Diario de Castilla y León

Llenar el depósito puede suponer hasta 18€ de ahorro según la provincia y la gasolinera en Castilla y León

La región está a la cola de España en diferencias de precio en función de la estación de servicio elegida, entre las que las automáticas son las más baratas / Valladolid, Ávila y Burgos posibilitan los mayores ahorros

Repostar combustible en una gasolinera. - E. M.

Repostar combustible en una gasolinera. - E. M.

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Redacción
Valladolid

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Castilla y León se sitúa a la cola de las diferencias de precio por llenar un depósito de 60 litros en función de la gasolinera elegida aunque el ahorro varía entre los 15 y los 11 euros en el caso de repostar gasolina y entre los 18 y los 13 euros en el caso del diésel, con las estaciones automáticas como la opción más barata. Una diferencia que puede alcanzar los 27 euros en Canarias o por encima de los 20 euros en Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid y Extremadura.

Un estudio de la Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (Aesae) ha comparado, con datos del Geoportal del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, el precio más alto y el más bajo que ofrecen las gasolineras en cada provincia y los territorios de Castilla y León se sitúan en la parte baja de la tabla. Seis de las nueve capitales de la Comunidad como León, Soria, Segovia, Palencia, Salamanca y Zamora figuran entre las once con menos diferencias a la hora de repostar gasolina, informa Ical.

Pese a ello, el ahorro máximo de un litro de gasolina en el caso de León llega a los 19 céntimos (11,40 euros por depósito de 60 litros de capacidad) y se sitúa en los 21 céntimos en Soria, Segovia y Palencia (12,60 euros por depósito) mientras que alcanza los 23 céntimos en Salamanca y los 24 en Zamora, el mismo que en Burgos. La mayor diferencia se da entre estaciones de servicio de Ávila (0,25 euros, 15 euros por depósito) y Valladolid (0,26 euros por litro, 15,60 euros por depósito).

En todo caso, están muy lejos de las diferencias máximas registradas en Las Palmas (0,48 céntimos y 28,80 euros por depósito), Tenerife (0,46 céntimos y 27,60 euros), Málaga (0,39 y 23,40 euros), Barcelona y Castellón (0,38 y 22,80 euros por depósito) y Alicante, Madrid y Valencia (0,37 y 22,20 euros por depósito).

Lo mismo ocurre con el gasóleo, ya que Segovia, Palencia, León y Soria están entre las seis provincias con menos diferencias de precios en España. Pese a ello, la elección de gasolinera en estos territorios puede suponer un ahorro de entre 0,22 y 0,24 euros por litro, que se traduce entre 13,20 y 14,40 euros a la hora de llenar un depósito. No muy lejos, está Zamora, con una diferencia de 0,26 euros.

En cambio, Valladolid se sitúa en la media española, con un ahorro de hasta 31 céntimos (18,60 euros por depósito), seguido de Ávila y Burgos (0,28 y 16,80 euros). También están muy lejos de los descuentos de entre 0,46 y 0,43 euros por litro en Canarias (27,60 y 25,80 euros por depósito) o los registrados en la Península como Madrid (41 céntimos y 24,60 euros por depósito), Valencia (39 céntimos y 23,40 euros). También están con ahorros por encima de los veinte euros provincias como Badajoz, Castellón, Huesca, Málaga, Guipúzcoa, Girona, Sevilla y Toledo.

La patronal Aesae aseguró que un contexto en que se vuelven a rozar máximos del último año en el precio del carburante, las gasolineras automáticas trabajan para ofrecer los precios más bajos, gracias a la menor estructura de costes, frente a las estaciones tradicionales. Un estudio reciente elaborado por esta asociación destacó que este tipo de gasolineras ya suponía casi el 20 por ciento del mercado nacional y que, gracias a la “presión competitiva” que generaba su implantación, ayudan a bajar el precio en las zonas donde se implantan.

Los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea destacaron la senda ascendente del precio de los carburantes y ya suma su duodécima semana consecutiva al alza, aunque con menores incrementos. No obstante, el coste de la gasolina subió un 0,4 por ciento en la última semana –frente al uno por ciento de la anterior– y el diésel se encareció un uno por ciento –mientras que antes fue el 2,1 por ciento–. De esta manera, el litro de la Sin Plomo 95 se eleva a los 1,759 euros y el diésel,1,685 euros.

Con respecto a hace un año, la gasolina es un 4,7% más cara, mientras que el diésel es un 7,5 por ciento más barato, aunque en esa fecha se aplicaba la bonificación de 20 céntimos por litro aprobada por el Gobierno. Por lo tanto, si se tiene en cuenta el impacto del fin del descuento fiscal, la gasolina y el diésel han subido de media un 18,9 y un 3,9 por ciento, respectivamente.

Con los precios de la última semana, llenar un depósito de 55 litros de gasolina cuesta ya 96,74 euros, es decir, 38 céntimos más que la semana anterior. Por su parte, un depósito de un vehículo de gasóleo conlleva un gasto que asciende a 92,67 euros, casi un euro más que en la última referencia.

El único ‘consuelo’ para el bolsillo de los consumidores es que el importe medio de la gasolina en España sigue por debajo de la media de la eurozona, donde el precio de venta al público del litro de gasolina se ha situado en 1,922 euros por litro, y el del gasoil, en 1,855 euros.

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