Valladolid echa el freno a la contaminación atmosférica
El proyecto AEROSOLFD busca reducir la contaminación atmosférica con soluciones innovadoras aplicadas a la movilidad urbana / Auvasa se transformará en un banco de pruebas para reducir hasta en un 90% las emisiones contaminantes de los frenos
Te has preguntado alguna vez cuál es tu huella ecológica? Tú como ciudadano la generas, es más, la puedes reducir con simples acciones como utilizar la bicicleta o el transporte público, disminuir el número de residuos y usar fuentes de energía renovables. Sin embargo, esa huella no solo la provocas, también la sufres. Y no sólo se trata del CO2 sino de otros contaminantes de los que, a veces, no somos conscientes, como es el caso de las partículas.
Seguro que alguna vez has cogido un autobús para ir a algún sitio, antes de subirte has estado un rato esperando en la parada sin darte cuenta de que el simple hecho de frenar emite una serie de partículas que empeoran de manera sustancial la calidad del aire de las ciudades. De ahí que uno de los retos de AEROSOLFD ponga el foco en mejorar el proceso de frenado.
Este proyecto europeo, en el que participan 17 socios de nueve países, persigue desarrollar tres soluciones adaptables de bajo coste para frenos de autobuses, tubos de escape de vehículos de gasolina, y para la purificación del aire en espacios cerrados y semicerrados.
Una hoja de ruta para una movilidad más limpia y un medio ambiente más saludable en 2025 que refuerza la Misión Valladolid, ciudad inteligente y climáticamente neutra 2030, y avanza en su acción por el clima para mejorar la calidad de vida; más aun teniendo en cuenta que Europa podría evitar más de 100.000 muertes prematuras al año relacionadas con la polución urbana.
En esta iniciativa de Horizonte Europa, Valladolid será uno de los demostradores para mejorar los frenos de vehículos y Auvasa, banco de pruebas, para comprobar la reducción de emisiones en algunos autobuses de su flota.
Además, en las cocheras de Auvasa, como espacio de pruebas, se adaptarán los purificadores de aire. «Se trata de un entorno no accesible al público que permitirá obtener información sobre la mejora de la calidad del aire por la reducción de emisiones de los frenos y también se determinará el número de filtros de aire necesarios para ello», aclaran desde la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico, del Ayuntamiento de Valladolid.
En este punto, Amaya Manso, gestora de Proyectos Tecnológicos de Auvasa, asegura que están contentos de ser los socios de AEROSOLFD porque van a poder reducir las emisiones de partículas en vehículos de su flota; van a reforzar su política de mejora de la calidad del entorno de trabajo de sus empleados, y van a consolidar sus acciones en materia de sostenibilidad.
En definitiva, se trata de desarrollar, probar y validar en condiciones reales de conducción soluciones tecnológicas «adaptables, asequibles y sostenibles». Además, la iniciativa también contempla aumentar la conciencia pública y política sobre el impacto de las emisiones de partículas contaminantes en el medio ambiente y en la salud de las personas, y fomentar planes de incentivos para la rápida adopción de estas tecnologías.
Carlos M. Casado, jefe de proyecto en la División de Sistemas Industriales y Digitales del centro tecnológico CARTIF, detalla que se busca una reducción del 90% de las emisiones con la actualización del sistema actual de frenado.
Casado aclara que estudiarán diferentes líneas para analizar cómo se comportan los vehículos que realizan largos recorridos, frecuentan zonas de atascos, llevan a cabo rutas interurbanas o circulan por más zonas de cuestas. «Es importante tener en cuenta el número de pasajeros porque la frenada no es igual si va muy cargado o más vacío».
Aparte de las tareas que va a desarrollar CARTIF, otros socios trabajarán en el desarrollo de soluciones para filtros en los tubos de escape de vehículos de gasolina con el fin de reducir el 95% del número de partículas y en el diseño de purificadores de aire para su instalación en entornos cerrados y semicerrados. Junto a las entidades españolas como la Agencia Estatal del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, la Fundación CARTIF, el Ayuntamiento de Valladolid y Auvasa, forman el partenariado 17 socios, empresas líderes en el sector de la automoción, como Mann+Hummel e instituciones de Alemania, Holanda, Dinamarca, Bélgica, Suiza, Italia y Chequia, entre otros.
«Valladolid forma parte de un proyecto europeo que mejora la calidad de vida de los ciudadanos, coloca a la ciudad a la vanguardia y persigue un entorno más saludable», afirma Pedro Touya, responsable de proyectos de innovación y ciudades inteligentes en la Agencia de Innovación y Desarrollo Económico para, a continuación, añadir que están muy satisfechos porque «potenciar el transporte urbano con soluciones innovadoras es una cuestión de justicia social».
Aerosolfd se suma a otros proyectos de financiación europea centrados en la movilidad sostenible y conectada como Remourban, PE4Trans, entre otros, o los que se están poniendo en marcha como Urbane, Spine o Ciudades Conectadas, del Plan de Recuperación y Resiliencia.