Marcos Martínez Barazón, el sucesor de Isabel Carrasco al frente de la Diputación de León, ha asegurado este jueves durante el juicio que se sigue en la Audiencia Nacional que la decisión de contratar los trabajos de reputación online que la trama 'Púnica' habría realizado para la institución fue tomada por la exdirigente, que fue asesinada en mayo de 2014.
Martínez, que se enfrenta a una petición de Fiscalía de ocho años de prisión, por los delitos de malversación de fondos públicos en concurso con falsedad, fraude y tráfico de influencias, ha sostenido que su relación con el supuesto 'conseguidor' de la trama, el empresario Alejandro de Pedro, era mínima, limitándose a actuar como correa de transmisión del mismo con Carrasco.
El otrora presidente de la Diputación de León y actual alcalde de Cuadros ha explicado que, tras el asesinato de Carrasco, De Pedro acudió a él para explicarle cuáles eran los trabajos que pactó con la expresidenta. "Me dijo que tenía varios periódicos digitales, que difundía notas de prensa y que tenía unos banners publicitarios", ha relatado.
En esa conversación, ha relatado, De Pedro le "quiso ofrecer la posibilidad de incrementar ese servicio, extenderlo más" y, para ello, "contar con más gente y más medios". "Me dijo que necesitaría aumentar el presupuesto. Ninguna vez lo tuve en consideración, me parecía que estaba el servicio bien cubierto y por parte de la Diputación ni se llegó a valorar ni se llegó a hacer nada más de lo que tenía firmado con Isabel Carrasco", ha afirmado.
"CAMPAÑAS DE IMAGEN PERSONALES"
Según el relato del Ministerio Público, tanto De Pedro como el exalcalde de Cartagena José Antonio Alonso Conesa trabajaban desde 2010 para diferentes administraciones públicas y controlaban juntos un grupo de empresas con las que se presentaban a contratos públicos, "muchos de ellos con objetos simulados".
"El objetivo de todo ello era producir campañas de imagen personales que construyeran una reputación positiva en Internet, vinculada a los nombres del político, que neutralizara las noticias negativas o mejorara su perfil público", sostiene la Fiscalía.
Después de la muerte de Carrasco, los servicios de reputación habrían continuado con Martín Marcos como presidente en funciones de la Diputación y se habrían pagado de manera "subrepticia" a través de la simulación de contratación de publicidad institucional.
El Ministerio Fiscal considera que Martínez tenía "interés por darse a conocer ante los ciudadanos de León, construirse una identidad positiva en las redes sociales y recibir asesoramiento para su promoción política", lo que "fue aprovechado" por De Pedro y Alonso Conesa para concretar con él un nuevo plan, informa Europa Press.
NO SE PREOCUPABA POR SU IMAGEN
El sucesor de Carrasco, sin embargo, ha negado este extremo asegurando que De Pedro solo le ofreció "trabajar la reputación de la Diputación", advirtiéndole de que lo que él hiciera "como presidente podría ser beneficioso o perjudicial para la institución".
Sin embargo, Martínez ha sostenido que nunca estuvo "atento" a lo que se publicaba sobre su trabajo "en prensa, digitales o medios de comunicación". "Bastante tenía cada día de 8 de la mañana a 16 de la tarde para desenvolver el trabajo que teníamos allí. Para eso entendía que teníamos el gabinete de prensa que es el que debía de ocuparse", ha añadido.
Y en relación a la tramitación de este tipo de trabajos, Martínez ha explicado cuál era el procedimiento que se seguía en la Diputación. "Recuerdo como vicepresidente y por delegación de la presidenta que firmaba las facturas o propuestas una vez venían conformadas por el jefe de prensa o por imposición de la presidenta", ha explicado.
Martínez ha reconocido que desde su llegada las partidas presupuestarias de Comunicación estaban enmarcadas en el área de Presidencia, una costumbre mantenida de "legislaturas anteriores". "Siempre fue así, y entendí que era algo normal", ha afirmado.
TODO LEÓN LE "CONOCÍA PERFECTAMENTE"
Por otro lado, Martínez ha sido tajante tras ser preguntado si recibió servicios de asesoramiento o promoción política por parte de Conesa. "Eso es absolutamente falso. Me parece una incongruencia y una falta de respeto hacia mi persona que llevo tantos años en política que una persona que lleva cuatro años de alcalde me pueda asesorar a mí", ha espetado.
Así las cosas, el expresidente ha dejado claro que "nunca" en su "vida" pidió asesoramiento "a nadie". "Porque me entiendo perfectamente capacitado para moverme en la política provincial y regional, que eran a las que yo me dedicaba", ha aseverado, para después añadir: "Creo que toda la provincia de León me conocía perfectamente y no necesitaba que me promocionaran".
Martínez también se ha referido a otro de los hechos por los que se sienta en el banquillo de los acusados: la adjudicación de contratos para la estación de esquí de San Isidro. En este contexto, ha señalado que "la primera o segunda vez" que vio a De Pedro le pidió consejo para "atraer a la gente" y dar uso a los servicios que ofrecía León en materia de esquí.
El otrora presidente de la Diputación ha reconocido que se interesó inicialmente por esta cuestión a pesar de que no era su "cometido". Es por eso que, tras esa conversación, instó a De Pedro a visitar al diputado encargado del turismo. Tras reunirse, el parlamentario y el empresario le comunicaron la realidad de la pista: "estaba en un estado deplorable y muy infrautilizada".
CARRASCO, LA ENCARGADA DEL TRATO CON LA PRENSA
La sesión de este jueves también ha servido para escuchar al que fuera coordinador del gabinete de prensa de la Diputación, Pedro Vicente Sánchez, para quien la Fiscalía pide 7 años de cárcel. A preguntas de su abogado, Sánchez ha subrayado que no participó en ninguna decisión administrativa en los periodos entre 2007 y 2011 ni de 2011 a 2015.
Su cargo de coordinador era de carácter "político", ha continuado, por lo que no tenía "capacidad de decisión ni de gestión". "Mi cargo era en relación a la agenda de la presidenta, a los actos, inauguraciones y visitas que tuviera. Yo me encargaba de que eso estuviera organizado", ha apuntado.
Para explicar cuál era la "relación con la prensa", Sánchez ha explicado que era Isabel Carrasco la encargada de asignar "la publicidad a los medios de comunicación". "En enero tenía una reunión con los directores de los medios. Les llamaba y ella mismo se lo decía. Con posterioridad hacían una comida y a ella iban la presidenta, los vicepresidentes, el portavoz y los periodistas. Yo nunca he ido", ha asegurado.
Preguntado por los proyectos relacionados con la pista de esquí, Sánchez ha dejado claro que nunca tuvo conocimiento "del detalle de los importes y del desarrollo". "Es una competencia exclusiva del área de Turismo. Yo no he estado más que en la primera visita a la estación. Conocimientos concretos de eso no tengo", ha zanjado, negando que le solicitasen opinión sobre la licitación.
Las declaraciones de acusados han concluido con la del que fuera interventor de la Diputación, Manuel Jesús López Sánchez, que ha negado rotundamente haber "troceado" ninguno de los contratos por los que ha sido cuestionado.
La vista oral continuará el próximo 16 de febrero a partir de las 10.00 horas después de que las defensas hayan solicitado al tribunal un plazo para poder estudiar el nuevo escrito de conclusiones de la Fiscalía, que ha modificado algunos de los delitos que introdujo inicialmente.