Héctor García: «La lucha leonesa está por encima de nosotros y me conformo con que no se pierda»
HÉCTOR GARCÍA
Criado en el entorno del Curueño, solar de la lucha leonesa, ha sido el luchador más admirado en este siglo. Alejado de la competición deportiva, este licenciado en Educación Física es ya una leyenda viva en el deporte autóctono de León. Su trayectoria deportiva es comparable a un Nadal del tenis, pero en el marco de la provincia leonesa. Además, coinciden los perfiles humanos y deportivos. Héctor es conocido como el ‘Divino de Campohermoso’.
Logró, durante su actividad deportiva, acaparar el medallero más grande de la historia. Solo entre 1985 y 2013 ganó en más de 400 corros. Compitió en distintas partes de Europa en lucha escocesa en cuatro ocasiones, otras tres, en lucha bretona. También fue dos veces el mejor luchador de Europa, en 2001 y 2007. Laureado en más de un centenar de campeonatos provinciales, su palmarés internacional es asombroso. Compitió en Italia, Rusia, Cerdeña, Togo, Uzbekistán...
Defiende que los escolares practiquen la lucha en los colegios, pues hoy, como ayer, es un juego que aporta valores. Se lamenta de que se haya ido perdiendo y de que muchos leoneses lo desconozcan todavía. Y sobre la expansión al resto de la región dice que será el día después de que se haya extendido la lucha por todo Leó.
Pregunta.- ¿Quién le enseñó a luchar?
Respuesta.- Principalmente mi tío José Antonio. También Ángel Alonso, que ha estado muy ligado a la carrera de enseñanza que me han transmitido. Tuve la suerte de tener muy buenos profesores y de poder transmitir lo que me habían enseñado.
P.- Un palmarés de vértigo…
R.- Sí. Los provinciales son los campeonatos más importantes que hay, los que más tradición e historia tienen. Yo me quedo más con todo lo que he vivido a través de la lucha. He competido, y ganado, en países como Islandia, Irlanda, Holanda…Cuando voy a un sitio me gusta ser competitivo, entrenar y tener la posibilidad de ganar. Hemos ido a campeonatos de luchas en Europa, de luchas celtas, en Moscú, en África, con luchas del cinto, en Canarias, haciendo enfrentamientos con ellos… Siempre me ha gustado intentar ir a hacer su lucha y conocerla y, si es posible, ganar.
P.- Lo de ‘Divino’, ¿quién se lo puso?
R.- El ‘Divino de Campohermoso’ fue ocurrencia de un periodista porque yo miraba mucho para el cielo para dedicar determinadas cosas. Al final me quedé con ese nombre, incluso ahora.
P.- Nace en un ambiente de lucha. Cuando llega el momento de elegir su futuro, ¿qué elige?
R.- Educación Física, como mi profesor, que había estudiado lo mismo y era profesor en la universidad.
P.- ¿Cómo llevaba la lucha en su tiempo de estudios? Teniendo en cuenta que no hay federaciones sólidas como en otros deportes...
R.- En mis tiempos de enseñanza he metido lucha donde no había lucha. Los niños quieren hacer deporte y jugar y si lo transmites bien… Creo que la Federación, poco a poco, tiene que ir aprendiendo que hay mucha más competencia y que esto es algo cultural y hay que transmitirlo de una forma muy lúdica.
P.- ¿Volveremos a conocer los años de esplendor de los corros?
R.- Sinceramente, creo que no. La Montaña y los pueblos van perdiendo población y es difícil volver a ver esas fiestas y esos corros que se hacían. Creo que la propia lucha leonesa, me incluyo yo y a todos los que lo hemos hecho durante años, no ha sabido llegar a la gente. La gente joven de hoy no lo va a vivir ni a mamar como nosotros.
P.- Yo vi en Prioro a algunos niños practicar, y lo hacían con ilusión. ¿Algún día podremos ver eso en más sitios? ¿Vais a arrojar la toalla los luchadores leoneses?
R.- La lucha ha pervivido durante mucho tiempo. Por las características de la trashumancia hemos sabido conservarla, pero en otros pueblos no lo han sabido hacer. Creo que, aunque queramos matarla, la lucha está por encima de nosotros. Yo me daría por contento con que no se pierda en las zonas donde se ha mantenido.
P.- ¿Podría algún día practicarse en el resto de Castilla y León?
R.- Primero deberá tener mucho más peso en León. Hay muchos leoneses que no saben lo que es un corro ni lo han visto nunca. Después, ya se podría intentar compartir, pero por ahora me conformo con que no se pierda aquí.
P.- ¿Cuáles son los valores de la lucha?
R.- La lucha leonesa sirve para formar a las personas. Se transmite camaradería, esfuerzo y saber respetar a tu compañero, al contrincante y al árbitro. Me enorgullece que chicos que han estado conmigo vayan a los corros y tengan el reconocimiento de que son luchadores nobles, buenos compañeros tanto con gente de su club como con los contrincantes. Esto es lo más importante, más que tener más o menos cintos.