Pelea en un cine de León: un boxeador se lía a puñetazos contra un hombre que agredía a su pareja

La sesión de cine de la nueva película de 'Garfield' no transcurrió como se esperaba en la sala Odeón, en el CC Espacio de León. Y no porque no gustase el largometraje a los asistentes, sino por la pelea que protagonizaron dos hombres durante la proyección el pasado jueves. Uno de los implicados en la trifulca se trataba de un boxeador profesional, Antonio Barrul, que al parecer trataba evitar que un varón cometiera un supuesto episodio de violencia de género sobre su pareja. Y a puño limpio lo consiguió, disculpándose posteriormente por el episodio realizado ante decenas de niños y sus familias.

Las imágenes compartidas viralmente por redes sociales permiten reconocer cómo Antonio Barrul empieza a descender por las escaleras de la sala para dirigirse directamente hacia un hombre que se encontraba justo debajo de la pantalla, quien presuntamente empezó a hacer gestos violentos sobre su pareja y llegó golpear a una niña. Entre ambos mediaba otro varón, mientras el hombre se dirigía hacia el boxeador leonés con amenazas, gestos violentos y un evidente nerviosismo.

Sin verse todavía interrumpida la proyección y entre gritos de los asistentes, en el video se puede observa cómo Barrul depone su actitud para volver a su asiento, no sin antes ser replicado por el hombre. "No sabes quién soy ni nada, no tienes ni puta idea", llega decir, mientras Barrul explicaba a los asistentes que él no había hecho nada. "Yo vengo con los niños", afirmaba el boxeador leonés, para ser contestado por su rival: "Yo también vengo con mi niño, maricón de mierda. Me cago en todos tus muertos pisoteados".

Tras los insultos, en ese momento Barrul se gira para volver a dirigirse hacia el hombre y advertir de que podía causarle daños mayores. Sin calmarse la situación, ambos llegan hasta abajo del escenario y se retan para comenzar una pelea. Sin embargo, las imágenes reflejan cómo el deportista busca evitar el enfrentamiento, y sin conseguirlo le propinó una serie de puñetazos y rodillazos que derribaron al hombre. 

El descontrol del episodio conllevó que varias personas se acercasen a la trifulca para separar a Barrul. Ya retirado, el boxeador se dirige a otras personas para explicarles lo sucedido y en camino de abandonar la sala se termina disculpando a los asistentes por la pelea. "Lo siento mucho, de verdad, por los niños. De verdad que me duela", concluye, con un gesto de arrepentimiento.