CISMA EN LA IGLESIA
Las monjas de Belorado arremeten contra el arzobispado por "irrumpir" en el monasterio
Las clarisas acusan al enviado del arzobispo de Burgos de exigirles "las llaves y los documentos del monasterio a viva voz y sin documento alguno que lo avale"
Suma y sigue. El culebrón de las monjas de Belorado y su cisma con la Iglesia lejos de amainar cada vez está más enquistado. Ahora, las clarisas del monasterio de Santa Clara de Belorado en Burgos vuelven a a arremeter contra el arzobispo de Burgos, Mario Iceta, al acusar a la delegación enviada este jueves por el Comisario Pontificio de "irrumpir de forma no autorizada" en el monasterio y "exigir las llaves y la documentación a viva voz y sin documento alguno que lo avale".
Además, según detallan en un comunicado difundido en sus redes sociales, acusaron al arzobispo burgalés de "usurpar su representación legal accediendo a la administración de las propiedades y el control de las cuentas bancarias", a las que dejaron de tener acceso el pasado 4 de junio.
En la nota, recogida por Ical, las monjas de Belorado señalan que una delegación formada por la secretaria de la Federación de Clarisas Nuestra Señora de Aránzazu, sor Carmen Ruiz, el apoderado del Comisario Pontificio, Rodrigo Sáiz y el notario del Tribunal Eclesiástico, Carlos Azcona, se personó en el monasterio "para exigir la entrega de las llaves y la documentación del monasterio, incluyendo hasta las nóminas", así como para citarlas a declarar ante el Tribunal Eclesiástico del Arzobispado de Burgos, para defenderse "por un delito de cisma, con amenaza de excomunión en caso de no acudir al mismo".
Burgos
Portazo de las clarisas de Belorado al arzobispado de Burgos: se niegan a dialogar
Diario de Castilla y León | El Mundo
"Aprovechando una visita autorizada recibida en el locutorio, han irrumpido en el mismo de forma no autorizada el secretario de Mario Iceta, la secretaria Federal, y el apoderado de don Mario", continúan las monjas en el escrito. "Exigían llaves y documentación del monasterio, y que la secretaria Federal pudiese entrar en el mismo, todo ello de viva voz, sin documento alguno que lo avale", añaden.
Asimismo, indican que durante esta visita ofrecieron una ayuda económica "puesto que han usurpado la titularidad de las cuentas corrientes, dejándonos sin acceso a los fondos obtenidos con nuestro trabajo, y donados por nuestros benefactores".
"Previa a la entrada al locutorio, ya habían sobrepasado la prohibición de entrar en propiedad privada que figura a la entrada del perímetro del monasterio", afirman las clarisas, que publican también una imagen en la que se puede ver el cartel de ‘Propiedad privada. Prohibido el paso’ que hay a la entrada del monasterio. Señalan así que ante tales hechos "se conminó a los visitantes inesperados a abandonar las dependencias", y añaden que en el caso del apoderado del Comisario Pontificio "fue necesaria la presencia de la Guardia Civil para conseguirlo".
"Realmente nos resulta difícil calificar todos estos hechos como signos de paciencia y diálogo", concluyen las monjas en el escrito, al que acompañan con una imagen del decreto del Tribunal Eclesiástico del Arzobispado de Burgos donde se les cita a comparecer ante este tribunal, en un plazo de diez días naturales a partir de la recepción de este decreto.