Castilla y León amplía las ayudas a los enfermos de ELA para adaptar y dotar sus casas

La Junta de Castilla y León amplia las ayudas para obras y compra de material especial de enfermos de ELA. La cuantía máxima prevista por persona es de 12.000 euros divididos a partes iguales entre los trabajos de adaptación de los domicilios de los afectados y la adquisición de productos de apoyo especiales tecnológicos personalizados a cada afectado, incrementando así la cuantía en un 33%, que antes se situaba en los 4.500 euros para cada asunto. Así lo constató la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco durante la rueda de prensa de la presentación de las ayudas. En este aspecto, la consejera aseguró que "no se trata de dar una ayuda mensual y después olvidarse de los enfermos".

De esta manera, la Junta refuerza los esfuerzos destinados a estas personas para "seguir atendiendo las demandas continuas desde la asociación ELACyL", aseguró la consejera. Por ello, el 'Protocolo ELA' establecido dentro del programa 'INTecum' para personas con enfermedades crónicas o terminales se refuerza. La novedad más importante en este aspecto es que, "desde los inicios de la enfermedad se les considere dentro del nivel más alto de hogares en riesgo", explicó Blanco en la presentación. De esta manera se podrán beneficiar de las ayudas económicas más altas que, en el caso de encontrarse en un nivel bajo, no podrían acceder a ellas. Por otra parte, Blanco recordó que los enfermos de ELA pueden solicitar esos mismos productos en préstamo a través de ELACyL.

Por otra parte, la consejera presentó el llamado 'Respiro Lola Villanueva'. Esta medida pretende sufragar con hasta 2.500 euros la atención en centros residenciales de manera puntual y temporal para que las familias de los afectados y los cuidadores puedan tener 'un respiro'. El nombre de la iniciativa proviene de Lola, una afectada de ELA que falleció hace dos meses, como explicaba la presidenta de ELACyL, Rosa María Gómez, también presente en la rueda de prensa. Cabe destacar que esta cuantía es complementaria a las descritas, y que está disponible desde estas vacaciones, de modo que si el afectado y su entorno así lo deciden, podrán hacer uso de una residencia durante un breve periodo de tiempo. Por tanto, cada afectado de ELA podrá contar con 14.500 euros totales de ayudas, entre obras en las viviendas, productos de apoyo y el 'respiro' de sus cuidadores.

Según los datos aportados por la consejera, actualmente se benefician de estas ayudas 200 personas, y 102 se han adscrito al 'Protocolo ELA' del 'INTecum'. Por otra parte, las ayudas a domicilio "casi se han duplicado desde la asociación", según destaca Blanco, que asegura que estas medidas se aplicarán de cara a "seguir avanzando día a día pensando en cómo podemos facilitarles la vida".

Desde ELACyL, la presidenta afirmó que la asociación cuenta con 102 socios. "Constituye un aumento de la visibilidad y de las ayudas, los afectados siguen acercándose a nosotros", afirmaba Gómez. En cuanto a las terapias y ayudas a domicilio, también han incrementado el número de personas que se benefician de ellas. Los servicios de logopedia incrementaron del 16% al 38%, y la ayuda a domicilio prestada desde la asociación ha visto ampliada su cifra hasta el 48%.

Según la Junta, el actor principal de a la hora del entendimiento de las personas con ELA es la asociación ELACyL. Por ello, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades firmaron un convenio de colaboración el pasado año, que este año fue revisado, puesto que la cuantía económica percibida por la asociación proveniente de la Junta pasó de 200.000 euros a 250.000 euros, y se estableció en los Presupuestos Generales de la Comunidad como subvención nominativa. De esta manera, en palabras de Blanco, "reforzamos el compromiso con las personas con ELA, con sus familias y con la asociación".

En la Comunidad, según los datos aportados por Salud de Castilla y León el pasado mes de febrero, actualmente hay diagnosticadas unas 250 personas con esta enfermedad. Tanto la consejera como la presidenta de ELACyL explican que es muy complicado tener datos exactos al respecto ya que "no hay un censo" exacto de personas que padecen ELA debido a aquellas que presentan síntomas y que no están diagnosticadas oficialmente.