La rebaja de módulos da un respiro al campo

Más de 60.000 agricultores y ganaderos de Castilla y León se beneficiarán de la bajada de módulos del IRPF que publicó el viernes el Boletín Oficial del Estado (BOE). Una reducción en la tributación que dará un pequeño respiro a un sector acuciado por un sinfín de problemas el pasado año –que es precisamente el ejercicio objeto de esta campaña de la renta–. Entre esos problemas, los principales fueron la sequía, el elevado coste de los insumos y los bajos precios de los productos agrarios.

Castilla y León cuenta con reducciones propias según la provincia y la comarca, con un prolijo listado de municipios y módulos en la Orden. Las Organizaciones Profesionales Agrarias (Opas) de la Comunidad han acogido la noticia con satisfacción, a excepción Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL), que, pese a que su estatal, Unión de Uniones, apoyó el documento de 43 medidas presentadas por el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha manifestado que los criterios utilizados para la reducción de módulos fiscales «son incongruentes e injustos» y solicita «una modificación de los mismos».

La orden del Ministerio de Hacienda y Función Pública que publicó el BOE reduce los índices de Rendimiento Neto y la reducción general aplicables en 2023 en el sistema de estimación objetiva del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), el denominado sistema de módulos, para agricultores y ganaderos. Recoge la propuesta del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (Mapa) de minoración de dichos índices y tiene en cuenta la incidencia de la sequía y otras circunstancias excepcionales que afectaron a la rentabilidad de muchas explotaciones agrícolas y ganaderas durante 2023, según detalla el Mapa en un comunicado.

«Con la publicación de esta Orden, el Gobierno continúa dando cumplimiento a las medidas acordadas para dar apoyo a los agricultores y ganaderos, al establecer una reducción generalizada del 15% en el rendimiento neto, a la que se añade la minoración de entre el 30% y el 80% en los sectores más afectados por las adversidades climáticas, y el mantenimiento de las minoraciones por la compra de gasóleo agrícola (35%) y fertilizantes (15%)», señala la misma fuente. A esa reducción general del 15% podrán acogerse los aproximadamente 800.000 agricultores y ganaderos que tributan por el sistema de módulos en España, más de 60.000 en el caso de Castilla y León. Determinados sectores se benefician además de reducciones específicas, que son del 80% en el caso de la castaña, 50% para los cereales, leguminosas, olivar y la apicultura, y del 30% para uva de vinificación y sectores ganaderos en régimen extensivo.

El Mapa estima que el conjunto de las reducciones contempladas en la orden publicada el viernes supone una rebaja de la base imponible del orden de 1.750 millones de euros en el conjunto del país.

Por otro lado, la Orden permite que este año también los declarantes en estimación objetiva agraria del IRPF puedan minorar el rendimiento neto previo un 35% por adquisición de gasóleo agrícola, y un 15% por compra de fertilizantes.

Se mantienen las reducciones de los índices correctores por piensos adquiridos a terceros y por cultivos de regadío que utilicen energía eléctrica. Concretamente se establece en un 0,5 el índice aplicable a las actividades ganaderas que alimenten el ganado con piensos y otros productos adquiridos a terceros, siempre que representen más del 50% del importe de los productos alimenticios consumidos, y se aplica tanto a los sectores ganaderos intensivos como a extensivos. El índice corrector por cultivos en tierras de regadío que utilicen energía eléctrica se reduce a 0,75, siempre según los datos difundidos por el Ministerio.

El sistema fiscal de Estimación Objetiva, más conocido como de “módulos”, es el mayoritario entre los profesionales del campo de Castilla y León, pudiendo acogerse al mismo quienes tienen ingresos inferiores a 250.000 euros anuales.

En Castilla y León los agricultores y ganaderos se pueden beneficiar de las reducciones establecidas a escala nacional, y también otras establecidas a escala provincial e incluso a escala local para determinados términos municipales. En el caso de las establecidas a escala nacional, son las siguientes:

> SECTORES AGRÍCOLAS. Cereales, de 0,26 a 0,13; leguminosas, de 0,26 a 0,13; castaña, de 0,26 a 0,05; productos del olivo, de 0,26 a 0,13; uva para vinificación con Denominación de Origen, de 0,32 a 0,22; uva para vinificación sin DO, de 0,26 a 0,18.

> SECTORES GANADEROS. Bovino de cría extensivo, de 0,26 a 0,18; Bovino de carne extensivo, de 0,13 a 0,09; ovino de carne extensivo de 0,13 a 0,09; caprino de carne extensivo de 0,13 a 0,09; porcino de carne extensivo, de 0,13 a 0,09; porcino de cría extensivo de 0,26 a 0,18.

POR PROVINCIAS

En cuanto a las reducciones para Castilla yLeón provincia a provincia, en lo que tiene que ver a aquellas en las que están contenidos todos los municipios del territorio, son las siguientes:

> ÁVILA. Avena, cebada, centeno y trigo, de 0,26 a 0,09; cereza, ciruela y pera de 0,37 a 0,07; higo, de 0,37 a 0,13.

> BURGOS. Colza, de 0,32 a 0,11; alfalfa, de 0,37 a 0,19; veza, de 0,37 a 0,07; cereza, ciruela y manzana, de 0,37 a 0,07; pera, de 0,37 a 0,13; almendra de 0,26 a 0,13.

> LEÓN. Veza, de 0,37 a 0,19; haba grano, de 0,26 a 0,05; lentejas y veza grano, de 0,26 a 0,09; almendra, de 0,26 a 0,13; colza, de 0,32 a 0,22.

> PALENCIA. Guisantes grano, de 0,26 a 0,05; veza grano, de 0,26 a 0,09; en forrajes, alfalfa y veza, de 0,37 a 0,07; colza, de 0,32 a 0,22.

> SALAMANCA. En todos los términos municipales solo se contempla un cultivo, lentejas, de 0,32 a 0,22.

> SEGOVIA. Veza, de 0,37 a 0,13; higo, de 0,37 a 0,19; guisantes grano y veza grano, de 0,26 a 0,09.

> SORIA. Avena y triticale, de 0,26 a 0,09; cebada, centeno y trigo, de 0,26 a 0,05; colza, de 0,32 a 0,06; veza grano, de 0,26 a 0,05; guisantes grano, de 0,26 a 0,09; alfalfa, de 0,37 a 0,19; veza de forraje, de 0,37 a 0,13; nuez, de 0,26 a 0,05; uva para vino con Denominación de Origen (DO), de 0,32 a 0,06.

> VALLADOLID. Lentejas y veza grano, de 0,26 a 0,09; guisantes grano de 0,26 a 0,05; veza de forraje, de 0,37 a 0,13; colza, de 0,32 a 0,22; productos del olivo, de 0,26 a 0,09; calabaza, de 0,26 a 0,13; productos hortícolas, de 0,26 a 0,05.

> ZAMORA. Alfalfa y maíz de forraje, de 0,37 a 0,26; veza de forraje, de 0,37 a 0,19; ciruela, de 0,37 a 0,19; almendra y nuez, de 0.26 a 0.09.

MUNICIPIOS CONCRETOS

Además de todo lo anterior, se efectúan reducciones adicionales en determinados términos municipales respecto a cultivos concretos:

> CEREALES. En 1.292 municipios, de los cuales 1.242 tienen reducciones por encima de la nacional: 77 pueblos en Ávila, 240 en Burgos, 62 en León, 144 en Palencia, 103 en Salamanca, 134 en Segovia, 153 en Soria, 204 en Valladolid y 125 en Zamora.

> FORRAJES. En cinco municipios: uno en Burgos otro en León, otro en Valladolid y dos en Palencia.

> FRUTOS SECOS. En 17 municipios, de los cuales uno está en Ávila, tres en Burgos, uno en León, uno en Palencia, ocho en Valladolid y tres en Zamora.

> FRUTOS NO CÍTRICOS. En cinco municipios de Castilla yLeón: uno en Burgos, dos en León, uno en Salamanca y uno en Soria.

> CEREZA. En diez municipios, tres de ellos en Ávila, dos en Burgos, dos en León, dos en Salamanca y uno en Soria.

> PRODUCTOS HORTÍCOLAS. Las reducciones adicionales abarcan 18 municipios de la Comunidad Autónoma, cuatro de ellos en Ávila, dos en Burgos, dos en León, cuatro en Segovia, tres en Zamora y tres en la provincia de Valladolid.

> AJO. Hay reducciones en 25 municipios, uno en Ávila, otro en Salamanca, 15 en Valladolid, uno en Salamanca, uno en Burgos y cinco en la provincia de Zamora.

> REMOLACHA AZUCARERA. Hay reducciones adicionales de módulos en cuatro municipios, uno de ellos en Soria, dos en la provincia de Burgos y uno en Valladolid.

> UVA CON DO. La uva para vino con DO tiene reducciones en 81 municipios, de los que 47 están en Burgos, uno en León, uno en Ávila, nueve en Segovia, tres en Soria y 13 en la provincia de Valladolid.

El conjunto de todas estas minoraciones, según informó la Delegación del Gobierno en Castilla y León, puede suponer para la Comunidad Autónoma una reducción de la base imponible de los declarantes en el régimen de estimación objetiva agraria de unos 232 millones de euros que beneficiarán a unos 60.000 agricultores y ganaderos.

REACCIONES

Las Opas de Castilla y León no tardaron en reaccionar en cuanto se supo la lista de reducciones. Por norma general acogieron bien las deducciones, si bien UCCL planteó bastantes reparos. Asaja de Castilla y León recibió positivamente la revisión a la baja de los módulos del IRPF. «Esta revisión, que anualmente se ajusta tras escuchar las peticiones del sector, transmitidas por las organizaciones profesionales agrarias al finalizar la campaña agrícola, es especialmente sensible a los problemas vividos a causa de la sequía en los sectores cerealista y de la ganadería extensiva, ambos fundamentales en Castilla y León», señaló la Opa.

Con la orden publicada el viernes en el BOE «el Gobierno da respuesta a parte de las peticiones de Asaja, que venía reclamando una reducción de la fiscalidad con motivo de las inclemencias climáticas en unos casos, principalmente la sequía brutal padecida en 2023, y en otros casos por circunstancias excepcionales (como dificultades de mercado u otras) que afectaron a varias zonas y acarrearon pérdidas en diversas producciones», añadió la entidad. Asaja valora la reducción general sobre el rendimiento neto de módulos, que estaba en el 10% y se eleva al 15% para las actividades agrícolas, ganaderas y forestales que determinen el rendimiento neto por el método de estimación objetiva.

Sin embargo, aunque globalmente la valoración es positiva, «el Gobierno sigue sin atender la demanda de Asaja para que se eleve por encima de los 250.000 euros la facturación máxima que permite estar en el régimen fiscal de módulos, para que los agricultores y ganaderos no tengan que encuadrase necesariamente en estimación directa cuando pasan de este umbral, que cada vez excluye a más explotaciones que se ven obligadas a crecer si no quieren quedar fuera de las demandas del mercado actual», señaló la Opa. También ve positiva Asaja la reducción a la baja de los índices de la apicultura y de todos los sectores ganaderos extensivos (aunque se echa en falta el equino, también afectado por la falta de pasto). Sin embargo, «queda fuera todo el intensivo», lamenta la Opa.

En cuanto a las revisiones de carácter provincial o municipal, se ha producido una especie de «lotería», apunta Asaja, donde «situaciones similares se tratan de forma desigual».

«HISTÓRICA»

Por su parte, UPA calificó la reducción fiscal para los agricultores y ganaderos acogidos al método de estimación objetiva de «histórica». La Opa valoró muy positivamente la medida, y con ello justifica el acuerdo firmado por UPA con el Mapa el pasado 3 de abril, una de cuyas medidas, la orientada a reducir la presión fiscal sobre los agricultores y ganaderos españoles, la Opa ve trasladada con la publicación de la Orden en el BOE.

No obstante, las Uniones Territoriales y los servicios técnicos de UPA «están analizando el detalle de la orden con el objetivo de que ningún sector ni comarca se quede fuera de estas rebajas fiscales. Tras el análisis, UPA trasladará a la Administración las alegaciones pertinentes», señala la entidad.

Coag Castilla y León también reaccionó a la Orden. Su secretario general, Lorenzo Rivera, aseguró, en respuesta a este periódico, que se trata de «una reducción importante, pero consecuencia de un año catastrófico, con producciones bajas debido a la gran sequía que todo el país sufrió 2023». En cuanto a las rebajas del 50% en cereal y hasta el 80% en castañas, «hay que valorar que apenas hubo producción, y de cereal más del 50% de merma».

Eso sí, a Coag no le cuadra la cifra dada por el Mapa de que 800.000 agricultores y ganaderos serán beneficiarios de esta reducción por el sistema de módulos: «Si tenemos en todo el país 680.000 explotaciones, ¿cómo hay más beneficiarios en módulos, que explotaciones?», se preguntó Rivera. «Además de las casi 700.000 explotaciones, muchas están en el régimen general, y por tanto estas reducciones no les afectan».

La Opa que se posicionó más contundentemente en contra fue UCCL, que consideró que los criterios utilizados para la reducción de módulos fiscales «son incongruentes e injustos», por lo que solicita «una modificación de los mismos».

UCCL considera insuficientes las reducciones «porque no se aplican de forma generalizada en todo el territorio de Castilla y León», y lamenta que «se siga empleando el mismo método que en años anteriores: una reducción en función de los partes de incidencias de seguros en vez de en función de las condiciones agronómicas de los cultivos por comarcas agrarias y regiones».

Por otro lado, «tanto el vacuno como el ovino de leche deben ser incluidos también dentro de los sectores afectados en todas las comunidades autónomas y en todas las provincias», valoró UCCL.