PISCIFY
La cita previa ‘online’ de los chapuzones
Pixel Innova crea una aplicación para que los usuarios reserven y paguen la entrada de las piscinas municipales / El objetivo es cumplir con la normativa y las recomendaciones de las autoridades en relación a la COVID-19
El calor aprieta y el cuerpo pide piscina . Y es que el agua brilla, hace ondas y salpica. Todo un mundo de posibilidades refrescantes que comienzan, en muchas ocasiones, con el grito de ¡bomba va! Sin embargo, este verano será diferente . La COVID-19 está ahí y es fundamental lograr que el riesgo sea el menor posible, para uno mismo y los demás. Lo primero que hay que tener presente es que, tanto en estos recintos como en la calle, la mayor amenaza está en las secreciones respiratorias que podrían generar las personas al toser, estornudar y contactar con otras personas. Por este motivo, la distancia interpersonal cobra más importancia aún.
Proporcionar espacios seguros es posible gracias a las nuevas tecnologías. En este sentido, la empresa salmantina Pixel Innova ha desarrollado una aplicación web que permite a los usuarios reservar y pagar su entrada para las piscinas municipales de los ayuntamientos que han decidido implantar esta solución, cumpliendo en todo momento con la normativa y recomendaciones de las autoridades en relación con la crisis sanitaria provocada por el coronavirus.
Desde cualquier dispositivo con conexión a internet , Piscify –así se llama– ofrece la posibilidad al usuario de seleccionar si está empadronado o no, el día que desea acudir a darse un chapuzón, franja horaria, tipo de entrada (adulto, infantil…), informar de sus datos y realizar el pago a través de tarjeta de crédito o Bizum. Una vez que la persona adquiere las entradas, la plataforma se las muestra en pantalla y le da la opción de descargárselas en su dispositivo. Además, el sistema envía al correo electrónico del comprador las entradas para que las tenga siempre localizadas.
De esta forma, señala Juan Barbero, director de operaciones de Pixel Innova , al realizarse la reserva y la venta anticipada, se garantiza que nunca se exceda el aforo máximo del recinto, dado que no se venderán más entradas que las permitidas. «La entrada dispone de un código QR, que será escaneado por el personal que controla el acceso a la piscina para comprobar que es válida y realizar la acreditación. El proceso de escaneado es rápido, con lo que se consigue evitar colas y se elimina el uso del papel», añade.
A estas facilidades se suman, dice, que el personal autorizado por el ayuntamiento tiene acceso a diferentes opciones que le permiten parametrizar la aplicación para ajustarla a las necesidades que puedan ir surgiendo en cada momento. Por ejemplo, es posible tener controlado el número de personas que pueden acceder al recinto de las piscinas; definir el número máximo de horas con la que se permite comprar la entrada; configurar diferentes franjas horarias; tipos de entradas y sus precios, entre otras opciones.
Barbero afirma que esta solución es innovadora porque da respuesta a una pregunta que se han realizado muchos ayuntamientos en las últimas semanas: ¿Cómo abrimos las piscinas de forma segura dada la situación actual? Pero ahí no se queda el valor añadido que aporta. Según defiende, Piscify va más allá porque utiliza un sistema de autentificación mediante códigos QR que consigue que la mayor parte de los ciudadanos puedan disfrutar de sus piscinas, minimizando todo lo posible el riesgo de contagio. «Utilizamos un algoritmo con el que se controla que no se pueda sacar más de una entrada diaria para la misma persona o que no se pueda utilizar la misma entrada en varias ocasiones».
La aplicación se basa en un servicio en la nube que informa en tiempo real de la ocupación y la disponibilidad de las entradas en función de distintos parámetros: aforo, franja horaria, ocupación… Además, Víctor Caballero, director de Marketing de Pixel Innova, afirma que elimina el dinero en metálico, los sellos, el papel… y lleva a cabo un registro, de tal forma que los asistentes se podrán localizar de manera rápida en caso de rebrote.
En esta línea, apunta que el ciudadano también puede visualizar las entradas disponibles y la ocupación del recinto , por lo que conoce en cada momento si habrá muchas personas antes de acudir a la piscina y se asegura su plaza porque algunas instalaciones no solo son un servicio para sus vecinos sino un reclamo turístico para otras personas de la zona. «Sería muy desagradable después de un viaje de varios kilómetros, llegar a una piscina donde se haya completado el aforo y no poder entrar a refrescarse. Con este sistema esta situación es imposible que se dé», expone.
Los ayuntamientos ganan mucho terreno con esta aplicación . En primer lugar, manifiesta que gracias a la eliminación del pago en metálico se evitan errores que puedan ocasionar descuadres entre el número de entradas vendidas y el dinero cobrado. En segundo, está la posibilidad de adaptar los recursos al aforo esperado. «Es una ventaja a la hora de optimizar la gestión de recursos saber cuántas personas acudirán a la piscina en los próximos días y franjas horarias». En último punto, subraya que si va a ir más gente tendrá que aumentar tanto los recursos personales para las tareas de mantenimiento y limpieza como los materiales: geles hidroalcohólicos, desinfectante, mascarillas, guantes…
« Supone una gran mejora en cuanto a tranquilidad . De hecho, algunos alcaldes nos han indicado literalmente: ‘Esta noche duermo tranquilo’ tras la puesta en marcha del proyecto. Para muchos municipios pequeños la apertura de las piscinas está siendo un auténtico quebradero de cabeza este año», sostiene Barbero, que agrega que al comercializarse en modelo pago por uso en la nube, no supone un desembolso económico excesivo para los ayuntamientos.
El proyecto arrancó en junio y la primera implantación fue el 19 del mismo mes. Un proyecto que se desplegó «en tiempo récord» por su sistema de trabajo y por su experiencia, confirma Joan Campan, responsable tecnológico de la empresa salmantina. Ya se está utilizando en Carbajosa de la Sagrada, La Fuente de San Esteban y Aldehuela de Yeltes. En la actualidad lo están implantando en otros ayuntamientos de Castilla y León y también tienen interesados en las comunidades de Extremadura y Castilla-La Mancha.
En su opinión, este proyecto forma parte de la nueva normalidad . «Creemos que si desarrollamos nuevos sistemas que faciliten la gestión de reservas y controles necesarios en teatros al aire libre, cuentacuentos…, podemos conseguir que los ayuntamientos decidan organizarlos y los ciudadanos puedan disfrutar de las actividades y conseguir así que adultos, niños y mayores se diviertan este verano, siempre de forma segura y sin poner en riesgo la salud pública», indica Juan Barbero para, a continuación, apuntar que mucha de la tecnología desarrollada para solventar problemas concretos ocasionados por la COVID-19 se quedará. «Eso sí, mejorada y dotándola de mayor funcionalidad», apostilla.