CCOO plantea el cierre de las oficinas de Medina, Aranda, Benavente y Villablino
El sindicato elimina personal administrativo, por envejecimiento y necesidades de recortar gasto, que realiza tareas «obsoletas» como coger el teléfono o recepción de documentación
Comisiones Obreras (CCOO) de Castilla y León plantea el cierre de las delegaciones en pueblos como Medina del Campo, Aranda de Duero, Benavente y Villablino debido a «el envejecimiento del afiliado medio y las necesidades de recorte de gasto» . Así lo indica el sindicato en una carta remitida al Jefe de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social: «La evolución de parte de estas actividades (económicas e industriales), el envejecimiento del afiliado medio y las necesidades de recorte de gasto, obligan a repensar la pervivencia de estas uniones comarcales ; esta circunstancia se produce en cuatro poblaciones, principalmente: Medina del Campo, Aranda de Duero, Bembamente y Villablino». De esta forma enuncia CCOO que está en el aire la continuación de estas cuatro sedes en las provincias de Valladolid, Burgos, Zamora y León; respectivamente.
En el párrafo anterior la organización sindical explica el origen de estas delegaciones: «La dispersión geográfica de la comunidad autónoma, así como la actividad económica en determinadas comarcas, y la inexistencia de medios telemáticas como los hoy existentes, justificó en su día la necesidad de disponer de sedes en todas aquellas localidades con un tejido económico-industrial importante». Unas situaciones que hoy en día no se dan.
En la misma línea, el sindicato apunta que «fruto de un modelo obsoleto, la organización dispone de personal administrativo que realiza tareas con un escaso valor añadido».
Entre estos encargos, CCOO apunta que se encuentra la «recepción de documentación y atención telefónica, respondiendo a un modelo caduco propia de organizaciones del siglo pasado en el que las limitaciones tecnológicas obligaban a seguir el mismo». Debido a estas razones, el sindicato procederá a eliminar este personal administrativo con tareas «obsoletas». «Con este cambio organizativo, CCOO de Castilla y León pretende obtener un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles, en consonancia con la política de polivalencia funcional que intenta implementar, recurriendo en caso de ser necesarios a sistemas de movilidad funcional».
En la misma carta remitida la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social a la que ha tenido acceso este periódico, la organización sindical recoge que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de 58 contratos en 16 centros se «disminuye a 30 trabajadores y 12 centros de trabajo» y «estableciendo asimismo una reducción de jornada para otros dos trabajadores pertenecientes a otros dos centros de trabajo». Es decir, el ERE que en un principio iba a afectar a 58 personas finalmente solo lo hará a 30, 18 trabajadores menos.
En este texto se recoge que debido a «causas económicas, organizativas y productivas» se procede a la «extinción de 30 contratos de trabajo afectando a 12 centros de trabajo, así como también una reducción de jornada -al 50% de la ordinaria durante un periodo de hasta 24 meses- para otros dos trabajadores pertenecientes a otros 2 centros de trabajo».
Posteriormente, CCOO vuelve a incidir que «las razones alegadas por la empresas para fundamentar su decisión de adoptar las medidas de regulación de empleo arriba identificadas son de tipo económico, organizativo y productivo».
En otro punto de la misiva se apunta que tanto la empresa como la representación de los trabajadores afectados «reconocen la existencia de las causas económicas , organizativas y productivas alegadas por la empresa y manifiestan su acuerdo con las medidas de regulación de empleo decididas por la misma».