León aprueba por unanimidad la nueva ordenanza de terrazas que busca "plena accesibilidad"
Los vecinos del casco histórico consideran este hecho “ilegal” y José Antonio Diez explica que habrá “un periodo de adaptación” después de su entrada en vigor, ya que “requerirá de inversiones y contrataciones”
El pleno del Ayuntamiento de León aprobó hoy con los votos a favor de todos los Grupos Municipales -Partido Socialista, Partido Popular, Unión del Pueblo Leonés y Vox- la nueva ordenanza de terrazas, que busca “la plena accesibilidad, mayor seguridad, mejor limpieza y coherencia estética en el conjunto municipio”.
Consciente de la “necesidad de un enfoque moderno y sostenible en la utilización de los espacios públicos”, la concejala de Comercio, Consumo y Fiestas, Camino Orejas, defendió que el texto de la nueva norma ha sido elaborado “tras un proceso participativo y justo con diferentes colectivos y sensibilidades” para “facilitar la gestión de los espacios públicos y la conciliación de la hostelería con las necesidades peatones y vecinales”, según informa Ical.
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Entre las principales características de la nueva ordenanza de terrazas, Orejas destacó que garantiza la accesibilidad peatonal, establece la posibilidad excepcional de colocar terrazas en la calzada pero delimita una superficie máxima y siempre no que superen un porcentaje plazas, obliga a delimitar el perímetro de ocupación y a exponer el plano de autorización, así como a utilizar recipientes con tapa para los residuos y protectores acústicos en el mobiliario. También se delimita la ocupación máxima de terraza en las plazas más representativas de la ciudad y obliga a mejorar la estética mediante tamaños y una gama cromática, cuidando especialmente las zonas de interés patrimonial.
En definitiva, “la normativa contribuirá a mejorar positivamente la ciudad, intentado compaginar intereses de todos para posicionar a León como una ciudad referente turismo de calidad y un lugar respetuoso para los vecinos”.
En este sentido, el acalde de León, José Antonio Diez, reconoció la “dificultad” de conciliar en una ordenanza “los intereses de todos”, así como que “será mejorable” y que, de su experiencia, “se podrá aprender”. No obstante, garantizó que, una vez que entre en vigor, “se exigirá su cumplimiento”, aunque con un “periodo de adaptación”, ya que “supone un esfuerzo importante que requerirá de inversiones y contrataciones”.
El regidor leonés también aludió al ocio nocturno, respecto a lo que se mostró consciente de que “hay problemas que, lamentablemente, hay en todos lo sitios” y se mostró dispuesto a “modificar, si es el consenso de la corporación municipal, algunos aspectos que afectan al mismo”.
Unanimidad
Todos los Grupos Municipales del Ayuntamiento de León dieron sus votos a favor a una ordenanza que, según el ‘popular’ José Manuel Frade es “necesaria para regular las terrazas” y que persigue que “solo sean eso y no instalaciones invasivas al aire libre”, en aras de que “se integren armoniosa y discretamente sin ser una agresión a la ciudad y a los ciudadanos”.
Frade aprovechó su turno de palabra para pedir al equipo de Gobierno una campaña de sensibilización e información para todo el sector hostelero con el objetivo de “cumplir con la ordenanza y conseguir una buena convivencia entre todos los”, porque “de poco vale regular mucho si luego no se controla el cumplimiento de la normativa”.
También coincidió en la “necesidad” de la ordenanza la concejala de Vox, Blanca Herrero, que celebró que “concilia los intereses de todos los colectivos implicados -usuarios, peatones, vecinos, hosteleros y conductores-”, así como que “limite la ocupación de aparcamiento en el centro a una quinta parte de las plazas existentes”.
“Es la típica ordenanza en la que no se consigue la unanimidad en la ciudad, porque es muy difícil conjugar el sector de la hostelería con los ciudadanos en general y no va a contentar a todo el mundo, pero es muy necesaria, como es necesario que su cumplimiento sea estricto”, afirmó por su parte el portavoz de Unión del Pueblo Leonés, Eduardo López Sendino.
“Ilegalidad”
En un pleno histórico en el que, gracias al Reglamento de Participación Ciudadana, se permitió por primera vez la intervención de dos personas ajenas a la corporación municipal, el representante de León Típico, Adelino Gago, reconoció que el Consistorio “aceptó alguna de las sugerencias, como obligar a delimitar las terrazas con marcas en el pavimento o la prohibición de colocar barras en las fachadas de los establecimientos”.
Sin embargo, advirtió de que se trata de una normativa “posiblemente ilegal”, ya que “va en contra orden ministerial de Ley de Movilidad”, de manera que “tiene visos de ilegalidad por contradecir leyes de rango superior”, lo que “puede llegar a constituir un delito de prevaricación”.
“Se pretende convertir el casco histórico en un parque temático cutre y peligroso”, denunció Gago, quien aseguró que en el Ayuntamiento “organiza más de cien días al año eventos multitudinarios y ruidosos”, mientras que “más 300 días al año es una zona de diversión en la que, a partir de media noche, y hay hordas de borrachos en la vía pública que defecan, orinan, consumen y trafican drogas, convirtiendo el barrio en insalubre y peligroso”, mientras que “el Ayuntamiento y la Policía Local están claramente superados y son incapaces de hacer frente a un problema de orden grave”.
“Sentido de pertenencia”
Por su parte, el presidente de la Asociación Hostelería de León, Óscar García, defendió al sector que aglutina a 158 restaurantes, 1.035 bares y 144 cafeterías, como “una de las mayores fuentes de ingreso para la ciudad” y resaltó que “más allá de los empleos y el impacto económico que genera”, supone “un catalizador social que promueve el sentido de pertenencia e identidad local”. Por este motivo, abogó por “equilibrar la actividad hostelera con la convivencia” y “promover el diálogo entre todos mediante una cultura de respeto y cooperación que permita una coexistencia para todos”.