Una procuradora sin dedicación de Ciudadanos cobra más que el presidente de la Junta

El presidente de la Junta no solo cobra menos que su gabinete, que los principales cargos políticos de la Comunidad, que una veintena de parlamentarios con dedicación o incluso el alcalde de Valladolid. Una procuradora sin dedicación exclusiva percibe directamente a su bolsillo más dinero que él. Perteneciente a la bancada naranja, Alba Priscila Bermejo es una parlamentaria que durante el primer semestre del año no tenía dedicación exclusiva, aunque desde este mes ocupa el cargo de portavoz adjunta de Ciudadanos, que va rotando entre los integrantes del grupo. 

Sin embargo, en la primera mitad del año percibió un significativo salario en concepto de indemnización por asistencia a plenos y comisiones. En esos seis primeros meses cobró de las Cortes 26.725 euros que, además, tienen la peculiaridad de «no tener fiscalidad», según explican fuentes parlamentarias. Esto significa que los recibe directamente en su cuenta bancaria y el abono de estos gastos «estarían excluidos de la base de cotización».

De este modo, si la retribución de Bermejo se divide por meses, esos casi 27.000 euros se traducen en 4.454,2 euros ‘limpios’ que ha recibido por mes, a lo que se sumará la cantidad que corresponda en la segunda parte del año. Sucede además que cuando los procuradores no tienen una dedicación exclusiva pueden compaginar su actividad política con su profesión y tener otro salario que sí tributa como el de cualquiera. 

La mayor partida que percibe Bermejo proviene de formar parte de las comisiones de investigación: 3.371 euros en el primer trimestre del año y otros  1.968 euros en el segundo.  La parlamentaria participa en siete comisiones, frente a las dos en las que interviene, por ejemplo, el portavoz adjunto de su grupo, Miguel Ángel González, que sí percibe un salario fijo y por las comisiones no recibiría compensación económica adicional. 

El salario del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, asciende a 74.857,9 euros brutos anuales como jefe del Ejecutivo. Una cantidad que en el transcurso de su transformación a ‘netos’, como le sucede a cualquier trabajador, mengua hasta «algo más de 3.400 euros mensuales», según explican las mismas fuentes.