Valladolid y Salamanca ensayan una terapia con plasma de pacientes curados de Covid

Castilla y León participa en un ensayo clínico nacional para estudiar «la eficacia y seguridad» del plasma sanguíneo procedente de personas curadas de coronavirus en el tratamiento de pacientes en fase aguda de la enfermedad. 

El hospital vallisoletano Río Hortega y el Clínico de Salamanca son dos de los 32 centros del país que prueban la terapia en pacientes graves hospitalizados con infección por SARS-CoV-2 a través de la obtención de plasma hiperinmune.

El Hospital Universitario Puerta de Hierro de Majadahonda coordina este estudio, que incluye a usuarios de Castilla y León, en colaboración con el Centro Nacional de Microbiología del Instituto de Salud Carlos III.

Para ello, reclutan a personas curadas del Covid-19 como «donantes de plasma convaleciente». 

El Centro de Hemoterapia y Hemodonación de Castilla y León, ubicado en Valladolid, ha recogido unidades de veinte pacientes. 

Por otro lado, el Río Hortega ya ha tratado a un enfermo agudo con esta opción terapéutica y el Clínico de Salamanca, a otras tres personas también en situación grave.

El Hospital Universitario de León también forma parte del ensayo, dispone de los protocolos preparados, pero aún no ha tratado a ninguna persona.

Todos los pacientes reciben el tratamiento estándar según los protocolos establecidos para el coronavirus y, además, en un proceso aleatorizado, «cada uno es asignado al azar a recibir tratamiento adicional de una única dosis de transfusión de plasma hiperinmune o a seguir la terapia estándar sin transfusión», según indica a este diario la Consejería de Sanidad de Madrid. 

Durante un mes, a todos se les efectúa un seguimiento de su evolución.

Uno de los cuatro coordinadores del proyecto, Rafael Duarte , también jefe de Hematología y Hemoterapia del Puerta de Hierro, explica que arrancó a principios de abril y se encuentra «en fase de análisis de resultados provisionales», de los que esperan informar esta semana. 

La hipótesis del estudio consiste en que los pacientes en fase aguda «que aún no han tenido la oportunidad de desarrollar una respuesta inmune eficaz contra el virus» se beneficiarán del tratamiento porque estiman que «este plasma podría ayudar a eliminar el virus, a minimizar el daño que causa y a mejorar la evolución clínica y la recuperación de quienes lo reciban». En unos días se conocerá si estas tesis se cumplen o se descartan.

La dirección científica apunta, además, que este plasma es «la única fuente» disponible de anticuerpos frente al SARS-CoV-2 para uso inmediato. 

Rafael Duarte resalta la relevancia de efectuar este ensayo: «Es de enorme responsabilidad , tanto por seguridad como por eficacia, para que nos diga en qué condiciones es útil y en cuáles no». 

Los investigadores buscan identificar también «el riesgo de daño pulmonar mediado por anticuerpos, la respuesta inmune, y evaluar el impacto de esta terapia sobre la evolución de la carga viral y el desarrollo de anticuerpos de los pacientes».

Duarte sostiene que «es imprescindible para generar evidencias científicas correctas sobre la toma de decisiones terapéuticas», y añade que «es importante con cualquier tratamiento, pero especialmente con los que están disponibles».

Cita un ejemplo reciente. El de la hidroxicloroquina . «Se empezó a utilizar con la mejor intención, creyendo que era apropiado para pacientes con Covid, pero hasta que se han hecho estudios del tratamiento no se ha visto que no».

El jefe de Hematología del Puerta de Hierro subraya que «el plasma hiperinmune es relativamente accesible». 

Es más, desde la Consejería precisan que el uso de este tipo de  plasma «no es en sí una idea nueva y se ha aplicado a múltiples enfermedades por virus, en particular en cuadros graves de carácter epidémico para los que no se dispone de vacunas ni otros tratamientos específicos».

La financiación del estudio corresponde a fondos públicos de investigación del Instituto de Salud Carlos III, del Ministerio de Ciencia. 

A principios de abril se inició la inclusión de pacientes en este hospital madrileño y progresivamente se han incorporado enfermos del resto de centros hospitalarios. 

Participan nueve centros sanitarios de Madrid ; siete de Cataluña; los tres de Castilla y León y otros tres de Castilla-La Mancha; dos de Aragón, otros tantos de Navarra, y uno por cada una de las siguientes comunidades: Cantabria, Asturias, Comunidad Valenciana, La Rioja, Canarias y País Vasco.

Ante la confusión surgida al inicio de la pandemia en redes sociales e incluso en medios de comunicación sobre la posibilidad de llamadas a la donación de plasma, desde la Consejería de Sanidad de Madrid insistieron desde el principio en que «no tiene relación con iniciativas de índole comercial, ni con llamadas a la donación», y en que la elección de donantes se efectúa a través de una llamada realizada al usuario desde los centros sanitarios participantes.