haciendo uso de diferentes tecnologías que conforman el ecosistema de la Industria 4.0.
Por ejemplo, el consumidor podrá acceder a toda la información sobre la trazabilidad de los alimentos. Los agricultores y ganaderos tendrán un conocimiento más amplio sobre sus costes o la producción esperada para mejorar la toma de decisiones de sus explotaciones. O las industrias agroalimentarias podrán detectar más fácilmente puntos de mejora en sus procesos.
El proyecto PAN se articula en varios paquetes de trabajo o módulos, subdivididos a su vez en varias actividades. Castilla y León, va a participar en ocho de ellos, de los que tres, los relacionados más directamente con la trazabilidad agroalimentaria, la aplicación de inteligencia artificial de forma explicable y la realidad aumentada, los ejecutará en su totalidad.
«En resumen, se trata de una plataforma colaborativa público-privada de datos donde se podrán entrenar, ejecutar y mejorar modelos con distintas aplicaciones y usos, fundamentalmente para mejorar la toma de decisiones tanto en la agricultura, como la ganadería o la industria agroalimentaria y también para mejorar los sistemas de trazabilidad», concluyó.