El Arzobispado pide a la exabadesa que deje de "confundir" sobre la propiedad del monasterio de Belorado

El Arzobispado de Burgos ha pedido a la exabadesa del Monasterio de Belorado, Laura García de Viedma, que no "intente confundir" sobre la propiedad del convento en el que las exmonjas clarisas siguen atrincheradas y del que solo saldrán si así lo determina un juzgado.

La Comisión Gestora de los Monasterios de Belorado, Orduña y Derio responde así a un comunidado de la exabadesa en el que insiste en que al haber creado una nueva asociación civil es la propietaria del patrimonio de los Monasterios.

A través de un comunicado, este organismo creado pro el Arzobispado de Burgos recuerda que "no consta que esté registrada como tal ante la autoridad competente". Como ya se manifestó en ocasiones anteriores, la transformación de una entidad religiosa en una asociación civil "requiere el permiso y la forma de proceder que dispone la Santa Sede, que no se ha respetado en este asunto".

Asimismo, remarca que al comisario pontificio, Mario Iceta, arzobispo de Burgos, "como representante legal, le asiste el derecho de administrar todos los bienes muebles, inmuebles, dinerarios y financieros de los monasterios".

Por ello, desde la Comisión Gestora se insiste en que es "una acusación falsa hablar de usurpación ilegítima de las cuentas bancarias ni se requiere para ello ningún procedimiento judicial".

Todas las actuaciones realizadas por el comisario pontificio y la comisión gestora están" realizadas dentro de la más estricta legalidad". Remarca que "todas las entidades bancarias y las administraciones públicas, una vez aportada la documentación, han reconocido la representación legal del comisario pontificio.

En este punto, desde el Arzobispado se pone de manifiesto que quien ha admitido los impagos desde el primer momento es la exbadesa y las exmonjas. Unas deudas que, según la Comisión Gestora, ascienden a 42.000 euros, sin contar los créditos bancarios. "obran en nuestro poder facturas que llevan meses sin ser abonadas por la gestión de la exabadesa (aproximadamente, y con exclusión de los préstamos, solo en facturas se adeudan unos 42.000 euros, algunas de las cuales tienen hasta 2 años de antigüedad), y que ella misma nos ha remitido", destacan desde la Comisión Gestora, que tiene "documentadas" estas deudas.

No obstante, "desconocemos la amplitud de de las obligaciones financieras" de los monasterios porque la "señora García de Viedma sigue ilegalmente impidiendo el acceso a su gestión", pese haber pedido información mediante cinco requerimientos (el primero con fecha de 6 de junio, y el último en el día de ayer)".

El Arzobispado destaca que "lejos de constituir una asfixia económica" de los monasterios "ha sido la algunos de los monasterios de la Federación de Nuestra Señora de Aránzazu (y de otras federaciones) los que están aportando fondos para hacer frente a las facturas y nóminas que la misma señora García de Viedma nos sigue enviando".

Respecto a un posible desalojo de las exmonjas, el Arzobispado señala que sus servicios jurídicos siguen trabajando "para que los tribunales resuelvan, para hacer prevalecer la justicia y el ordenamiento jurídico vigente".