La brusca reducción de 700 casos en la tasa a siete días marca el inicio de la meseta
El conjunto regional muestra una notable tendencia al descenso
La meseta llega a Castilla y León. Tras superar el pico de la sexta ola, la Comunidad se enfrentará durante las próximas jornadas a un período de estabilidad que llevará a la caída reiterada de los datos Covid. Por ahora, la tasa a siete días marca el avance de esta meseta, que ya se instala en la región.
La tasa de contagio a siete días cae en apenas una semana casi 700 puntos en el conjunto autonómico. Incluso, en la provincia de Segovia se registra una caída superior a los mil casos por cada cien mil habitantes en el dato, tras pasar de 2.720 a 1.630. A nivel regional, la tasa de Castilla y León ha caído de 2.505 casos a 1.840. Es el escenario más favorable para afrontar las próximas semanas, donde la explosión de la variante ómicron hace un mes, con el crecimiento desbocado de los contagios y la incidencia, sufrirá ahora una disminución progresiva que se endurecerá a finales de enero.
En el resto de provincias se aprecia la misma situación. En Burgos y Soria, la caída de la tasa a siete días alcanza los 900 puntos, mientras que en Ávila se fija en los 800 puntos. Por detrás, en Palencia y Salamanca el dato cae en 700 puntos y, en Valladolid y León, más de 500. Cada territorio afronta de una forma similar el decalaje semanal, todas menos Zamora, que reduce su dato en 300 puntos, tras pasar de los 2.090 casos por cada cien mil habitantes a los 1.780, la caída menos notable del conjunto autonómico.
Se abre una nueva etapa en Castilla y León y, como el indicador que ha prevalecido durante toda la pandemia hasta ahora, la incidencia a catorce días, también empieza a notar cómo cae el dato. En este punto, Ávila, Palencia, Salamanca, Segovia y Soria muestran una notable reducción semanal tras la llegada del pico, mientras que Burgos, León y Valladolid reflejan el mismo dato que hace siete días, lo que refleja, al menos, la estabilización en estas tres provincias. De la misma forma que en el dato anterior, Zamora es la única que sube, en unos 500 puntos, pasando de una tasa de 3.490 a 3.950.
Y en hospitales, el escenario es diferente al de otras olas, cuando se alcanzaron los 2.000 ingresados en planta y los 300 en UCI. A expensas de que el dato pueda aumentar de cara a próximas jornadas, las cifras de hospitalizados por Covid se han elevado en unos 30 pacientes en esta última semana. Así, el viernes pasado, la Consejería de Sanidad anotó 789 ingresados en planta y 115 en las unidades de críticos, mientras que este viernes, la ocupación en planta alcanza los 824 ingresados y 110 en las unidades de críticos.
El balance de la última semana deja un clima favorable en la Comunidad. La ahora constante reducción de la incidencia anuncia la llegada de la meseta tras superar el pico, incluso, según confirmaron desde Sanidad hace un par de días, la nueva normalidad podría llegar a Castilla y León en seis u ocho semanas, lo que reflejaría un descenso casi tan pronunciado como el ascenso de la temida ómicron.