El Hidrógeno Verde, el combustible del futuro

Desde hace décadas, se ha experimentado con posibles combustibles y carburantes menos contaminantes que los que se utilizan mayoritariamente en la actualidad, pero ahora, debido a la crisis energética y el cambio climático, este tipo de investigaciones se han convertido en una necesidad acuciante.

El proyecto ‘ValorH2’ se trata de una iniciativa gestionada por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), dependiente del Ministerio de Ciencia e Innovación, para financiar proyectos de I+D+i empresarial y mejorar la competitividad de las compañías españolas. 

En este contexto, se ha otorgado al proyecto ‘ValorH2’ una subvención para investigar e innovar en las principales fases de la cadena de valor del hidrógeno, desde su generación hasta su uso. Este proyecto cuenta con un presupuesto total de más de 7,2 millones de euros, y le ha sido concedida una subvención de 4,6 millones (el 64%), provenientes de los fondos Europeos “Next Generation EU” en concreto del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia.

Según explica Andrés Hernando, CEO de Hiperbaric , empresa que lidera el consorcio del proyecto; el objetivo principal de ‘ValorH2’ es la de trabajar para hacer rentable y más eficiente el hidrógeno verde. 

Se trata de investigar tecnologías, materiales y procesos en las distintas etapas de la cadena de valor del hidrógeno. Estas son: la generación de hidrógeno por tecnología de electrólisis alcalina, la compresión de este gas a muy alta presión y proporcionando un caudal elevado, soluciones innovadoras de almacenamiento y transporte a muy alta presión, y el uso, por un lado en el repostaje de hidrógeno en vehículos eléctricos (de pilas de combustible), y por otro, en un proceso de metanación de CO2 recuperado en industria química (reactivo químico), con el objetivo de aumentar la eficiencia, reducir el coste económico y minimizar la huella de carbono en todas ellas.

Cada miembro de este consorcio tiene una función muy específica en el proyecto: Hiperbaric, desarrolla la tecnología de comprensión de hidrógeno de altas presiones. El hidrógeno presenta algunos retos de almacenamiento porque posee una densidad muy baja (unas 13 veces inferior a la del aire) y a temperatura ambiente ocupa un gran volumen. Para ello, la forma más económica de densificar este gas es comprimirlo a muy altas presiones (entre 350 y 950 bar) para su almacenaje, de forma previa a su uso. 

Aciturri y Mtorres van a desarrollar diseños de tanques con eficiencia gravimétrica para el transporte del hidrógeno, además de módulos para la dispensación de hasta 1.000kg al día.

En cuando a la metanación, que es el proceso que se realiza después de la obtención del H2 para alcanzar su mayor pureza, lo va a realizar Adisseo. La digitalización la hace DGH y la dispensación, que se hace en forma de gas, la llevará a cabo Desmasa.

Este proyecto de I+D cuenta además, con el apoyo de trece Organismos Públicos de Investigación (OPIs) entre centros tecnológicos y universidades referentes a nivel nacional, además de otras colaboraciones técnicas especializadas. 

Estos organismos son: Universidad de Burgos (UBU), Centro Tecnológico de Miranda de Ebro (CTME), Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA), Fundación AITIIP, Tecnalia, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Fundación CIDAUT, Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Universidad de Salamanca (USAL), Centro Tecnológico CEIT, Fundación para la Investigación, Desarrollo y Aplicación de Materiales Compuestos (FIDAMC), Asociación de Investigación y Cooperación Industrial de Andalucía (AICIA) y el Instituto Tecnológico del Plástico (AIMPLAS).

Además del gran trabajo que supone toda la línea de investigación, se ha tenido en cuenta la concienciación social sobre la necesidad de implementar una economía descarbonizada con la participación en eventos, la publicación de resultados en revistas científicas y la celebración de la jornada ‘ValorH2 Hydrogen Tech Demo Day’ para exponer las conclusiones del proyecto, una vez haya concluido.

La ventaja que tiene el Hidrógeno verde respecto a otros combustibles, según explica Andrés Hernando, es que el hidrógeno es una energía verde y renovable, y un pilar para la descarbonización de la economía. Puede almacenarse en estado gaseoso o líquido y distribuirse a través de gasoductos, pudieron ser un sustituto del gas natural, sin emitir gases de efecto invernadero en su combustión. Su problema actualmente es el coste y la dificultad de producción, y ahí es donde se está trabajando con este proyecto. Para España, y toda Europa, es una solución energética limpia que, además, permite no depender del gas de terceros países, una necesidad que tristemente estamos comprobando en los últimos meses dada la inestabilidad mundial que vivimos, que ha puesto en relieve la necesidad de ser autónomos energéticamente.

Respecto a la pregunta que muchos nos hacemos sobre si el hidrógeno será el combustible del futuro, Andrés Hernando explica que tanto en España como en el resto de Europa se está trabajando para que así sea. Europa aspira a ser neutra en emisiones en 2050 y la Hoja de Ruta 2030 en España tiene como objetivo reducir las emisiones de efecto invernadero. La vía para conseguir este objetivo pasa por un gas verde procedente de energías 100% renovables. Gracias a este proyecto, se ha creado una gran oportunidad para liderar un cambio en el modelo energético y reducir las emisiones de CO2.  La tecnología para la producción de hidrógeno verde existe, ahora sólo faltaría hacerla rentable con la colaboración público-privada .

En resumen, el hidrógeno verde es una alternativa prometedora a los combustibles fósiles tradicionales y puede jugar un papel importante en la transición hacia una economía energética más sostenible.

Esta transición ecológica es una oportunidad de crecimiento única para todas las empresas porque el camino hacia la descarbonización en el sector de la energía sólo pasa por un objetivo 100% renovable. Según Andrés Hernando, «ahora es el momento de posicionarse y en Burgos estamos en un entorno privilegiado para poder hacerlo». 

El hidrógeno verde a día de hoy, como se ha señalado anteriormente, no es competitivo a nivel de mercado, pero España cuenta con los recursos necesarios, y proyectos como ‘ValorH2’ para liderar esta revolución que cambie el modelo energético, reduzca por fin las emisiones de CO2, y el hidrógeno verde sea la principal fuente de energía, con los beneficios que conlleva.