Pico Mencilla (1.932 m.)
El cordal de la sierra de Mencilla
Un recorrido que, desde la antigua vía del ferrocarril minero, nos permite encaramarnos en las altas cumbres de la Sierra de la Demanda burgalesa
Desde la cumbre, unas buenas vistas al Valle del Sol, Pineda de la Sierra y las cumbres de los Trigaza.- N.S.
En el sector más suroeste de la Sierra de la Demanda, se localiza una sucesión de cumbres que encuentran su punto culminante en el Pico Mencilla . Aunque su cima no llega a los dos mil metros, constituye una de las más queridas por los montañeros burgaleses.
Recorrer todas las cumbres que conforman esta serranía, partiendo de la localidad de Pineda de la Sierra , es una actividad exigente, por su longitud, pero tremendamente gratificante por el entorno por el que se desarrolla y las extraordinarias vistas que nos ofrece sobre el eje central de la Demanda. De este modo, si estamos en forma, podemos aprovechar los largos días de la primavera para disfrutar de este maravilloso itinerario circular que recorre las cumbres de la Sierra de Mencilla.
Nuestro punto de partida se localiza en Pineda de la Sierra, desde donde tomaremos el antiguo trazado del ferrocarril minero construido en 1902 para transportar el hierro de las minas de la Sierra de la Demanda hasta Burgos, y una vez allí ser llevado hasta las siderurgias vascas por la línea Burgos-Bilbao. El antiguo trazado ahora se encuentra acondicionado como la Via Verde de la Sierra de la Demanda y atraviesa por el sur la localidad de Pineda de la Sierra en dirección sureste, hacia el Puerto del Manquillo. En total, desde aquí hasta el puerto son casi ocho kilómetros que se nos harán muy amenos, pues el itinerario va cogiendo altura muy lentamente a la orilla del rio Arlanzón, acompañado de una variada vegetación.
Llegando al puerto, la vía del tren atravesaba un túnel, hoy ya en desuso , con lo que tendremos que afrontar durante unos metros una fuerte rampa para alcanzar su punto más alto (km. 7.,8, situado a 1.400 metros de altitud). Junto a los restos de un edificio en ruinas, encontraremos una buena pista que pronto comienza a adentrarse en los bosques en dirección suroeste, y por la que continuaremos durante cerca de dos kilómetros más. Tras una pronunciada curva que nos pone mirando hacia el sur, deberemos estar atentos para abandonar su trazado (km 9,8 de recorrido, a 1.540 metros de altitud), y tomar un sendero que arranca en dirección sureste que nos lleva, en poco más de mil metros de longitud, a superar 240 metros de desnivel, lo que nos permite encaramarnos en lo alto del cordal, a la altura de la modesta cumbre de la Mogosa (1.778 metros de altitud).
El itinerario desde aquí discurre ya por la divisoria de vertientes en todo momento. A la altura del kilómetro 15,5 alcanzaremos otra de las cotas significativas de la jornada, el Pico Tres Mojones (1.857 metros). Tras él, un breve descenso nos lleva al Collado de los Hontanares, dando paso al tramo final que nos dejará sin mayores complicaciones en el techo de la serranía, el Pico Mencilla (km. 18 de nuestra ruta). Desde aquí podremos disfrutar de las fantásticas vistas sobre el circo glaciar del Valle del Sol, cuyas laderas en otras épocas permanecían durante muchos meses tapizadas de nieve, lo que hizo que allí funcionase una modesta pero entrañable estación de esquí en la que dieron sus primeros pasos en esa disciplina deportiva muchas generaciones de burgaleses.
El descenso lo haremos siguiendo el cordal hacia el oeste por una ancha pista. El primer tramo de bajada, incómodo por las piedras, se hace poco después más transitable, para llegar al collado del Mencilla. Casi sin solución de continuidad llegaremos al Campo de los Cerros (a 1,5 km desde la cumbre del Mencilla, km. 19,5 de nuestra ruta), donde abandonaremos definitivamente la línea de cumbres.
Será el momento de coger el sendero que, en fuerte pendiente se dirige hacia el norte, primero por un terreno más descarnado, pero que pronto se sumerge en un precioso bosque de hayas que nos llevará en volandas hasta el Refugio de Esteralvo , donde podremos hacer el último descanso antes de acometer el tramo final de la ruta. Desde el refugio, cruzaremos perpendicularmente la pista que atraviesa de derecha a izquierda, para seguir descendiendo en dirección noreste por el camino de Rehoyos, donde podremos seguir disfrutando del bosque de robles para llegar sin mayor problema de nuevo a nuestro punto de partida en Pineda de la Sierra, tras una extraordinaria jornada de actividad.