Mañueco logra el aval de las Cortes para los presupuestos más altos de la historia

Castilla y León ya cuenta con sus presupuestos para este año. Las Cortes avalaban este martes las cuentas autonómicas presentadas por la Junta. Ambos socios de Gobierno PP y VOX votaron a favor de sus partidas, rechazando las enmiendas de la oposición. Estas son las terceros presupuestos aprobados durante la etapa de Alfonso Fernández Mañueco al frente del Ejecutivo regional y llegan con récord de gasto:14.562 millones, un 5,45% más que en 2023. Las primeras llegaron durante su efímera aventura con Ciudadanos y estas son las segundas que consigue el aval de las Cortes junto al partido de Juan García-Gallardo.

Los dos grupos que sustentan al Gobierno de coalición en Castilla y León también han logrado sacar adelante las cuentas con cuya aprobación pone fin a la prórroga de los presupuestos de 2023, situación que se ha prolongado cuatro meses.

Las segundas cuentas del Gobierno PP-VOX, los más altos de la historia de la Comunidad con 14.562 millones de euros, un 5,45%más que en el ejercicio anterior, cuyos objetivos son la mejora de la calidad de los servicios sociales, la lucha contra la despoblación, el apoyo a las familias, el crecimiento económico y el empleo y el campo como sector estratégico. El presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, destacó la «estabilidad, certidumbre y seguridad» de las cuentas.

PP y Vox impusieron la mayoría de sus 44 escaños en la votación final para aprobar las cuentas de este año -tendrán efecto retroactivo al 1 de enero- y rechazar la batería de enmiendas que en estos dos días defendió la oposición, molesta por la aplicación del «rodillo» por los socios y por no aceptar ninguna de sus propuestas, calificadas de «sensatas y realistas» por algunos de los ponentes.

"Los problemas de cada persona son para nosotros lo más relevante y porque en Castilla y León nadie se puede considerar más importante que los demás, y nadie se puede poner por encima del resto", ha apostillado el consejero que ha reivindicado que la Comunidad ha demostrado que se pueden bajar impuestos y mejorar los servicios públicos, reducir la tasa de paro y avanzar en una adecuada gestión presupuestaria.

Por su parte, la portavoz de Economía y Hacienda del Grupo Parlamentario Socialista, Rosa Rubio, ha trasladado ante el hemiciclo que los Presupuestos Generales de la Comunidad (PGC) reflejan el "fracaso" del Gobierno de la Junta formado por PP y Vox, y desvelan su "ineficacia" y las consecuencias de la "corrupción".

"Son ineficaces porque Mañueco no destina a gasto social, sanidad, educación y servicios sociales todo el dinero que le manda al gobierno de España", ha reseñado Rubio, quien ha afeado además que Castilla y León sea la última autonomía en tener cuentas en 2024.

El resto de grupos de la oposición también han defendido diferentes propuestas a las cuentas regionales sin lograr que alguna de ellas saliera adelante y se incluyera en las cuentas de este año. Así, la procuradora de UPL Alicia Gallego González ha considerado que el presupuesto es "una herramienta política que debería de ser esencial y debería de estar aprobada antes de finalizar el año para que tuviera su beneficio a primeros de enero".

Ley de Medidas

De la misma forma, las Cortes de Castilla y León aprobaron la Ley de Medidas Tributarias, Financieras y Administrativas que acompaña a los Presupuestos Generales de la Comunidad para 2024, con los votos a favor de PP y Vox (44) y el rechazo de toda la oposición en bloque (35); y que contempla deducciones fiscales por alrededor de 600 millones de las que se pueden beneficiar 480.000 contribuyentes. En el capítulo de votaciones se aprobaron dos enmiendas técnicas presentadas por los grupos que sustentan el Gobierno. Esta vez no hubo errores a la hora de votar por parte de PP y VOX.

Durante el debate de las enmiendas presentadas por los grupos parlamentarios, se constataron las diferencias de los modelos fiscales de los socialistas y de PP y Vox, una cuestión en que todos ellos coincidieron. Así, la socialista Rosa Rubio defendió 77 enmiendas a la Ley, que «en su conjunto son un fiel reflejo del modelo de Comunidad que el PSOE desea para Castilla y León, progresivo para que quien más gane, más contribuya». En ese sentido, dijo, compartió con el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, que «los impuestos no los pagan los territorios, sino las personas», con lo que apuntó que el PSOE está en contra de «regalos fiscales a los más adinerados y un modelo elitista».

Rubio comparó que mientras el PSOE «está a favor de los libros de texto, el PP favorece que 30 ciudadanos se embolsen 30 millones en la Comunidad; y que 232 personas que heredaron más de un millón de euros cada uno no haya pagado ni un solo euro en impuestos». «Frente a deducciones fiscales en el medio rural y revitalizar la economía, el PP propone abrir el teleclub del pueblo. Son dos modelos fiscales diferentes, eso es verdad», dijo.

También afeó que mientras «Mañueco elimina el Impuesto de Sucesiones y Donaciones», el Gobierno «paga las pensiones no contributivas y la lucha contra la violencia de género y ayuda a los que menos tienen, a los más vulnerables, y Mañueco mete 600 millones de euros en el bolsillo de los ricos». También señaló que «cada vez tenemos menos jóvenes porque los pocos que hay los mandan ustedes a la cola del paro con su política fiscal».

Al respecto, Óscar Reguera (PP) lamentó que Rubio «más que defender sus enmiendas, ha venido a atacar las que ya están aprobadas». «Este presupuesto demuestra que bajando impuestos se pueden financiar servicios públicos. Castilla y León es líder en fiscalidad favorable en el medio rural. Esta ley contempla cuatro nuevas rebajas. También para promover la natalidad, promoción de las familias y hacia la discapacidad», enumeró.

Reguera señaló que en las enmiendas, los socialistas «se oponen a la política de reducción de impuestos del PP», porque «para el PSOE, ser rico es ganar más de 35.000 euros brutos». También plantean crear un nuevo impuesto a las grandes superficies, «pero es para echarse a temblar, porque igual la tienda de ultramarinos de mi pueblo, que tiene de todo, es un gran establecimiento».

A su juicio, el PSOE «pretenden subir impuestos y entorpecer y malograr la ambiciosa política fiscal de Mañueco en beneficio de los ciudadanos y que mejorará a más de un millón de contribuyentes en IRPF y más de 400.000 en el resto de medidas». «En eso coincidimos, en qué disentimos: su modelo empobrece a la Comunidad y les pretende convertir en ángeles salvapatrias frente a nuestro modelo, que no demoniza a nadie para sustentar ideas, principios y valores», comentó Reguera, quien transmitió a la Cámara que las entidades locales menores «se verían gravemente afectadas con las enmiendas propuestas del PSOE».