La irrupción de manifestantes obliga a parar la celebración del Día de la Comunidad en León

El final de la movilización contra la celebración del Día de Castilla y León que tuvo lugar esta mañana en la capital leonesa supuso también la suspensión de las actividades que se desarrollaron en la plaza de San Marcos, dado que los abucheos y la tensión generada tras la irrupción de un millar de manifestantes provocó el fin de la actuación y el cierre de los hinchables para niños, que coincidió con un aumento de la presencia policial.

Además, se cambió la bandera de la Comunidad por una de León y se llenó el recinto de pegatinas alusivas a la protesta, que algunos secundaron al grito de ‘pucelano el que no bote’. La situación provocó incluso enfrentamientos personales entre los asistentes a la celebración programada por la Junta y los manifestantes que optaron por ‘tomar’ la plaza de San Marcos una vez concluida la marcha, informa Ical.

El secretario general de la Unión del Pueblo Leonés, Luis Mariano Santos, lanzó este amrtes un mensaje de crítica y reivindicación durante la celebración en la capital leonesa del III Caminu la Llibertá convocado por numerosos colectivos como protesta por la celebración del Día de la Comunidad. "No nos van a comprar y no nos van a robar nuestra identidad", manifestó durante el recorrido de la marcha que partió de la plaza de Guzmán para concluir en la de San Marcos, donde se celebraban las actividades convocadas por la Junta.

"Hoy aquí vamos a gritar que no nos corresponde y que absolutamente para nada nos sentimos identificados con la identidad de esta Comunidad autónoma", añadió el líder leonesista.

"Necesidad de autogobierno imparable"

El alcalde de León, José Antonio Diez, no participó este martes en la marcha convocada por Conceyu País Llionés y secundada por la Unión del Pueblo Leonés y numerosos colectivos contra la fiesta del 23 de abril, pero quiso estar presente con la lectura de un texto que envió para la ocasión en el que remarcó que “el movimiento por el reconocimiento de León, de su identidad y de su necesidad de autogobierno, totalmente constitucional, es imparable; por mucho -reitero- que la Junta de Castilla gaste millones de euros en vestir una identidad inexistente”.

"No cesará esa corriente", subrayó el texto remitido por Diez, “por más que la Junta constituya fundaciones para falsear la historia de una unión ficticia, ni querida, ni aceptada, ni lógica ni positiva para una tierra de León que seguirá en la lucha”.

“Un leonés nunca se sentirá castellano… sencillamente no lo es. Somos leoneses, solo leoneses, orgullo del Reino, del legado, de identidad y de lucha por nuestros derechos constitucionales de autogobierno. Leoneses, leonesas, ‘¡Viva León!’”, concluyó un escrito que inició recordando los argumentos que dieron pie a la moción pro-autonomía que se impulsó hace cuatro años y a la que se han sumado decenas de localidades y municipios de la provincia.