Espíritus Libres - Juan José Rodríguez / Sastre
"Los hombres de musgo de Béjar son una fuente de inspiración"
Entre modisto y sastre, se queda con lo segundo. Pequeño empresario con tan solo 22 años. Sastre por vocación y “cosetodo” por negocio y oficio. Hace unos días participó en el programa de televisión First Dates, no encontró novio, pero se divirtió. Mitad payo, mitad gitano. Le nacieron en Bilbao, pero su padre se trasladó a La Raya con Portugal, cerca de Ciudad Rodrigo. Su etapa salmantina se fraguó en Béjar, donde estudió corte y confección, y así fue como siguió los pasos de su abuela, Donatila, la que le enseñó a coser. Hoy su taller lleva su nombre, en la capital vallisoletana.
Juan José Rodríguez, frente a su taller Donatila Costura, en la calle Esgueva de Valladolid.
La anterior entrevistada, Pilar Alonso, hizo esta pregunta sin saber a quién iba destinada:
P.- ¿Cuál es el elemento más raro que le han llevado para coser?
R.- Un suspensorio. Es una pieza de cuero que se coloca en el pene para, digamos, “decorarlo”.
P.- ¿Qué perfil de cliente tiene en Donatila?
R.- Es una profesión en la que los clientes suelen ser señoras mayores. Pero tengo la suerte de que cada vez viene gente más joven.
P.- Esta semana le hemos visto en la televisión nacional, en el programa “First Dates”. ¿Cómo ha sido la experiencia?
R.- Ha sido muy buena, pero no surgió el amor. La cita no llegó a nada… aunque me divertí.
P.- Volviendo a su formación en Béjar, ¿qué poso le dejó aquello?
R.- La importancia que le dan al mundo textil. Los paños de Béjar, sus trajes, el Museo del Textil, los hombres de musgo… Es un lugar perfecto para formarse en el mundo de la moda.
P.- Los hombres de musgo… Menudo espectáculo, ¿no cree?
R.- Sí. Como decía, siguiendo los pasos de la tradición de los hombres de musgo de Béjar, podrían crearse multitud de prendas.
P.- ¿Se pone dedal?
R.- No, me he acostumbrado a los pinchazos.
P.- Además de todo tipo de arreglos, hace trajes a medida. ¿Qué es lo que más le gusta crear?
R.- Vestidos de gala. Todo lo que sea oscuro, pedrería, terciopelo, piel de melocotón, largos, capas… Un look para llevar a una gala. Me encanta.
P.- ¿Tiene mucho trabajo en Costura Donatila?
R.- Bastante. Por fortuna trabajo mucho. Recemos para que siga así.
P.- En mis tiempos, los sastres eran un poco diferentes a usted…
R.- Ahora los tiempos han cambiado y cabemos todos. Un sastre puede ser un chaval joven lleno de piercings y tatuajes, cosiendo con la música a todo volumen.
P.- ¿Le gusta más coser o el patronaje?
R.- Coser. El patronaje no me gusta mucho, pero debo decir que se me da muy bien.
P.- Déjeme una pregunta para el siguiente invitado.
R.- ¿Consideras que eres feliz con la vida que tienes?