Terapia confidencial para médicos con trastornos psíquicos o adicciones en Castilla y León

Aunque los problemas de salud mental y todo lo que conllevan no representan el mismo tabú que hace años, todavía hay quien teme reconocer que tiene una dolencia cuando esta no es física. En el caso de los médicos que tienen que ser atendidos por ‘colegas’ de profesión en ocasiones el recelo para pedir ayuda resulta aún mayor. Este es uno de los principales motivos para que exista el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), coordinado por los colegios de médicos de cada comunidad, pensado para facilitar al facultativo enfermo, «con trastornos psíquicos o conductas adictivas que puedan interferir en su práctica profesional, el acceso a una atención sanitaria de calidad y especializada».

En Castilla y León el pasado año 92 médicos estuvieron en tratamiento recibiendo terapia confidencial y 31 de ellos fueron de nuevo ingreso en el programa. De los 92 pacientes atendidos a lo largo de 2023, este 2024 lo empezaron en tratamiento 72, otros 15 fueron dados de alta y 5 abandonaron el programa.

El coordinador autonómico del PAIME en Castilla y León, Juan José Aliende, médico de Familia de Burgos ya jubilado, indica que «el programa se basa en evitar el estigma y también que el médico se automedique». «Somos muy reacios a pedir ayuda y más si piensas que otros compañeros van a saberlo, pero aquí prima la privacidad total, y además tratamos al médico para evitar también una mala praxis hacia el paciente», señala.

La edad de estos pacientes no se limita a una franja concreta, aunque la media se establece en los 40 años. La mayoría (11) de los facultativos atendidos el pasado año en el Paime ingresó con entre 31 y 40 años, otros 8 eran menores de esa edad y ocho tenían entre 51 y 60 años. De todos los médicos atendidos el pasado ejercicio en la Comunidad sólo uno superaba los 60 años.

Desde la perspectiva del género sí surgen diferencias. Son habitualmente las mujeres las que más acuden a este programa (el 71%), y el coordinador José Aliende apunta a que una de las razones «puede ser que ellas se atrevan más a pedir ayuda».

Respecto a la distribución provincial de los 32 profesionales que ingresaron de nuevas en el programa en 2023, Burgos fue la provincia con más médicos enfermos (12) que entraron el pasado ejercicio en el Paime. Seguida por Valladolid, 6; León, 5 (uno en El Bierzo) y Salamanca, 3. Un sanitario de Zamora y otro de Soria ingresaron en el programa, mientras ninguno de Ávila y Segovia lo hizo.

Especial incidencia en los MIR

Aliende destaca la especial incidencia de los problemas de salud mental en los residentes. «Ahora estamos viendo, sobre todo desde después de la pandemia, que los residentes sienten más el agobio y manejan mal el estrés», comenta cuando 10 de los que recibieron terapia en el marco de este programa por primera vez en 2023 fueron precisamente MIR. Otros 13 de los nuevos médicos-pacientes son especialistas en alguno de los hospitales, 5 de Atención Primaria, 2 de Medicina General y uno de Pediatría.

Los diagnósticos de esos 32 pacientes nuevos respondían en 9 casos a trastornos adaptativos; en 8 a trastornos de ansiedad y en cinco a trastornos depresivos. Del resto tres presentaron trastornos de la personalidad, otros tantos patología dual, dos dependencia al alcohol y uno a sustancias.

Tienen derecho a la asistencia del Paime todos los médicos colegiados y en activo, y disponen del número de teléfono 628 79 37 93 para contactar con los coordinadores del programa.