Este es el mejor torrezno del mundo y está en Castilla y León
El restaurante Antonio de San Esteban de Gormaz se llevó el premio tras competir contra locales de Castellón de la Plana, El Burgo de Osma y Navaleno, entre otros
El concurso del Mejor Torrezno del Mundo ya tiene ganador en 2023. El restaurante Antonio , de San Esteban de Gormaz , se ha alzado con el máximo reconocimiento en la gran final, celebrada en el Virrey Palafox de El Burgo de Osma. En la categoría de aficionados, Jorge Múzquiz se lleva el trofeo para Ólvega y prolongando una exitosa saga. El pasado año fue su padre quien triunfó.
El restaurante Antonio, de San Esteban de Gormaz, se proclamó el 5 de febrero ganador de la ronda del concurso a Mejor Torrezno del Mundo 2023 celebrada en la localidad ribereña y se ganó así su puesto en la final, en la modalidad profesionales , que se disputó en el Virrey Palafox de El Burgo de Osma.
En la segunda ronda eliminatoria , que se celebró en el salón de pensionistas de San Miguel, el jurado eligió el producto presentado por Vicente de Vicente entre los cuatro que optaron al concurso y destacaron la calidad de las elaboraciones de los participantes.
Junto con Restaurante Antonio de San Esteban, el jurado tuvo que catar los torreznos del restaurante Fum de Castellón de la Plana, el bar El Lobo de El Burgo de Osma y el Hostal restaurante La Tablada de Navaleno, que se inscribieron en esta edición en la que ningún participante de la sección aficionados optó al premio .
Para Vicente de Vicente este premio supone “una gran satisfacción y un reconocimiento al esfuerzo y al día a día”, quien explicó que su establecimiento trabaja para que los clientes disfruten de los torreznos y el resto de su producto. Aunque reconoce que sus clientes ya elogiaban sus torreznos, también se agradece que “lo reconozcan de fuera” y recuerda que ya participó en la edición anterior. Aunque no quiso desvelar los secretos para elaborar un buen torrezno, porque todavía tiene que acudir a la final que se celebrará en El Burgo de Osma, aseguró que “cada uno tenemos nuestro secreto”, pero sí dejó entrever que hay claves como el cariño con el que se cocina y “depende mucho de la panceta”.