«En el PP tenemos un líder consolidado; el PSOE tiene que decir quién quiere que sea su líder»

Apenas ostenta el cargo de número dos de la Junta de Castilla y León desde hace un puñado de días y ya le ha impregnado su talante. Conciliadora y centrada en mantener un tono «moderado», pero «reivindicativo», la zamorana Isabel Blanco estrena despacho a la vez que la Comunidad estrena gobierno monocolor –en minoría– y lo hace consciente de que necesitará de los acuerdos para que lo queda de legislatura.

Huye del conflicto, subraya «lo inexplicable de la ruptura» por parte de VOX por «algo que se venía haciendo periódicamente», y reclama a Pedro Sánchez que «dimita y convoque elecciones», aunque descarta un adelanto electoral en Castilla y León.

Pregunta.- A la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, ahora también le suma la Vicepresidencia con más atribuciones. Teme eso de quien mucho abarca…

R.- No. A las funciones que tengo como consejera se incorporan las de vicepresidenta y ha habido una redistribución un poco de las funciones, pero en el fondo es más trabajo y a mí el trabajo es algo que nunca me ha dado miedo. Es trabajar un poquito más, coordinar... Es verdad que la Consejería de Familia ya está más rodada y tiene ya su propia inercia. Es ir incorporando estos nuevos aspectos.

P.– Ya se conoce su trabajo al frente de los servicios sociales, ahí están los resultados de los informes y el liderazgo, ¿pero cuáles serán sus primeras acciones como vicepresidenta?

R.– Como vicepresidenta la labor fundamental es, independientemente de la sustitución de la representación de la Junta en ausencia del presidente, un poco la coordinación. El tema también del Consejo de Europa, tratar de trasladar junto con el presidente y el portavoz ese mensaje más político en determinados asuntos que son más transversales, sobre todo los sociales. Que haya una vicepresidenta del ámbito social pone en valor precisamente es ese reconocimiento a los servicios sociales de la comunidad, de ese liderazgo que hay. Y, bueno, me lo habéis oído decir más veces, el bajar también el tono. Eso no quiere decir que no sea duro, ni que no se sea contundente, sobre todo cuando se reclaman cosas para Castilla y León. Pero esa contundencia se puede expresar con otro tono más suave.

P.- ¿Con otro tono frente al de su predecesor, entiendo?

R.– Bueno, con otro tono frente a los predecesores a lo mejor.

P.– De hecho, sus dos predecesores estaban envueltos en polémica, ¿la suya va a ser la vicepresidencia de la mesura?

R.– Yo lo voy a intentar. Hay que ser reivindicativos pensando en Castilla y León y reivindicar siempre lo mejor para esta comunidad, para las nueve provincias. Castilla y León no puede ser una comunidad de segunda y, en ese sentido, se trata de reivindicar, no conformarnos y seguir avanzando. Pero yo entiendo que la reivindicación se puede hacer desde la moderación en el lenguaje o desde la mesura en ese lenguaje. Es lo que nos están demandando los ciudadanos, bajar ese ambiente de crispación que hay, esa tensión permanente. A mí me gusta mucho una frase que dice mucho el presidente, que es seña de identidad suya. Vamos a hacerlo desde la serenidad, desde la tranquilidad. Se puede ser reivindicativo desde esa serenidad manteniendo las formas.

P.– Ha estado alguna vez incómoda cuando su socio no mantenía las formas, cuando había algunas polémicas?

R.– Me he dedicado sobre todo a trabajar en este sentido y no opinar. Sobre determinadas opiniones personales no entrar a opinar, cada uno tenemos nuestra forma de expresión, y, sobre todo, a contar lo que se estaba haciendo realmente, lo que hemos ido haciendo durante estos años de gobierno.

P.– ¿Cómo es la vida sin VOX en el gobierno?

R.– Yo puedo hablar de cómo es mi vida en este sentido, que sigue siendo de mucho trabajo. La Consejería es muy amplia. Se incorporan estas labores de vicepresidencia, es más trabajo y, bueno, tratando de compatibilizar, de ajustar todo.

P.– ¿No están más cómodos sin VOX en el gobierno?

R.– Lo que hay que hacer es seguir trabajando. Aquí teníamos un gobierno que funcionaba, lo decía el presidente en el debate del estado de la Comunidad, se estaban poniendo muchas medidas en marcha. Era un gobierno que funcionaba y él hizo un balance de lo que habíamos hecho, e hizo propuestas a futuro. Se trata de continuar esa línea de acción. Es verdad que es un poco incomprensible, un poco inexplicable, la causa por la que se rompe. De hecho, es una causa impuesta por la dirección nacional de VOX a nivel de Madrid, porque se estaba trabajando y la situación en este caso de los menores no era nada diferente a lo que se venía haciendo habitualmente. A partir de ahí nuestro objetivo tiene que ser seguir trabajando y generando oportunidades. Sobre todo pensar en las personas de esta tierra, en las que más lo necesitan, y desde luego esa es la línea en la que vamos a seguir trabajando.

P. – ¿Cree que en VOX Castilla y León aceptaron a regañadientes la decisión de Madrid de romper?

R.– Fue una decisión nacional. El resto habrá que remitirse a las declaraciones que han hecho ellos. No he valorado nunca y no voy a entrar a valorar las declaraciones, pero fue una decisión nacional un poco inexplicable, la verdad. Algo que funcionaba, que mejoraba la vida de los ciudadanos, el romperlo de esta manera... A partir de ahí es un punto de inflexión porque es un cambio y a seguir trabajando, buscando esos acuerdos, buscando el consenso, el diálogo, hablar con todos, tanto grupos parlamentarios como la sociedad, y a seguir trabajando.

P.– El presidente Mañueco lo primero que hizo tras la ruptura fue anunciar la supresión de altos cargos de Vicepresidencia. ¿Es el ejemplo de que la Vicepresidencia estaba inflada?

R.– Él me planteó el tema de los altos cargos. Es verdad que las competencias hay una parte de ellas que, en cierta manera, vuelven a la consejería de Presidencia, que es donde han estado otras legislaturas. Hay una parte de competencias que me quedo yo, y yo ahora mismo, con la estructura que tengo, incorporando a lo mejor a alguna persona en un momento dado, no necesito una estructura mayor.

P.– El exvicepresidente se estrenó como portavoz de VOX advirtiendo que podían no pactar por la relación del PP con los sindicatos. ¿Cree que VOX puede permitirse votar con el PSOE?

R.– Es un trabajo parlamentario, en primer lugar, no es una responsabilidad del Gobierno, pero que habrá que ir viendo en el Parlamento, iniciativa a iniciativa que se vaya tramitando. Desde luego, nuestro objetivo es hablar, dialogar, buscar el acuerdo, el consenso para esas iniciativas que entendemos que mejoran la vida de las personas de Castilla y León. Con quién va a votar cada uno es algo que se irá viendo y que sobre todo se tendrá que explicar a nivel parlamentario.

P.– ¿Existe algún escenario, como el que se daría si no se llegará a acuerdo de presupuestos, en el que estaríamos abocados a un adelanto electoral?

R.– El presidente ya lo ha dicho, que él no va a adelantar, no está en su intención el adelantar las elecciones. El día a día lo veremos a partir de septiembre en el Parlamento, habrá que ir negociando tema a tema.

P.– La inmigración, con la llegada de menores no acompañados, fue la excusa de VOX para romper el pacto, pero en el Congreso votan PP y VOX juntos contra la reforma de la Ley de Extranjería. Incluso coinciden en pedir usar las Fuerzas Armadas para contener la inmigración. Parece que les unen más cosas de las que les separan.

R.– El tema de los menores fue un acuerdo del Consejo Territorial, un plan de respuesta. Ya en 2021 se empezó a trabajar sobre él ante la situación que estaban viviendo Ceuta y Canarias. Era muestra de la solidaridad de las comunidades. Anualmente, mientras hubiera esa situación de crisis migratoria cada comunidad acogería un número de menores. En 2021 fueron 25, en 2022 fueron 18, en 2023 han sido 23. No se entiende que algo que se viene haciendo periódicamente pueda ser una causa de ruptura. Nosotros hemos respondido al compromiso que adquirimos cuando aceptamos ese plan de respuesta.

Frente a eso, siempre hemos dicho es que las competencias migratorias son del gobierno de España y ahora no hay una política migratoria clara. El gobierno está demostrando su incompetencia. El tema ha saltado por los menores, pero no son solo los menores. En Canarias hay un número muy elevado de inmigrantes. Existe una emergencia migratoria en este país. Entran por las costas canarias, pero no solamente. Y lo que se plantea en la conferencia sectorial es que cumplimos nuestros compromisos y somos solidarios con las comunidades, pero sobre todo con las personas que llegan y acogemos a esos menores. Porque no hay que olvidar que estamos hablando de personas. Y a partir de ahí, es el gobierno el que tiene que hacer una política. No se trata de trasladar a los menores, se trata de una política integral, de aplicar medidas en origen como están haciendo otros países, de hacer una política real en sus países de origen, de ejercer un control de las fronteras, de implicar a la Unión Europea puesto que España es la frontera europea. El mecanismo europeo para ese control de fronteras es el Frontex y se pide activarlo, y se demanda también la convocatoria de la Conferencia de Presidentes. Es necesario un pacto a nivel global, a nivel de Estado, sobre la política migratoria.

Claro, el Gobierno no habla ni negocia, lo que quiere es la imposición del texto que se llevaba a debatir y por eso el PP votó que no. Hay una serie de solicitudes que se han planteado, sentémonos a negociarlas. Y es importante recordar que los que le fallaron al gobierno fueron sus socios de investidura con los que está negociando otra serie de iniciativas. Ese día no solo no salió adelante la reforma del artículo 35 de la ley de Extranjería, tampoco salió adelante el techo de gasto. Esa parte es verdaderamente preocupante.

P.– ¿Cree que el tiempo de Pedro Sánchez ya pasó y debería convocar elecciones?

R.– Pues lo decía el presidente Feijóo y lo decía el presidente Mañueco, estamos en una situación en la que realmente es un gobierno central bloqueado, un gobierno que no es capaz de sacar las iniciativas adelante, un gobierno que no cuenta con el apoyo de sus socios, que lo que está es cediendo permanentemente a los chantajes, que se ha acostumbrado a la negociación bilateral en temas que afectan a todas las comunidades, como puede ser la reforma de la financiación autonómica. Eso perjudica al ciudadano, genera comunidades de primera y comunidades de segunda. Y sí, Pedro Sánchez debería dimitir y convocar elecciones.

P.– Hablando del PSOE. ¿En Castilla y León alberga una esperanza de poder llegar a algún acuerdo con él?

R.– Pues nosotros nos vamos a sentar a hablar, a dialogar, vamos a intentar llegar a acuerdos con el Partido Socialista, pero también con todos los partidos que forman las Cortes de Castilla y León.

P.- ¿Con VOX como socio preferente?

R.- Con todos. Sentarnos a hablar, a dialogar iniciativa a iniciativa porque son buenas para las personas de Castilla y León.

P.- ¿Qué falla para que los dos principales partidos no lleguen a acuerdos en Castilla y León?

R.- Dos no llegan a acuerdos si uno no quiere. El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, no este año, sino en el anterior debate del estado de la Comunidad, le ofreció al Partido Socialista sentarse a hablar para cerrar tres grandes pactos de comunidad. Un pacto sanitario, un pacto sobre el Corredor Atlántico y un pacto sobre la financiación autonómica. El Partido Socialista no ha querido esos pactos. Este año el presidente lo que ha hecho ha sido ofrecer dos pactos a la sociedad sobre conciliación y para ayudar a las familias más vulnerables. Para que se puedan llegar a acuerdos tienen que querer las dos partes. Desde luego, por nuestra parte no va a quedar el intentarlo, pero con todos los grupos políticos, en intentar lograr ese acuerdo, ese consenso y ese trabajo diario.

P.- ¿La oposición se lo está poniendo fácil en Castilla y León?

R.- Creo que el señor Tudanca, el líder de la oposición, lo primero que tiene que hacer es definir qué es el Partido Socialista de Castilla y León. En cada territorio el Partido Socialista tiene una voz diferente, en cada provincia, sobre temas importantes de comunidad. No opina lo mismo el Partido Socialista de León que el Partido Socialista de Valladolid o el Partido Socialista regional, por poner un ejemplo. El señor Tudanca lo primero que tiene que hacer, lo primero que tenemos que saber, es qué opina, qué defiende o qué quiere el Partido Socialista de Castilla y León, más allá del seguidismo habitual que hace de Pedro Sánchez, independientemente de que las políticas que pone en marcha el gobierno de España perjudican en muchas ocasiones a la comunidad de Castilla y León.

P- Habla de seguidismo. Muchas veces reprochan a Tudanca que está a las órdenes de Sánchez, incluso la sombra de Óscar Puente. ¿El problema del PSOE de Castilla y León es el liderazgo?

R.- Eso lo tiene que decir el Partido Socialista de Castilla y León.

P.- ¿Es Óscar Puente el enemigo a batir del PSOE de Castilla y León?

R.– A ver, el Partido Popular no tiene enemigos. El Partido Popular trabaja por las personas de Castilla y León. Nosotros tenemos un líder consolidado que es Alfonso Fernández Mañueco, un líder que es una persona que conoce perfectamente esta Comunidad, no de ahora de ser presidente, sino desde hace muchos años, que se ha pateado toda la Comunidad y que gestiona. El resto de partidos son ellos los que tienen que decir quién quieren que sea el líder del Partido Socialista de Castilla y León.

P.–Porque ¿no está claro?

R.– Lo tienen que decir ellos. Me está preguntando por dos personas del Partido Socialista. Lo que yo sé hasta el momento es que el secretario general del Partido Socialista es Luis Tudanca.

P.- ¿Entiende el Lexit?

R.- No, yo creo que no es el momento para abrir estos debates territoriales, sinceramente. Y yo además soy de Zamora y cuando preguntas en Zamora, a la gente de Zamora lo que le preocupa es el día a día, la gestión del día a día, que mejore la economía, que puedan llegar a final de mes, que se implementen nuevas medidas. Sinceramente no está en ese debate.

P.- ¿Y la de León?

R.- Hay que seguir apostando por León como se está haciendo, hay que seguir invirtiendo en León. Siempre desde el respeto a lo que cada persona pueda sentir o con lo que pueda identificarse. A mí me gusta decir que juntos, todos juntos, llegamos más lejos y que hay que seguir apostando por esta comunidad, por todas las provincias y generando oportunidades en todas las provincias de Castilla y León. Ese es el compromiso que tenemos.

P.- Los desequilibrios territoriales son un lastre. ¿Por qué no se consiguen revertir del todo?

R.- Bueno, se está trabajando. La despoblación, por ejemplo, no es un problema de Castilla y León solamente, es un problema a nivel de España, a nivel de Europa. El envejecimiento de la población, a la vez que es algo bueno porque se viven más años implica también que tenemos que prestar más servicios en una comunidad tan dispersa, tan grande como es la nuestra. Es un problema complejo para el que no hay una varita mágica ni tiene una solución única. Es importante ir poniendo medidas encima de la mesa que vayan avanzando, que ayuden a generar empleo y oportunidades en diferentes ámbitos y sectores, poner programas en marcha que incentiven que la gente no solamente se quede en Castilla y León, sino que también quiera venir y quiera volver. Y esa es la línea en la que seguimos trabajando. Mejorar las comunicaciones, apostar por políticas de empleo. El tema de la vivienda es uno de los grandes retos, no solo a nivel de Castilla y León sino nacional. Y hay que seguir poniendo medidas. En ese sentido, este año hay un dato bueno que es el incremento de nacimientos publicado hace unos días. Esa es la línea en la que queremos seguir avanzando.

P.- El presidente Mañueco habla de apostar por el diálogo. ¿Ha faltado diálogo hasta ahora en estos dos últimos años?

R.- Sí se ha dialogado y sí se han llegado a acuerdos, pero desde luego hay que seguir. La situación cambia, pasamos de ser un gobierno en coalición a ser un gobierno en minoría. Hay que seguir intensificando ese diálogo, pero con todo el mundo ha habido diálogos y hay que intensificarlo también.

P.- Hablan muchas veces como de una especie de borrón y cuenta nueva. ¿Se toman esto que viene como una ‘minilegislatura’?

R.- No, no es borrón y cuenta nueva porque, yo lo decía al principio, aquí hay un discurso de investidura del presidente y ha habido dos debates del estado de la Comunidad. Se trata de seguir aplicando las medidas que estaban funcionando. Por lo tanto, ahí no es borrón y cuenta nueva. Se continúan desarrollando esas líneas de actuación que estaban funcionando y que se venían aplicando y mejorar aquellas cosas que podían no funcionar en un momento dado.

P.- ¿La Ley de Concordia va a seguir adelante tal y como se tramitó? ¿Qué va a suceder con esto?

R.- Pues la Ley de Concordia está en las Cortes, como dijo el presidente, estaba en un acuerdo, en un pacto de gobierno que VOX nacional decide romper y es algo que tendrán que verlo los parlamentarios en las Cortes, hablarlo y negociarlo.

P.- ¿La Ley de Violencia Intrafamiliar?

R.- Similar. Digo lo mismo que con la ley de Concordia.

P.- Sus ex socios renegaban de la violencia machista y usted es una clara defensora de su lucha. ¿Le ha incomodado esa situación alguna vez?

R.- Nosotros hemos seguido trabajando, poniendo medidas encima de la mesa e incrementando el presupuesto. La sociedad tiene una lacra que es la violencia machista, la violencia que se ejerce contra las mujeres, y tenemos que seguir trabajando. Hemos hecho mucho estos años. A mí me dolía cuando oía al Partido Socialista decir que se estaba retrocediendo en esos derechos porque no es verdad. Hemos incrementado el presupuesto, se han incrementado las acciones de prevención, de información, de sensibilización a las mujeres, se han incrementado las mujeres atendidas, los recursos, las plazas en las casas de acogida, en los centros de emergencia. Y tenemos que trabajar todos juntos, todas las administraciones, toda la sociedad, por seguir erradicando la lacra de manera coordinada. Ese es el objetivo que yo tengo, huir de los discursos extremistas en los dos sentidos, huir de esa polarización y que trabajemos para ayudar a todas esas mujeres.

P.– Ha tenido dos socios de gobierno ¿Qué etapa ha sido más cómoda?

R.– Bueno, pues lo que hemos hecho ha sido enfrentar los problemas diarios, tanto en una etapa que vivimos una pandemia, como en la última en la que ha habido otra serie de problemas, como la crisis migratoria. Lo que hemos ido haciendo es enfrentar en el gobierno que había y con el gobierno que había los problemas que iban surgiendo.

P.- ¿Hay una nueva etapa con los sindicatos?

R.- La consejera de Industria se reunió ya con ellos el lunes, esa primera toma de contacto para hablar del Diálogo Social, escuchar sus propuestas y seguir avanzando en el diálogo social. Había ya una serie de acuerdos que estaban ya cerrados con las consejerías esta legislatura y se trata de firmarlos. Estaban trabajados con las consejerías, existen unas actas de esos acuerdos y se trata de firmar ya ese gran acuerdo con el Diálogo Social en esta materia. El Diálogo Social siempre ha sido seña de identidad de esta comunidad y lo va a seguir siendo.

P.- ¿No ve una anomalía que el presidente de las Cortes sea de VOX habiendo ya ruptura del pacto de gobierno?

R.- A ver, eso lo tendrá que decidir el presidente de las Cortes y su partido a nivel nacional. En este caso, la dirección nacional de VOX fue la que determinó que los vicepresidentes y los consejeros salieran de los gobiernos, pero que no lo hicieran de los parlamentos. Es algo que tienen que explicar ellos.

P.- ¿Cree que esta decisión, que ha descrito usted de ‘inexplicable’, va a pasar factura VOX en las próximas elecciones en Castilla y León?

R.- Nunca se sabe.

P.- No se moja.

R.- No se sabe. Habrá que irlo viendo día a día.

P.- Usted también ha dicho que el pacto ha funcionado. ¿Lo repetiría de nuevo?

R.- A mí lo que me gustaría es un gobierno de mayoría absoluta. Yo he estado en dos gobiernos de coalición, con Ciudadanos y con VOX. Ahora mismo estamos en un gobierno de minoría y a mí esto lo que me gustaría es estar en un gobierno con mayoría absoluta, y se va a trabajar por lo menos para intentarlo.