UPA-COAG pide "máxima atención" a agricultores y apicultores para evitar incendios en Castilla y León
La Alianza aclara que en época de peligro alto se puede utilizar cosechadora "siempre que esté dotada de matachispas en la zona de monte y perimetral mencionada"
La Alianza UPA-COAG ha recordado este martes a los agricultores y apicultores de Castilla y León la necesidad de mantener "máxima atención" para evitar incendios ante la nueva ola de calor por la que se ha activado la alerta amarilla en todas las provincias de la Comunidad.
A través de un comunicado de prensa recogido por Europa Press, UPA y COAG ha aclarado que en época de peligro alto de incendios se puede utilizar cosechadora "siempre que esté dotada de matachispas en la zona de monte y perimetral mencionada" pero recuerdan también que esta utilización queda prohibida en esta zona cuando la temperatura supera los 30 grados y la velocidad del viento es mayor de 30 kilómetros por hora, según informa Europa Press.
La Alianza recuerda también que, según las normas, durante la cosecha que aún se está llevando a cabo en determinadas zonas de Castilla y León los agricultores deben establecer un plan de vigilancia y disponer "al menos" de una persona que se mantenga atenta mientras se cosecha junto a "medios de extinción suficientes" de, al menos, dos mochilas extintoras cargadas de agua y dos batefuegos, para controlar los posibles conatos que se puedan originar.
La norma obliga también a mantener la maquinaria en "condiciones adecuadas de revisión periódica y mantenimiento" y a realizar labores perimetrales en su caso para dificultar la propagación del fuego.
Otras de las recomendaciones "a atender" son disponer de un tractor y gradas en las inmediaciones de la parcela en recolección, reducir la velocidad de avance y elevar la plataforma de corte en terrenos pedregosos o con pendiente y cosechar en contra del viento.
"Es máxima la precaución que hay que tomar en la utilización de herramientas que generan chispas en el medio natural o agrícola y máxima atención durante la cosecha del cereal, sobre todo los días con altas temperaturas y fuertes vientos", insisten las organizaciones agrarias ante la nueva ola de calor que afecta desde hoy a Castilla y León.
La Alianza ha recordado también que el Servicio de Prevención de Incendios de la Consejería de Medio Ambiente llama a extremar las precauciones cuando se den diversas circunstancias, como que se perciba viento sobre la cara o que agita el cereal sin cesar o a rachas; las horas de máximo peligro: de 13.00 a 19.00; temperatura elevada o humedad relativa del aire menor del 30% y terrenos pedregosos o con pendiente.
UPA y COAG han hecho especial hincapié en que tanto en las áreas de monte como en su zona perimetral está prohibida por la legislación contra incendios la quema de rastrojos durante todo el año y añaden que durante la época de peligro alto de incendios también está prohibida la quema de restos vegetales, "aunque estén acumulados en pequeños montones".
A esto añaden que la condicionalidad de la política agraria comunitaria prohíbe durante todo el año la quema de rastrojos en todo el territorio de la Comunidad Autónoma, "con independencia de si se trata o no de áreas de monte o su zona perimetral, salvo excepción por motivos fitosanitarios y previa autorización de Medio Ambiente", y advierten de que incumplir esta prohibición puede conllevar "importantes penalizaciones y sanciones para los infractores".
Por otra parte, la Alianza ha informado a los apicultores de que la normativa que regula las prohibiciones para evitar incendios forestales en Castilla y León impide el uso del fuego en el desarrollo de la actividad apícola durante la época de peligro alto de incendios, "si bien podría ampliarse si lo aconsejan las circunstancias meteorológicas".
No obstante, se permite el uso de ahumadores en el desempeño de la actividad apícola en los montes y la franja perimetral de 400 metros que los circunda. La Alianza ha recordado al respecto que la mayor parte de la actividad apícola en Castilla y León se desarrolla en estas áreas.
Finalmente, la Alianza ha reivindicado la "demostrada responsabilidad" de los profesionales agrarios "que, siendo conocedores del peligro de incendios, extreman las precauciones en su tarea profesional, especialmente en una época del año como la actual, donde con episodios como los actuales de riesgo alto de incendios no solo actúan con máxima prudencia sino que además son los primeros que lo combaten con sus propios medios, poniendo en riesgo sus propias vidas, cuando se produce algún fuego".
Y han hecho un llamamiento al conjunto de la sociedad ante el aumento de población que disfruta del turismo rural y de actividades al aire libre en estas fechas para que se conciencie de la necesidad de evitar negligencias en el campo, "puesto que en estas fechas de altísimas temperaturas la más mínima irresponsabilidad puede provocar incendios con nefastos efectos medioambientales e, incluso, de pérdidas humanas".