Violencia de Género
La protección policial a mujeres en Castilla y León alcanza su récord con 2.400 casos, 454 más en un año
El aumento es del 23% en doce meses / Preocupan los casos con alta probabilidad de agresión grave o letal: pasan de 290 a 442 y los que temen por los menores a cargo de la víctima, que se duplican de 31 a 63
En Castilla y León hay 2.400 casos de violencia de género que cuentan con alguna medida de protección policial, según el último balance de Viogén, el sistema de seguimiento integral de la violencia machista sobre las mujeres en cualquier parte del territorio nacional. Son cifras actualizadas a 31 de julio y suponen la incorporación de 454 víctimas en un año, un incremento del 23% con respecto al mismo mes del año pasado . Y son el mayor volumen de casos de la creciente serie histórica.
A esa cifra hay que añadir otros 1.419 casos que también están activos, sometidos a seguimiento policial , aunque sobre ellos, en este momento, no se aprecia riesgo. Sumando unos y otros, en total el número de casos activos en la Comunidad asciende a 3.819, que también marca un nuevo techo de la serie estadística.
El sistema establece otros cuatro niveles, donde sí hay riesgo . La mayoría de ellos están asignados con un riesgo bajo en Castilla y León (1.754 casos, un 19% más que hace un año), mientras que en el último año se han disparado los considerados de riesgo medio (hay 606 en la actualidad frente a los 425 de julio de 2022, una subida del 43%). Las situaciones de riesgo alto son las únicas que, por fortuna, disminuyen (pasan de 41 a 38 ). No varía el número de mujeres sobre las que existe un riesgo extremo, que son dos: se trata de una residente en Burgos y otra en Zamora.
ESPECIAL PROTECCIÓN
La valoración del riesgo puede cambiar en función de las circunstancias que rodean cada caso y que los agentes evalúan de forma periódica conforme a distintas pautas de seguimiento. Además, el protocolo vigente, desde 2019, clasifica como ‘casos de especial relevancia’ aquellos que, siendo de riesgo medio, alto o extremo, confluyen una serie de indicadores que aumentan de manera significativa la probabilidad de que el agresor ejerza sobre la víctima violencia muy grave o letal . Pues bien, en esa situación se encuentran en este momento 442 casos (hace un año eran 290). De ellos, 106 están en la provincia de Burgos y otros 80, en León.
También preocupan los casos donde se detecta que el riesgo que planea sobre la víctima podría extenderse a otras personas que tenga a su cargo, especialmente hijos menores. En esta situación se encuentran en la actualidad 63 archivos del Sistema Viogén, cuando en julio del año pasado eran 31, la mitad.
La estadística recoge información proporcionada por Policía Nacional, Guardia Civil y cuerpos municipales o autonómicos en el conjunto de España. Aunque el número de casos resulta similar al número de mujeres, ambos indicadores no son equivalentes porque una misma víctima puede tener más de un caso abierto (uno por cada agresor) y un mismo agresor puede figurar en varios casos (uno por cada mujer agredida).
En el conjunto del país, los cuerpos policiales dan protección en total a 48.103 casos (el año pasado eran 41.769) al incorporar en los últimos doce meses a 6.334 víctimas con algún tipo de riesgo en España. El incremento nacional, pues, es del 15%, más contenido que en esta Comunidad.
UN 49% MÁS EN PALENCIA
Por provincias, y teniendo en cuenta sólo aquellos casos que cuentan con alguna medida de protección policial (riesgo bajo, medio, alto o extremo), el mayor incremento del último año en Castilla y León se ha producido en Palencia, con un 49% más. La cifra de expedientes pasa aquí de 176 a 262 en un año, con especial incidencia entre los que presentan riesgo medio o alto.
En Soria la variación anual es del 37%, con 56 casos con protección, frente a los 41 de hace doce meses.
Un 33% crece en Zamora el volumen de casos con protección (de 94 a 125) y un 34% en Salamanca (de 169 a 226).
En León el incremento es del 25% (de 353 a 443), en Burgos es el 21% (de 432 521 víctimas con protección policial), en Valladolid el 18% (de 262 a 308) y en Segovia el 13% (de 247 a 279). Ávila, por último, es el territorio con un aumento más contenido de casos con protección policial a mujeres víctimas de violencia machista:de 172 a 180, un 5%.
POR EDADES
Por grupos de edad, los casos activos en Castilla y León (presenten o no algún riesgo) bajan entre los menores de 18 años (pasando de 43 a 53 en el último año) mientras suben en el resto de tramos . Entre las víctimas de 18 a 30 años, la cifra de casos activos supera el millar (1.003, frente a los 898 de julio de 2022). Entre las mujeres de 31 a 45 años repunta hasta los 1.634 casos activos, cuando eran 1.514 un año atrás. El seguimiento a mujeres de entre 46 y 64 también supera el millar, con otras 1.039 (879 hace un año). Y entre las víctimas mayores de 65 años el número de casos activos se mantiene en el centenar.
El Sistema Viogén, dependiente de la Secretaría de Estado de Seguridad del Ministerio del Interior, permite determinar el nivel de peligro de sufrir nuevas agresiones , define los protocolos para dar protección a las víctimas y sus hijos y realizar el seguimiento de cada caso para ajustar las medidas de seguridad.
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Las mujeres víctimas de violencia machista tienen a su disposición el número de teléfono 016, un número gratuito que presta información, asesoramiento jurídico y atención psicosocial inmediata por personal especializado a todas las formas de violencia contra las mujeres. También pueden dirigirse por WhatsApp al número 600 000 016; a través de un chat online en la página web de la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género y por correo electrónico al servicio 016 online: 016-online@igualdad.gob.es.
El Sistema Viogén existe desde hace 16 años. Creado en cumplimiento de lo establecido en la Ley Orgánica 1/2004, de 28 de diciembre, de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, es un sistema policial centralizado en el Ministerio del Interior. En la actualidad dispone de una red formada por 41.666 usuarios habilitados para trabajar en esta red, la mayoría agentes de la Policía Nacional (6.128 efectivos), la Guardia Civil (20.878), Mossos d’Esquadra (517), Policía Foral de Navarra (177), las unidades de Policía Nacional adscritas a las comunidades autónomas de Valencia y Galicia (56 efectivos entre ambas) y los 2.666 agentes locales de los 702 municipios adheridos al sistema. A estos efectivos policiales hay que añadir miembros de Instituciones Penitenciarias, del Poder Judicial y Ministerio Fiscal, de las unidades de coordinación del Ministerio de Igualdad y de las entidades de servicios sociales autonómicos.
Cuando se produce la denuncia –que puede realizar la víctima, un familiar, un testigo o un agente– se da de alta de manera inmediata en el sistema Viogén y los agentes que instruyen las diligencias realizan una valoración de la situación de riesgo por medio de los formularios de Valoración Policial de Riesgo.
A partir de los resultados conjuntos de las preguntas y la investigación policial, el sistema determina uno de los cinco niveles de riesgo que existen: no apreciado, bajo, medio, alto y extremo. Cada uno de ellos conlleva medidas específicas de protección
Los objetivos de este sistema de vigilancia y protección pasan por aglutinar a las diferentes instituciones públicas que tienen competencias en materia de violencia de género e integrar la información de interés que se estime necesaria. Contempla la realización de las valoraciones policiales del riesgo y, atendiendo a esa clasificación, el seguimiento y protección a las víctimas en todo el territorio nacional, así como el diseño de un plan de seguridad personalizado para cada víctima y labores preventivas para tejer una «tupida red que permita el seguimiento y protección de forma rápida, integral y efectiva de las mujeres maltratadas, y de los menores que de ella dependan, en cualquier parte del territorio nacional».