ÁVILA
Los incendios de Ávila calcinan más de 10.000 hectáreas y obligan a desalojar a 900 vecinos
El domingo por la tarde 23 medios aéreos y más de 500 efectivos trabajaban en su extinción
Dramática, dura y difícil jornada de asimilar para Ávila. El incendio originado de forma fortuita por un turismo en la carretera AV P-415, en la mañana del sábado entre Navalacruz y Cepeda de la Mora, mantiene en vilo a la provincia. Ha obligado a evacuar a 900 personas de cuatro poblaciones, y a última hora de la tarde de ayer había calcinado ya más de 10.000 hectáreas, según las estimaciones transmitidas por la Delegación del Gobierno¡. El fuego también fue el causante del corte de cinco carreteras y pese a los esfuerzos de todos los efectivos desplazados acabó por quemar varias viviendas, aspecto sobre el que las autoridades aún no pueden detallar. Junta y Gobierno han solicitado la activación del sistema satelital Copernicus para el incendio de Navalacruz y tener información sobre la magnitud y afección del fuego.
Durante la jornada, los medios terrestres y aéreos centraron sus esfuerzos principales en la defensa de los pueblos afectados al norte del incendio, con lo que no pudieron desarrollar las mismas labores en la zona de monte que se está quemando. Actualmente, la cabeza principal se sitúa al este-noroeste, con varias lenguas de fuego en la parte norte derivadas del incendio principal. Preocupa la evolución que pueda tener en la cara sur, debido a que, si sigue avanzando sin control, pudiera tener afecciones en un futuro a los pueblos situados en dicha dirección.
Hasta el momento se han evacuado unas 900 personas de las localidades de Villaviciosa y Robledillo, ambos anejos de Solosancho, así como Palacios de Sotalbo, Sotalbo y en determinados momentos del día, también Riofrío, donde sus residentes finalmente pudieron regresar, pero advertidos de que en cualquier momento la cercanía de las llamas les puede empujar a salir de nuevo. También está en alerta por posible evacuación Mengamuñoz y La Hija de Dios.
También fue necesario el corte de cinco carreteras, entre ellas la N-502, que se une a la AV-933, AV P – 502, AV P -406 y AV 900. Hay constancia de que hay inmuebles y propiedades afectadas en los diferentes pueblos, pero la propia Delegación admite que por el momento no hay cifras exactas.
A última hora de la jornada, la Junta de Castilla y León tenía todos los «medios propios posibles» involucrados en la extinción de este incendio. De hecho, a lo largo de la jornada más de medio millar de operarios y 23 medios aéreos fueron desplegados en la zona. Por todo ello, el director general de Patrimonio Natural y Política Forestal, José Ángel Arranz, agradeció los recursos aportados por las comunidades vecinas y el Ministerio para la Transición Ecológica y la UME. Arranz destacó que el incendio tiene «muchos kilómetros de su frente estabilizado», si bien con este viento «en cualquier momento puede volver a surgir». Ayer preocupaba la cabeza del mismo, que «no está controlada y los vientos la encaminan a una zona muy forestal». Hasta ahora ha arrasado matorral, pastos y varias hectáreas de pinares. El objetivo «es parar la cabeza con la dificultad que tiene con el viento dominante del oeste», según recoge Ical.
En relación con esto, Arranz señaló que la Comunidad sufrió el sábado 21 incendios forestales, principalmente en León, Zamora y especialmente Ávila, con niveles de gravedad. Este domingo al mediodía estaban «prácticamente controlados», incluso el de Santa Lucía de Gordón (León), que permanecía en nivel 1 porque «tardará en extinguirse al estar en una zona compleja, pero no entraña riesgo para las personas».
Con respecto a este foco de Santa Lucía de Gordón, ayer por la tarde continuaba activo más de un día después y tras haber quemado ya 15 hectáreas de arbolado. La Junta de Castilla y León lo declaró de nivel 1 de peligrosidad por la posible duración de más de 12 horas hasta ser controlado. El fuego se inició de manera intencionada junto al camino que une las localidades de Santa Lucía de Gordón con Ciñera de Gordón, próximo a la carretera N-630.
Así, todos los ojos se centraban ayer en Ávila, donde a lo largo del fin de semana «se dieron circunstancias que obligaron a declarar varios incendios en nivel 2». Explicó que se han podido controlar todos ellos, salvo el de Navalacruz, que «evolucionó negativamente por las fuertes rachas de viento que superaron los 70 kilómetros por hora en algún momento». A última hora de la tarde, además, se declaró otro incendio en la localidad burgalesa de Pancorbo que obligó a conrtar la N-I por el polvo y el humo derivados.
Por su parte, el delegado territorial de la Junta en Ávila, José Francisco Hernández, habló de daños «devastadores al concurrir una serie de circunstancias fatídicas, muy adversas, por la poca visibilidad y las dificultades para controlarlo, con una estrategia clara para delimitarlo». «Es uno de los incendios más graves en los últimos años en Ávila y en Castilla y León», comentó Hernández, quien señaló que había recibido las llamadas del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, y el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, para interesarse por el incendio, que avanzó «en su frente de forma desbocada, superando los cortafuegos».
También pidió a los trabajadores del operativo que trabajen «al máximo nivel pero con su propia salvaguarda». «Intentamos salvar los núcleos urbanos», incidió el delegado, quien apeló a «salvar los bienes no forestales que se puedan dentro de las capacidades».
Fuente: Twitter/@jovenes_CyL