Refuerzo y fomento de los centros de trabajo
La Consejería de Industria, Comercio y Empleo mantiene cuatro líneas de ayudas con el objetivo de favorecer el empleo de las personas con discapacidad, tanto en centros especiales como en su desarrollo profesional en empresas ordinarias de la comunidad.
Dos hombres realizan un trabajo en un Centro Especial de Empleo
Las personas con discapacidad han sido, y seguirán siendo, unas de las destinatarias principales de las políticas implementadas por la Consejería de Industria, Comercio y Empleo. La mejor manera de materializar el derecho al trabajo de una persona, y más aún de una persona con discapacidad, es la de proporcionarle un empleo digno. De esta forma esta área de gobierno, encabezado por Mariano Veganzones, favorece el empleo de las personas con discapacidad en los centros especiales de empleo, a través de cuatro líneas de ayudas: en primer lugar, mediante la financiación parcial de sus costes salariales, hasta el 60 % del Salario Mínimo Interprofesional vigente. En segunda instancia complementando la subvención anterior, cuando se trate de personas con discapacidad con especiales dificultades de empleabilidad. Por otro lado, financiando parcialmente los costes salariales de los técnicos y encargados que conforman las unidades de apoyo a la actividad profesional en los centros especiales de empleo. Y finalmente, financiando parcialmente las inversiones realizadas en los CEE, siempre que supongan creación de empleo estable.
Las novedades implantadas en la actual legislatura respecto al fomento del empleo en los centros especiales de empleo son las siguientes: se han incrementado en 2024 los porcentajes del SMI, por tipo de discapacidad (cuando tengan mayores dificultades de acceso al mercado de trabajo) y edad (sean mayores de 45 años). Hasta 2023 existía un tipo único del 50% del SMI, a partir del 2024, si el contrato es temporal 40 % para las PCD y 50% para las PCD con mayores dificultades; si el contrato es indefinido 50% para PCD 55% para PCD con mayores dificultades menores de 45 años y 60% si son mayores de 45 años o mujeres.
También en 2024, se ha incrementado la cuantía de las inversiones hasta los 15.000 euros por puesto creado con carácter estable si se trata de personas con discapacidad con especiales dificultades de empleabilidad, financiando con 9.000 euros cuando no se presenten tales dificultades. Anteriormente se establecía la cuantía dependiendo del porcentaje de trabajadores con discapacidad (TCD) del centro especial de empleo, 9.015€euros para CEE con el 70 al 90% de TCD y de 12.020 euros para CEE con más del 90 % de TCD.
Se están modificando las bases reguladoras relativas a las subvenciones complementarias de costes salariales para trabajadores con discapacidad con especiales dificultades de empleabilidad, al objeto de extender el complemento del 15% del SMI a todos los trabajadores con discapacidad mayores de 55 años que presenten especiales de empleabilidad. Hasta ahora la fecha se subvenciona el 25% de las nuevas contrataciones, durante un periodo máximo de dos años.
Dentro de los 368 Centros Especiales de Empleo en Castilla y León, pertenecientes a más de 250 entidades sociales, son León (94) yValladolid (83) las que cuentan con más instalaciones seguidas de Burgos (49) y Salamanca (32). Siendo Valladolid con 1.967 la provincia que más personas con discapacidad emplea en estos momentos. Cifras que han ido creciendo de manera progresiva desde el año 1995 cuando se databan solo 47 Centros Especiales deEmpleo, superando ya el centenar en el año 2001 para continuar con ese crecimiento hasta las cifras actuales.
A finales del pasado año la Consejería de Industria, Comercio y Empleo, aprobaba señalar que la línea que consistente en apoyar la financiación de la actividad profesional en centros especiales de empleo a través de las unidades de apoyo. Una iniciativa con la que se financian los costes laborales y de Seguridad Social de los trabajadores de las unidades de apoyo a la actividad profesional. El montante total destinado era 2,1 millones de euros para beneficiar con esta medida a 39 centros especiales de empleo. Estas ayudas han permitido apoyar, a través de 114 técnicos y 165 encargados de las 39 unidades de apoyo respectivas.
HACIA EL EMPLEO ORDINARIO
Pero el empleo de las personas con discapacidad no debe reducirse al ámbito del empleo en las empresas de mercado protegido (centros especiales de empleo), sino que ha de extenderse a las empresas de mercado ordinario.
Para ello se han tomado una serie de medidas, incentivos y actuaciones que permitan tanto el tránsito del empleo protegido a la empresa ordinaria como la contratación directa de personas con discapacidad por parte de estas últimas.
Por un lado, ya en 2023, se implementó una nueva convocatoria (TRAEMOR), destinada a las entidades asociativas de centros especiales de empleo, con la finalidad de conseguir un mayor nivel de contratación de personas con discapacidad en el mercado ordinario de trabajo a través de las siguientes actuaciones, tales como asesoramiento individualizado a empresas y/o a Administraciones Públicas; jornadas informativas de carácter colectivo; campañas de difusión y promoción; estudios y publicaciones. Además, y al objeto de hacer más atractiva la contratación de personas con discapacidad en las empresas ordinarias (DICTI), para 2024, se han incrementado las cuantías de las ayudas a la contratación indefinida, con una cuantía mínima de 5.500 euros y hasta los 9.500 euros de subvención máxima. Hasta 2023 era de 3.907 euros de cuantía única.