Castilla y León destina 15,6 millones para desplegar 45 kilómetros de carriles-bici

Castilla y León estrenará 45 kilómetros de nuevos carriles bici interurbanos, a través de una inversión de 15,6 millones de euros con cofinanciación de los fondos europeos Next Generation . Así lo anunció este miércoles la consejera de Movilidad y Transformación Digital, María González Corral , en una comparecencia con motivo de la Semana Europea de la Movilidad, convocada en su edición de este año con el lema ‘Ahorra energía’ . Se trata de ocho proyectos de sendos tramos que transcurren fuera de los cascos urbanos (pues dentro de los núcleos de población la competencia es de los ayuntamientos), localizados en siete provincias de la Comunidad. La consejera los explicó uno a uno, aclarando que el objetivo es «facilitar la movilidad sostenible y fomentar el uso seguro de la bicicleta en los desplazamientos cotidianos de los ciudadanos que residen en el alfoz de algunos de los principales núcleos de población de la Comunidad».

Y es que, aseguró González Corral, es necesario que los ciudadanos se conciencien de que «una simple elección» en su forma de desplazarse «puede tener un gran impacto a nivel global». Estas ocho propuestas de la Junta, dentro de las políticas para la promoción de la movilidad sostenible en Castilla y León, dan fe del «compromiso de la Junta y de su presidente con la movilidad sostenible» , apuntó. Una inversión de 15,6 millones de euros que se une a otras políticas como las distintas inversiones de la Junta en materia de transportes.

Un impulso que se traduce en ayudas «como las dirigidas a favorecer la renovación de las flotas; las bonificaciones tanto en el transporte de viajeros por carretera, donde llegamos a la gratuidad en el caso del transporte a la demanda, como en el que se realiza por ferrocarril, siendo la primera Comunidad que aplica un descuento del 25% a los abonos para los viajeros recurrentes» , concluyó la consejera.

El primero de los ocho proyectos de tramos de carril bici interurbanos, ya en marcha, se ubica en la provincia de Valladolid, con un presupuesto de 1,3 millones de euros y 2,5 kilómetros de longitud a lo largo de la VA-113, que une la capital con Santovenia de Pisuerga. Las obras prevén encajar el carril bici en la margen izquierda de la carretera, al objeto de dar servicio a la mayoría de las viviendas, residencias y negocios y evitar el cruce de la calzada de los usuarios con origen o destino en Santovenia de Pisuerga, cuyo acceso está también situado en ese lado de la vía. Asimismo, contemplan un ensanche de la actual calzada por la margen derecha.

El segundo, cuyas obras también han comenzado, está en Salamanca . Recoge un carril ciclista y peatonal entre la capital charra y la localidad de Villamayor, con una longitud de 1,12 kilómetros y una inversión de 457.000 euros . En todo el tramo se adopta una sección transversal total de 5 metros, de los que 2,5 se destinarán al carril bici y 2 metros al carril peatonal. La plataforma se ampliará con 0,50 metros más del lado del carril peatonal hasta llegar a los 5,00 metros.

Ávila acogerá el tercero de los tramos, que prevé la unión de la capital y la localidad de Aldea del Rey, a una distancia de 6,77 kilómetros. Se construirá una pista ciclista independiente y paralela a la carretera AV-900. El recorrido está acotado entre la explanada de acceso peatonal al parque natural El Soto, en la ciudad, y el cruce del Camino del Molino, en las inmediaciones de Aldea del Rey Niño, «dando continuidad a uno existente en la margen derecha de esa vía y con el que se busca evitar la circulación de ciclistas por la calzada», indicó González Corral. Su presupuesto es de 1,44 millones .

En Palencia, la propuesta mide 1,78 kilómetros, con un presupuesto de 769.000 euros . Conectará la capital con el municipio de Villalobón a través de la carretera P-405, informó la consejera, dando continuidad al tramo ya ejecutado por el Ayuntamiento de Villalobón a través de la ampliación del trazado de éste en dos sentidos. Por un lado, dentro del término municipal de Palencia, hasta la intersección con la Avenida de Cuba y la Avenida de la Comunidad Europea. Y, por otro, dentro del término de Villalobón, ejecutando una variante para dar conexión a los barrios del norte con Palencia a través del carril bici, evitando entrar en los viales del núcleo urbano.

En la provincia de Burgos se habilitará el tramo más largo, de 15 kilómetros, con la segunda mayor inversión, 3,42 millones . Unirá la capital, Cardeñajimeno, Castrillo del Val, Carcedo de Burgos, Modúbar de la Emparedada y Cardeñadijo,  con un carril bici bidireccional y una senda peatonal, con una sección de 3,50 metros. Su tramo inicial coincide con la actual Vía Verde del Ferrocarril Santander-Mediterráneo hasta la entrada a Cardeñadijo, por donde continuará hasta conectar con BU-800. Finalizará en el Parque de Fuentes Blancas de la capital burgalesa.

En el caso de León, la actuación se divide en dos proyectos. El primero prevé invertir 1,19 millones para unir los términos municipales de San Andrés del Rabanedo y León capital, con dos carriles-bici unidireccionales y paralelos a cada margen de la carretera CL-623, de 1,9 kilómetros de longitud, en el tramo comprendido entre el límite de San Andrés del Rabanedo con León, a la altura de la Avenida San Ignacio de Loyola, y la glorieta que da acceso a Villabalter.

El segundo tramo de León es el que requerirá de una mayor inversión de los ocho proyectos, 3,74 millones de euros , Unirá mediante carril-bici San Andrés del Rabanedo y Lorenzana, logrando dar continuidad al anterior. La obra consistirá en la construcción de dos carriles-bici unidireccionales y adosados a cada uno de los dos márgenes de la carretera CL-623, con 6,1 kilómetros de longitud.  El proyecto prevé intervenir en el tramo comprendido entre la glorieta de Villabalter y el inicio de la travesía de Lorenzana, atravesando los municipios de Sariegos y Cuadros. La carretera objeto de la actuación está conformada por una calzada de doble sentido, de 7 metros de anchura media, con pequeños arcenes a ambos lados.

El último de los proyectos se asentará en la provincia de Zamora , con la creación de una senda bidireccional de 10 kilómetros (la segunda más larga de las ocho intervenciones), tras una inversión de 1,89 millones de euros . El recorrido se situará en paralelo a las carreteras CL-605 (Zamora-Segovia) y ZA-623 (Moraleja del Vino-Casaseca de las Chanas). 

El trazado zamorano comienza en Moraleja del Vino, en el viario urbano, una vía compartida entre vehículos de motor y bicicletas. Una vez sobrepasada la localidad, discurrirá en paralelo al margen derecho de la ZA-623 hasta su llegada a Casaseca de las Chanas, donde se adentrará por sus calles hasta conectar con la CL-605.

Al salir de esta localidad continuará en paralelo a la CL-605 por su margen derecho hasta llegar a Arcenillas, donde se adentra por sus calles, abandonando la travesía para incrementar la seguridad y comodidad del ciclista. Desde la salida de Arcenillas hasta el punto de confluencia de la carretera CL-605 y ZA-610 el carril discurre por el margen derecho de la CL-605. Una vez en el entronque de las citadas carreteras, el carril bici atravesará la ZA-610 y la ZA-P-1102 a la altura del Vivero La Pérgola, hasta entroncar con el itinerario ciclista municipal.