TRÁFICO
"No hay constancia" de coches bajo el desprendimiento de rocas en la AP-66
El 1-1-2 intenta "verificar" que ningún vehículo quedó atrapado en este punto de la autopista que une León y Asturias / Evacúan 145 turismos, 14 camiones y dos autobuses
Puente confirma que las primeras inspecciones son “tranquilizadoras”: "Parece que no hay nadie sepultado por el desprendimiento”
El Servicio de Emergencias 1-1-2 explicó a Ical que “no hay constancia” de la presencia de vehículos bajo el desprendimiento de rocas y tierra que se produjo esta mañana en el kilómetro 76 de la AP-66, en Arnón (Asturias), y que ha obligado a cortar esta vía en los dos sentidos y a establecer desvíos alternativos por la N-630.
León
Un desprendimiento de rocas provoca el corte de la AP-66 entre León y Asturias
Diario de Castilla y León | El Mundo
No obstante, en este momentos, los medios tratan de “verificar” este extremo con la ayuda de cámaras térmicas y equipos cinológicos. Una vez que se pueda descartar, se podrá llevar a cabo las labores de retirada de todo el material que se ha precipitado desde la ladera sobre la calzada, que se encuentra cerrada al tráfico, a pesar de ser la única opción de alta capacidad entre Asturias y León.
El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, confirmó que las primeras inspecciones son “tranquilizadoras” y “parece que no hay nadie sepultado por el desprendimiento” producido esta mañana en el kilómetro 76 de la AP-66, en Arnón (Asturias), en el municipio de Pola de Lena, y que ha obligado a cortar esta vía en los dos sentidos y a establecer desvíos alternativos por la N-630.
Una decena de camiones trabaja en la retirada del material depositado sobre ambas calzadas, explicó el ministro en su cuenta de la red social X (antes Twitter), y que ha causado daños a los quitamiedos.
El presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón, señaló que están a la “espera de conocer más en detalle lo sucedido en el argayo del Huerna, “de enormes dimensiones”, y que ha cortado la comunicación entre su comunidad y León, lo que obliga a utilizar el paso de Pajares, por la N-630. Hasta el lugar se han desplazado la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra, al ser una vía de comunicación nacional, así como el consejero de Fomento del Principado, Alejandro Calvo.
También, el delegado del Gobierno en Castilla y León, el leonés Nicanor Sen, aseguró que estaba en contacto con el Ministerio de Transportes para conocer los detalles del desprendimiento que afecta a la conexión entre su provincia y Asturias. “Se está trabajando para evaluar daños y restablecer la circulación lo antes posible”, apuntó.
Este domingo, sobre las 10.30 horas, se produjo el desprendimiento de rocas a la altura del túnel de Entrerregueras, en la comarca de Lena, próxima a León, lo que generó una larga cola de vehículos que vieron interrumpida la circulación.
De inmediato se trasladaron al lugar efectivos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), así como la Guardia Civil, la Unidad de Drones y la Unidad Canina. También están actuando los medios de Aucalsa, la empresa concesionaria de la autopista, si bien lo primero será descartar que hay daños personales.
145 coches evacuados
La Guardia Civil de Asturias ha informado de que ya han concluido las labores de evacuación de los vehículos bloqueados a raíz del argayo ocurrido en la Autopista del Huerna, la AP-66, a su paso por Lena. Los afectados por el corte de vía son 145 turismos, 14 camiones y dos autobuses con pasajeros. La autopista permanece cortada al tráfico en ambos sentidos de circulación.
La Guardia Civil está desviando el tráfico en La Magdalena y Lena para circular por la N-630. La empresa concesionaria de la autopista, Aucalsa, está trabajando para restablecer el tráfico "cuanto antes". La Guardia Civil ha informado de que, tras las primeras manifestaciones recabadas por los agentes en la zona a los testigos, "no parece probable que haya quedado atrapado ningún vehículo en el argayo". Hasta la zona se ha desplazado una unidad canina para confirmar este extremo.
Hasta la zona también se han desplazado voluntarios de Protección Civil para realizar labores de información a los vehículos que se hayan visto afectados por el corte.
Mañueco
El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, aseguró hoy que en el Gobierno autonómico siguen “muy pendientes” del desprendimiento. En un mensaje en su cuenta de X (antes Twitter), Fernández Mañueco comprometió “todos los recursos ante cualquier necesidad” que pudiera derivarse, tras quedar interrumpida la circulación en la AP-66 en ambos sentidos.
Por su parte, el delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, garantizó “todo el esfuerzo para la vuelta a la normalidad” que sea necesario. Además, recordó que se han movilizado diez camiones y destacó la actuación de la Guardia Civil, pues se ha encargado e verificar que no había personas atrapadas bajo los escombros.
"La Delegación del Gobierno en Asturias y el Ministerio -de Transportes- me informan de que, en principio, no hay daños personales", expuso Nicanor Sen quien ha seguido este suceso en contacto con las diferentes autoridades.
Varios geólogos evaluarán el estado de la ladera antes de iniciar la retirada del material que mantiene cortada la Autopista del Huerna, AP-66, desde el kilómetro 76, en la zona de Lena (Asturias). Esta decisión se adopta por motivos de seguridad, tras el desprendimiento de piedras y tierra que se produjo este domingo, sobre las 10.15 horas, sin provocar daños personales, pues “en principio”, se cree que ninguna persona, ni vehículo se vio afectado por el argayo.
Así lo trasladó la delegada del Gobierno en Asturias, Adriana Lastra, en una declaración a los medios tras visitar la zona del desprendimiento. "Creemos que no hay nadie, que no hay ningún vehículo enterrado”, aseguró Lastra. “Todo esto, entiendan que con cierta prevención, porque hasta que no levantemos todo aquello, pero, en principio, parece que es así”, dijo.
En ese sentido, la representante del Gobierno señaló que lo primero que se va a llevar a cabo, evidentemente, es “una labor de contención de la ladera”, para lo que añadió es importante evaluar su estado antes de iniciar la intervención. Para ello, explicó que ya están trabajando varios geólogos en estas laborales y señaló que una vez que tengan esa información podrán comenzar las tareas de desescombro con los medios de la propia concesionaria, que ya tiene en lugar retroexcavadoras y cargadoras, entre otra maquinaria pesada, como diez camiones.
“Ahora que parece ser, como les decía antes, que no hay automóviles, que no hay personas enterradas en el argayo, lo primero es, antes de empezar a quitar todo el escombro que hay, lo más importante es saber cómo está la ladera, porque también es importante la seguridad de los hombres y mujeres que van a trabajar en el desprendimiento”, apostilló Adriana Lastra, quien insistió en varias ocasiones que es necesario comprobar que el talud no sigue “argayando”.
En ese caso, continuó la delegada, “lo primero será poder abrir una vía para los propios trabajos de desescombro” con el fin de poder retirar todo el material que se precipitó sobre la calzada de la AP-66. ”Lo que no les puedo decir todavía es de cuánto tiempo estamos hablando", precisó Lastra quien sin embargo garantizó que se restablecerá el tráfico “en cuanto se pueda”. “Lo primero es contener la ladera, no poner en riesgo a los hombres y mujeres que van a trabajar precisamente en ese desescombro, y cuanto antes, restablecer el tráfico", dijo Lastra.
Igualmente, el director general de Aucalsa, Eduardo Arrojo, indicó que es más sencillo despejar la calzada del material que ha caída en sentido León, puesto que recibió un volumen menor de rocas y tierras, mientras que la contigua, en dirección Asturias, recibió un mayor volumen. Además, precisó que si pueden trabajar, sería una “cuestión de días” restablecer la circulación por esta vía.
De hecho, el tráfico es desviado en La Magdalena (León) y en Lena (Asturias) hacia la N-630. Por este motivo, Lastra avanzó que la Guardia Civil va a reforzar las patrullas de Tráfico, en la zona del puerto de Pajares, ante la previsión de que la afluencia de vehículos estos días “sea muy grande”, según Adriana Lastra, puesto que toda la circulación entre los dos territorios se ha desviado por esta carretera nacional que atraviesa la Cordillera Cantábrica.
Cabe recordar que la autopista AP-66 es la única alternativa a la N-630, de un carril por sentido, a su paso por el puerto de Pajares. La infraestructura, gestionada por Aucalsa, tiene 77,8 kilómetros de longitud, de los que 16,9 kilómetros son túneles. La intensidad media diaria de tráfico ronda los 8.000 vehículos, de los que 1.300 son pesados.