El PSCyL pedirá 'honra y homenaje' para las víctimas del franquismo

El secretario general del PSCyL y portavoz del Grupo Socialista, Luis Tudanca , anunció que pedirán a las Cortes de Castilla y León que rindan un homenaje y honren la memoria de las víctimas de la Guerra Civil y la dictadura franquista en la sesión plenaria del próximo miércoles, 19 de febrero. “Ha llegado el momento de hacerlo, de lograrlo, de conocer la verdad”.

“Aún estamos a tiempo”, afirmó Luis Tudanca en una comparecencia en las Cortes, junto a Mercedes Abril , la hija de un represaliado que perdió a su padre en 1936 con tres años y que ahora, pese a su edad, sigue luchando por recuperar sus restos del Valle de los Caídos , una promesa que le hizo a su madre. “Fueron mártires, no criminales”, exclamó.

Emocionado en algunos momentos al escuchar su testimonio, Tudanca presentó la proposición no de ley que se debatirá en la cámara autonómica y que espera reciba un “apoyo prácticamente unánime”, a través del ejemplo que supone Mercedes Abril a su juicio del “sufrimiento” vivido durante décadas y de la batalla por que la memoria de las víctimas siga viva.

La iniciativa del Grupo Socialista pide a las Cortes que insten a la Junta a reconocer y honrar la memoria de las personas represaliadas; a ayudar a las familias en las tareas de búsqueda de sus familiares, su exhumación e identificación y su inhumanción con la “debida dignidad”, y a dar traslado a la Secretaría de Estado para la Memoria Democrática y a las asociaciones memorialistas de Castilla y León.

En ese sentido, Luis Tudanca destacó que la vicepresidenta Carmen Calvo haya anunciado que se dará un impulso a la norma, después del hito histórico que a su juicio supuso la salida de los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos, donde recordó los represaliados continúan enterrados sin recibir sepultura de forma digna, como el es el caso de Rafael Abril , padre de Mercedes.

Tudanca señaló que “queda prácticamente todo” por hacer en Castilla y León, aunque en gran parte del territorio no hubo combates y Guerra Civil, si bien señaló que continúan muchos restos enterrados las fosas comunes en lugares como Estépar o La Pedraja (Burgos), así como en León o Valladolid. Por ello, confió en que entre todos sean capaces de “hacerlo ya”, porque a su juicio ésta es la “última oportunidad”.

Testimonio

Abril relató, junto a Tudanca y el senador Manuel Escarda y el abogado Eduardo Ranz , sus recuerdos de vida. Explicó que a los tres años, cuando su madre estaba a punto de dar a luz a su hermano, que terminó muriendo al poco de nacer, su padre fue detenido por ser “socialista” y sin haber hecho “nada”, en Clarés de Ribota , donde era jefe de estación, pese a estar “militarizado” por los “nacionales”.

Mercedes Abril rememoró el último abrazo que le dio su padre a ella y a su madre embarazada, antes de que fuera llevado a un lugar que desconocía. Recordó con enorme tristeza aquellos días en que se quedaron solas y sin saber nada de su paradero, hasta que comenzaron a recibir postales de su padre, que se encontraba en el mercado de abastos de Calatayud . Tras cuatro cartas, la comunicación se cortó y solo supieron por un remite enviado el mensaje de “salió”.

Además, señaló que tuvieron que dejar su casa, la estación de trenes, que había sido registrada y revuelta, al llegar otro jefe de estación, pues determinaron las autoridades que su padre se había ausentado de su puesto. Al no tener familia en aquella zona, volvió con su madre y sus abuelos maternos a Valladolid, donde ha vivido desde entonces.

Hasta la década de los 50 señaló que acudía a llevar flores al cementerio de Calatayud, si bien en una ocasión le advirtieron de que no fuera porque los restos de su padre ya no se encontraban allí, sino que los habían llevado al Valle de los Caídos. Además, recordó que no podía decir “nada a nadie” de lo sucedido y denunciarlo porque se decía que era “roja” y era “mala”. "Que se haga justicia", pidió.

Con la llegada de la democracia y en los últimos tiempos ha emprendido una lucha que le permitió el pasado año poder acceder a una cripta donde estaban enterrados los restos de los represaliados junto a su padre. En ese momento, dijo, sintió que estaba junto a él. Ahora, se están terminados los trabajos necesarios para que en primavera se puedan extraer los restos mortales, cuyo deseo es enterrarlos junto a su madre, después de que ambos hayan estado tantos años “separados”.

Finalmente, el abogado Eduardo Ranz explicó que se llevaron 71 fosas al valle de Cuelgamuros (Madrid), con los restos de unos 228 “compañeros”, que fueron allí inhumados, por lo que consideró es “hora de que vuelvan todos ellos a casa”. El letrado, con raíces leonesas, apeló al sentido común y democrático porque remarcó que el tiempo es un recurso valioso, pues indicó que “ni se compra, ni se vende”, y la situación generada se ha perpetuado.