Los jóvenes de Burgos lideran la emancipación con los de Valladolid a la cola

Salario y alquiler confluyen como factores clave para que un joven abandone el hogar familiar o no. Pero si ambos suben, también lo hacen los jóvenes que se emancipan en Castilla y León, que fueron 2.236 personas más que hace un año, situándose la tasa en el 15,8% en el segundo semestre de 2023, que supone 1,2 puntos menos frente a la media de España. 

En el conjunto de Castilla y León, solo tres de cada 20 jóvenes consigue emanciparse, de forma que se cifraron en 47.368 las personas independizadas a finales de 2023. Un dato general que, sin embargo, integra notables diferencias a nivel provincial, con una tasa de emancipación que llega a ser del 24,8% en Burgos y que se reduce hasta el 9,1% en el caso de Valladolid. Entre medias se sitúan Soria y Zamora, ambas con un 20,2%; Salamanca y León, con un 17,4%; Ávila, con un 15,1%; Palencia, con un 11,2%; y Segovia, con un 10,2%. Así lo han transmitido este martes Enrique Cabero, Sandra Ámez y Andrea González en la rueda de prensa en la que han presentado las conclusiones del Observatorio de Emancipación de Castilla y León.

Al hilo de ello, Sandra Ámez, presidenta del Consejo de Juventud de Castilla y León, señala que la Comunidad es una región "ampliamente envejecida" ya que "solamente el 12,9% de la población de Castilla y León somos personas jóvenes". Por otro lado, también destaca los datos del saldo migratorio interautonómico joven: "En Castilla y León se van más personas jóvenes a otras comunidades autónomas que las que llegan de otras regiones". A decir de las mismas fuentes, en el año 2022, la región perdió 2.595 jóvenes con destino a otras comunidades. Además, la inmigración no solamente es hacia otras regiones, sino también a otros países. "En el año 2022 se fueron 3.378 personas jóvenes con destino al extranjero, por lo tanto, entre la inmigración entre comunidades autónomas y la inmigración al extranjero, en Castilla y León hemos perdido en torno a 5.973 jóvenes", apunta Ámez.

Unos datos que, según la presidenta del Consejo de la Juventud de Castilla y León, son dignos de celebrar, aunque "queda mucho por trabajar". "Llevamos dos años de subida de la tasa de emancipación, alcanzando el mejor dato desde el segundo semestre de 2019. Eso sí, la tasa sigue siendo inferior a la que había antes de la crisis causada por la pandemia o por la recesión del 2008".

En cuanto al acceso a la vivienda, el régimen de tenencia de viviendas de los jóvenes para emanciparse es el del alquiler o realquiler. El coste mediano del alquiler en Castilla y León es de 616 euros al mes, lo que supone el 63,6% del salario mediano neto de una persona joven. "Nos encontramos con esta cifra ante el precio más caro de la historia con una subida del 8,5% respecto al año anterior. Si una persona joven quiere vivir en solitario y cobra el salario mediano joven, le quedarían 351,93 euros para pasar el mes después de pagar el alquiler", comenta Ámez. Además, añade, "a esta cuantía hay que restarle el coste de los suministros, que alcanzan ahora mismo unos 90,97 euros, más o menos, al mes. Por lo tanto, a una persona joven le quedarían unos 260 euros al mes para hacer frente a la comida u otro tipo de gastos mensuales que le puedan surgir".

Respecto a la adquisición de una vivienda, una persona joven tiene que destinar el sueldo íntegro de 2,8 años para poder pagar la entrada. "Y además, aunque pudiéramos ahorrar esa cantidad, el coste de la hipoteca supondría mensualmente el 49,9%. Por lo tanto, en ambos casos, sobrepasamos el umbral de sobreendeudamiento del 30%", incide la presidenta. Teniendo en cuenta la vivienda libre en alquiler, por provincias, la más cara es Segovia, donde los jóvenes tienen que destinar el 75,2% del salario y la más barata es Zamora, con un 47,9%. En el ámbito del piso compartido, Burgos es la provincia más cara, donde los jóvenes destinan el 31% del salario, mientras que Palencia y Zamora son las opciones más baratas, en las que se destinan el 20,7%. Sobre la vivienda libre en propiedad con financiación hipotecaria, Valladolid es la provincia con un nivel más caro y en la que se destina el 60,9% del salario y, la más barata, es Zamora, en la que se dedica el 37,4%, tal y como indica Ámez.

Por otro lado, en el aspecto laboral, el 51% de la población joven es inactiva, siendo la principal causa de inactividad el estar cursando estudios. Del total de la población joven, el 61,8% se encontraba cursando estudios. Asimismo, el 33,1% de la población joven en la Comunidad están trabajando y estudiando simultáneamente, mientras que el porcentaje de "ninis", según Ámez, "era tan pequeño, que no es estadísticamente significativo, por lo tanto, no lo hemos podido aportar en el informe".

Siguiendo este ámbito, en la parte de la población ocupada, el 93,6% de las personas jóvenes que están trabajando, lo hacen por cuenta ajena, siendo lo más habitual que el tiempo medio en la empresa sea menos de un año. "La contratación registrada ha mejorado en las personas jóvenes gracias a la reforma laboral. El 34,6% de contratos firmados han sido indefinidos, pero seguimos con un 65,4% de contratos temporales, por lo que quedan todavía pasos que dar y, sobre todo, con la temporalidad en el empleo", afirma la presidenta.

En el tema de los salarios, el sueldo mediano de una persona joven se establece en unos 11.615 euros netos anuales, unos 967 euros netos al mes, y se observa una brecha de género entre los salarios de los hombres y de las mujeres, siendo el salario neto anual de los primeros 1.364 euros más elevado que el de la población femenina.

"Es importante destacar que el 26,5% de las personas jóvenes se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión social y, además, el 14,9% de la población joven con un empleo también está en riesgo, lo que indica que ni siquiera el tener un puesto de trabajo nos exime a la juventud de tener garantizado el escapar de la pobreza", lamenta Ámez.

Por su parte, Andrea González, presidenta del Consejo de la Juventud de España, quiso destacar la "buena tendencia emancipatoria que se vivió durante el año" y que culmina con "un 17% de personas jóvenes viviendo fuera del hogar familiar". "Es la primera vez que esta tasa sube desde 2020, pero seguimos teniendo un 83% de personas jóvenes que no están emancipadas". Esta mejora en los datos, González lo atribuye a la subida del salario mediano joven de un 4% con respecto al año anterior y de un descenso de un 1% en la tasa de paro juvenil. "Sin embargo, estas mejoras no producen una emancipación necesaria para la magnitud del problema que tenemos ahora. Hay ciertos factores que ralentizan esta realidad: el incremento en la edad media de emancipación, que se sitúa en 30,4 años, el precio de la vivienda, cuya media para alquilar un piso estándar está en 968 euros al mes, y el salario de una persona joven, 1.057 euros medios en doce pagas, por lo que ni siquiera con todo nuestro sueldo podríamos permitirnos alquilar una vivienda en solitario".

Finalmente, Enrique Cabero, presidente del Consejo Económico y Social (CES) de Castilla y León, quiso felicitar al Consejo de la Juventud de la Comunidad su 40 aniversario y destacó su etapa activa "que ha posibilitado este acuerdo entre los dos consejos y el trabajo permanente en la preparación de documentos". Además, incidió en su labor "esencial e imprescindible" desde su creación que se traduce en la preparación de documentos e informes "muy bien elaborados, justificados y con propuestas interesantes", para el que ha aludido al presente informe del Observatorio de Emancipación de Castilla y León. "Es una materia muy importante para las personas jóvenes y para toda la sociedad, puesto que de la emancipación de las personas jóvenes dependen otras políticas y muchas otras propuestas". 

Pacto intergeneracional

Desde el Consejo de la Juventud de Castilla y León, Sandra Ámez afirma que están "constantemente" trasladando a los diversos partidos políticos y a la propia Junta los datos y conclusiones del Observatorio de Emancipación así como propuestas "para mejorar la calidad de vida de las personas jóvenes".

"El pacto social intergeneracional es una propuesta un poco amplia en la que podemos incorporar ese enfoque entre generaciones que se han estado enfrentando y creo que tenemos que estar unidas para reforzar el sistema público de pensiones, el estamento de los contratos relevo y otro tipo de aspectos que tenemos que trabajar entre todos los sectores", afirma Ámez.

Por su parte, Andrea González pidió a "todas las partes" que negocien "un pacto que dure y que solucione el problema tanto en los municipios como en las comunidades". "Las administraciones públicas tienen la responsabilidad de dar una solución urgente" a esta cuestión, aseveró la presidenta, con "políticas públicas que mejoren la realidad para construir un futuro no solo más decente sino más digno para toda la juventud".