Farmacia y administraciones trabajan en acercar medicinas a domicilios en Burgos

Hace apenas unos días el Consejo General de Farmacéuticos proponía a las autoridades sanitarias la posibilidad de dispensar medicamentos a domicilio a personas con dificultades para salir de su vivienda y evitar además exponerles a riesgo de contagio. En la provincia burgalesa el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Burgos está trabajando con la concejalía de Sanidad del Ayuntamiento de Burgos y con la Diputación para desarrollar un protocolo de actuación que permita dispensar los medicamentos a domicilio a determinados sectores de la población. 

«Estamos tratando de coordinar un sistema que nos permita acercar a los domicilios de personas con alguna discapacidad, dependientes o mayores solos que tienen dificultades para salir de casa, las medicinas que necesitan», comenta la concejal de Sanidad, quien apunta que «por el momento no hay nada cerrado porque queremos coordinarnos con otras administraciones».

En este sentido, el presidente del colegio, Miguel López de Abechuco señala que «deberán ser las  administraciones las que se encarguen del reparto porque para los farmacéuticos no es posible» y añade que «ya tenemos entre los compañeros los primeros contagios y algunas farmacias han tenido que cerrar por este motivo», por eso «no podemos hacernos cargo de la labor de entrega».

Hasta el momento, trabajadores sociales de la Administración local y voluntarios de Protección Civil «se están encargando de llevar las medicinas a determinadas personas en casos puntuales», explica la concejal de Servicios Sociales, Sonia Rodríguez, aunque el objetivo a corto plazo es precisamente «conseguir un protocolo de actuación definido».

Crónicos

Por otra parte, el presidente del colegio burgalés señala que la Consejería de Sanidad ya ha realizado los cambios oportunos en el sistema de receta electrónica de Castilla y León con el objetivo de que «todos los pacientes con tratamientos crónicos puedan recoger los medicamentos en las farmacias con su tarjeta sanitaria, ampliando hasta dos meses seguidos la validez de sus tratamientos».

Para facilitar la retirada de fármacos a pacientes crónicos incluidos en receta electrónica «también se ha aumentado la cantidad a dispensar y estamos trabajando con la consejería para que lo antes posible se pueda recoger en la farmacia, con receta electrónica, la medicación que requiere visado, sin necesidad de contar con las recetas en papel»