El turismo extranjero da la espalda a Castilla y León

El turismo extranjero que elige España como destino continúa alimentando el tópico de sol y playa que acompaña al país. De costa para dentro, el atractivo es menor para los viajeros foráneos, como demuestran los datos brindados por elInstituto Nacional de Estadística, que desvelan el desplome de Castilla y León en esta parcela. 

Líder en turismo de interior -fue el destino elegido por los españoles para el turismo rural en 2019-, el atractivo de Castilla y León pasa casi inadvertido fuera de las fronteras españolas, que el pasado año se abrieron para recibir a 83,7 millones de visitantes, un número que a nivel nacional que lleva siete años en constante crecimiento.     

La Comunidad fue el destino que escribieron en su guía de viajes 1.309.594 personas durante el pasado año, según los datos expuestos en la Estadística de Movimientos Turísticos en Fronteras (FRONTUR). Esto, traducido a números, significan 64.915 turistas extranjeros menos recorriendo el territorio castellano y leonés.

El 2019 finalizó con la segunda caída interanual consecutiva de turismo extranjero en la Comunidad. Ya en 2018, se vivió un descenso del 5,76% al que en 2019 le siguió una nueva caída del 4,7%. En España, sólo la Región de Murcia sufrió un descenso más pronunciado -un 6,9%- que el experimentado en Castilla y León.

En un 2019 en el que el turismo extranjero marcó un nuevo récord nacional por séptimo año consecutivo y en el que la tendencia ha sido la de un incremento de visitantes cercano al 1%, Castilla yLeón ha sido -junto a La Rioja, Baleares,Canarias y Murcia- una de las cuatro autonomía que han ido a contracorriente en este aspecto. 

La región castellano y leonesa, no obstante, continúa en la vanguardia de las comunidades de interior que intentan hacer frente a las regiones bañadas por el mar. En términos generales, de los territorios sin costa, sólo Madrid ha atraído a más turistas foráneos que Castilla y León.

En cuanto a número de visitantes, la Comunidad ocupa el noveno puesto del ranking nacional, que lideran Cataluña, Baleares y Canarias -a pesar de que las dos ínsulas ha sufrido un descenso, sobre todo en los meses claves de verano como consecuencia del ‘efecto Thomas Cook’-.

Castilla y León se ubica en términos turísticos por debajo de Andalucía, Comunidad Valenciana, Madrid, Galicia y País Vasco y supera a otras regiones con vistas al mar como, por ejemplo, Murcia, Cantabria y Asturias. 

EL GASTO, A LA BAJA

El descenso en el número de visitantes foráneos en los paisajes castellano y leoneses ha tenido su reflejo en el gasto que los mismos han realizado durante su estancia en la Comunidad.

Los visitantes de España llegados desde lejos de sus fronteras el pasado año invirtieron 92.000 millones de euros durante su estancia, un 2,82% más que el anterior periodo.

De cada 100 euros de gastados por los turistas extranjeros, 0,73 fueron recibidos por los negocios castellano y leoneses, que el pasado año alcanzaron una cifra de 676,04 millones de euros; un número notablemente inferior al de 2018, cuando fue un 5,10% mayor.

Castilla y León encadena también en segundo año consecutivo de descenso en el terreno del gasto realizado por sus visitantes, colocándose en el ranking nacional como la novena comunidad que menos dinero genera del turismo internacional.

La afluencia de viajeros extranjeros en Castilla y León es aún notable respecto a las comunidades vecinas, sin embargo es uno de los destinos en el que sus visitantes acortan más su estancia. El pasado 2019, los alojamientos autonómicos registraron seis millones de pernoctaciones, casi 900.000 menos que el anterior año.

El turista alarga su estancia enCastilla y León una media de 4,28 días -un 9,71% menos que en 2018-. En todo el país sólo hay una comunidad autónoma en la que las visitas turísticas internacionales sean más breves: en País Vasco, donde la estancia media fue del 4,13 noches, frente a las 7,16 que marcó la media nacional, que sufrió un descenso.

La Comunidad tampoco recibe datos optimistas en el terreno del gasto medio por turista, donde no alcanza ni la mitad de la media Española.

Durante sus estancias, el turista extranjero ha gastado en sus visitas a España una media de 1.102 euros. En Castilla y León el visitante invirtió una media de 516 euros por persona durante su estancia, un dato que apenas ha sufrido variación respecto al año anterior, pero que sí ha crecido casi un 10% en el gasto diario, para alcanzar los 110 euros por día.

En comparativa con el resto de comunidades autónomas españolas, Castilla y León ocupa el último lugar en el gasto medio. Ninguna región recibe menos retorno económico por parte de sus visitantes. Por delante, de cerca, Extremadura, Castilla-La Mancha o Navarra.