Castilla y León, entre las comunidades del país con mejores servicios sanitarios

Castilla y León asciende hasta el cuarto lugar en el ‘Informe sobre los Servicios Sanitarios de las comunidades autónomas’, realizado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP). Navarra mantiene la primera posición en el ránking, con 106 puntos sobre 142 posibles, seguida de cerca por País Vasco (con 105) y de Asturias, que arrebata la tercera posición a Extremadura al alcanzar el centenar de puntos.

Esas serían las cuatro autonomías con mejores servicios sanitarios de todo el país, de acuerdo con el estudio, mientras que Valencia (con 62 puntos sobre un mínimo de 33), Andalucía (con 66), Baleares (77) y Murcia (78) son las que presentan peor balance. Castilla y León es, junto con Canarias, la única que gana tres puestos en el último año, adelantando a Extremadura, Aragón y Galicia respecto a 2023, algo que le ha permitido recuperar la cuarta plaza que ya ocupaba en 2010, según informa Ical.

Desde la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública recalcan que el informe realiza una comparación en la situación de los servicios sanitarios entre ellos, y no una evaluación de si estos son buenos o malos de manera absoluta. De hecho, en un comunicado difundido por Ical aclaran que “el sistema sanitario público ha empeorado globalmente” desde que se llevan a cabo estos estudios, algo que consideran “es una evidencia constatable con los datos empíricos (recursos humanos, dotación, demoras, etc) y con la opinión de la ciudadanía”. Por lo tanto, aclaran que “los cambios en el orden de puntuación tienen que ver no con el hecho de que algunas de las comunidades hayan mejorado sino con que han empeorado menos que las otras”.

También señalan que “una buena situación relativa puede encubrir muy serios problemas en parte del territorio de esa autonomía, porque no se analizan las desigualdades intracomunitarias, que existen y hay motivos para pensar que son importantes, pero sobre las que no existen datos públicos suficientes para hacer evaluaciones”.

En ese sentido, explican que tras la pandemia se produjo una grave crisis de la Atención Primaria, que “continúa con esperas intolerables, con recursos insuficientes, y con graves problemas que hacen muy difícil que pueda ser el eje vertebrador del sistema sanitario”.

En cuanto a financiación, recursos y funcionamiento, Castilla y León se sitúa con datos de 2024 en sexta posición en presupuesto sanitario per cápita, con 2.042,51 euros, lejos de los 2.311,16 de Asturias. En cuanto a camas por cada mil habitantes, la autonomía se encuentra en tercera posición, con 3,89 por detrás de Cataluña y Aragón, y en cuanto a camas del Sistema Nacional de Salud la ratio se sitúa en 3,1 por cada mil habitantes, en sexta posición.

El número de quirófanos por cada mil habitantes es de 0,1 en Castilla y León, que aparece en novena posición, y la ratio de médicos de Atención Especializada es de 2,16 por cada millar de habitantes (en décima posición), una cifra que se sitúa en 4,1 en el cado de las enfermeras (octava posición, muy lejos de las 7,12 de Navarra). En Atención Primaria, el volumen de médicos se sitúa en 0,95 (primera posición de todo el país), mientras que en el caso de las enfermeras es de 0,86 (segundo lugar empatada con Extremadura y por detrás de las 0,9 de La Rioja).

En cuanto al porcentaje de cesáreas por cada cien partos (con datos de 2022) ascendió al 25,27 por ciento en Castilla y León, mientras las intervenciones por quirófano se situaron en 1.091,74 en el mismo ejercicio, en séptima posición. Además, el porcentaje de intervenciones quirúrgicas de cirugía mayor ambulatoria se situó en el 47,%, y el número de urgencias por cada millar de habitantes fue de 555,85.

El gasto farmacéutico en recetas ascendió en la Comunidad a 328,81 (el segundo mayor tras los 360,48 euros de Extremadura), y el gasto farmacéutico hospitalario se situó en 217,79 euros (sexto lugar).

El informe analiza también la opinión ciudadana sobre los servicios sanitarios que presta su autonomía. En ese sentido, la puntuación recibida por los castellanos y leoneses es de 6,4 sobre diez, lo que supone el noveno puesto, y la ratio de ciudadanos que elige la sanidad pública para su hospitalización alcanza el 83%. El 88,97%  de los encuestados considera que la atención recibida en Primaria, en el especialista, urgencias o tras ser hospitalizado fue buena o muy buena, y seis de cada diez consideran que la sanidad pública funciona bien o bastante bien, aunque serían precisos algunos cambios.

En cuanto a las listas de espera, el 27,5% asegura que al pedir cita para el especialista la fecha de la consulta llega en treinta días o menos, y en Atención Primaria el 34,1% afirma recibir cita en menos de 24 horas. El 13,9% de los encuestados considera que han mejorado las listas de espera, y los días de promedio en listas de espera quirúrgica, al cierre de 2023, se situó en 101 días en la Comunidad, una cifra que se sitúa en 90 días en el caso de las consultas con el especialista.

Y respecto la privatización de los servicios sanitarios, el gasto de bolsillo anual por personal en Sanidad ascendió en Castilla y León a 542 euros (séptimo lugar del ránking estatal), mientras que el gasto sanitario dedicado a contratación con centros privados fue del 2,9 por ciento. El número de consultas al especialista privado al año se situó en la autonomía en 0,35 (un punto menos que en Baleares, que encabeza esa clasificación), y el porcentaje de personas que acudieron al médico de cabecera privado fue del 17,7%. Por último, el 19,7% de los castellanos y leoneses cuentan con seguro sanitario privado, la mitad de la cifra registrada en Madrid (38,7%).